Entrevista
Andrés Vaca, el sanfrancisqueño que brilló en La Voz: “Fue una caricia a mi artista”
/https://lvdsjcdn.eleco.com.ar/media/2025/08/andres_vaca_1.jpg)
Integró el equipo de Miranda!, vivió una experiencia que lo marcó y emocionó a todo San Francisco. En una entrevista, compartió su paso por La Voz Argentina, recordó a Pablo Utrera y reveló su amor por la música, su ciudad y sus sueños.
“Ahora tengo ganas de más”. La frase resume lo que siente Andrés Vaca luego de su paso por La Voz Argentina, el reality musical que se emite por Telefe y que le permitió mostrar su arte en una de las plataformas más populares del país. Sanfrancisqueño, artista y soñador, Andrés fue elegido por Miranda!, vivió el vértigo de los ensayos, la emoción del escenario y la devolución de grandes referentes. Hoy, ya fuera del programa, habla con gratitud y entusiasmo sobre lo que vivió.
“Estoy muy contento, muy agradecido con la oportunidad de poder mostrar mi artista después de tanto tiempo de trabajo. Fue algo que busqué desde que llegué a Buenos Aires hace 14 o 15 años. Ahora tengo ganas de más”, comentó en diálogo con Posta / La VOZ DE SAN JUSTO.
De San Francisco a los escenarios
La historia de Andrés con la música comenzó de chico, cuando iba al Ipem N° 145 “Dr. Francisco Ravetti”. Una clase de música fue el punto de partida. “Mi profe de música me dijo que notaba que yo tenía algo para la música, y eso despertó el fuego en mí. Justo tenía a mi tío Julio que canta, le conté y me recomendó a Rossana Pampiglione, que fue mi primera maestra de canto y a quien quiero mucho. Fue hermoso”, recordó el artista.
Esa primera conexión con el canto se transformó en vocación. Andrés empezó a estudiar, cantar, presentarse, formarse y soñar. Y lo hizo desde su ciudad, pero también con la mirada puesta en horizontes más amplios. Su vida lo llevó a Buenos Aires, pero su corazón sigue estando en San Francisco.
“Toda mi familia está en San Francisco”, remarcó. “Hace cinco meses que no voy, por los ensayos de La Voz y otras cuestiones, pero ahora tengo muchas ganas de ir. Creo que el próximo feriado voy a volver”, agregó.
Cuando se le pregunta qué significó el apoyo recibido desde San Francisco, Andrés no duda: “Estoy muy agradecido con todos. Recibí mucho amor, muchos mensajes apoyándome, diciendo que tendría que haber pasado, que canté muy bien. Fue hermoso. Una caricia a mi artista. Ese reconocimiento vale más que haber pasado de ronda. Quedé muy contento con todo lo que pasó”.
Ese ida y vuelta afectivo con la gente de su ciudad se mantuvo constante durante su paso por el programa. “Sentí el acompañamiento, el afecto de la gente que me conoce de toda la vida. De quienes me vieron cantar por primera vez y de los que tal vez recién ahora se enteran que soy músico. Todo eso me llegó, lo valoro mucho y me emociona”, señaló.
/https://lvdsjcdn.eleco.com.ar/media/2025/08/andres_vaca.jpg)
Un casting, un sí y una oportunidad
Su ingreso a La Voz fue tan natural como inesperado. “Mandé un video por TikTok y después se contactó la producción conmigo. Me dijeron que tenía que audicionar. Me pasaron una canción que amé y dije ‘vamos con esa’. Fui al ensayo y la otra semana ya tenía que ir a audicionar”, detalló.
La audición fue su primera gran prueba. Y fue también una descarga emocional. “Fue un shock total, no lo podía creer. Ya con estar ahí cantando era un logro, pero que se dieran vuelta, mi cara lo expresó todo. Fue enseguida, ni bien arranqué. Fue como, ‘¿esto está pasando de verdad?’. Quedé en shock”, remarcó.
El momento en que Miranda! gira el sillón y lo elige marcó un antes y un después. “Sentí como un bajón, pero no por algo negativo, sino por la intensidad de la emoción. Fue como: ya está, estoy adentro. Y eso, más el shock, fue muy fuerte”, detalló.
Los días previos fueron de mucho trabajo, pero también de mucha ansiedad. “Estaba súper nervioso. Ese escenario es muy imponente. Por más que uno estudie, practique, nada te prepara para eso. Me sentí muy nervioso”, añadió.
A pesar de las tensiones, Andrés pudo avanzar. Y eso le permitió vivir otro momento inolvidable: el entrenamiento con Miranda! y con Valeria Lynch. “Ensayamos durante dos semanas. Los ensayos con Valeria fue lo más sorprendente. No la conocía personalmente y nos dijo cosas hermosas. Son artistas consagrados, tienen esas palabras que te quedan. Te dejan pensando, te motivan”, argumentó.
En ese proceso, además de técnica vocal, se trabajó la puesta en escena, la actitud, la seguridad. “Nos hablaron mucho de la performance, de cómo transmitir, de conectar con lo que estamos cantando. Eso para mí fue muy valioso”, indicó.
Instructor de Pilates y artista en expansión
Además de cantante, Andrés es instructor de Pilates, una profesión que también lo representa y que surgió de manera natural a partir de su formación en teatro musical. En este marco, manifestó: “Empecé a bailar, después estudié, me estructuré, y arranqué a dar clases. Me fue llevando un poco hasta esta profesión que amo”.
Esa doble faceta —artística y corporal— forma parte de su identidad. “Me gusta enseñar, conectar con las personas, acompañar procesos. Y también me gusta subirme a un escenario y contar algo con mi voz. Todo eso soy yo”, destacó.
Con la exposición que le dio La Voz Argentina, siente que se abren nuevas puertas. “Creo que de acá vienen cosas muy lindas. Ya me lancé al universo. Estoy creyendo que se puede. Estoy a full con eso. Hay que seguir y meterle”, afirmó con convicción.
El recuerdo de Pablo Utrera
Uno de los momentos más emotivos es cuando se menciona a Pablo Utrera, también oriundo de San Francisco, quien participó en la edición 2012 de La Voz y falleció trágicamente en 2015. Ambos compartieron escenario en más de una ocasión.
“Yo sabía que Pablo también había sido elegido por Miranda!. Lo conocía, hemos cantado juntos en algún show con mi compañero Diego. Él vino a cantar un par de temas. Después lo vi en su audición en La Voz. Fue hermoso. El paso de Pablo fue hermoso”, expresó
El recuerdo de Pablo sigue presente entre quienes lo conocieron. Andrés lo trae desde la emoción, desde el compañerismo, desde el orgullo de haber compartido algo más que una canción. “Fue muy lindo todo lo que hizo. Me pone feliz que se lo siga recordando con tanto amor”, señaló.
El corazón siempre vuelve a casa
Para Andrés, San Francisco es más que un punto de partida. Es refugio, es contención, es identidad. “San Francisco es mi ciudad. Siempre que quiero tranquilidad o necesito reconfortarme, estar con los míos, vuelvo. Ahí está mi familia, mis amigos. Siempre vuelvo cuando necesito contención”, detalló.
Y aunque su vida hoy transcurre en Buenos Aires, esa conexión no se corta. “Sé que allá tengo mi lugar. Sé que cuando necesito cargar energías, ahí me espera mi gente. Me esperan con el mismo cariño de siempre”, concluyó.
/https://lvdsjcdn.eleco.com.ar/media/2025/08/tapa_posta_2_de_agosto.jpeg)