Zarpó de Ushuaia el velero liderado por un veterano de Malvinas que busca llegar a la Antártida
El velero Galileo zarpó en la madrugada de este lunes desde Ushuaia.
El velero "Galileo", liderado por el ex combatiente de Malvinas Nilo Navas, zarpó esta madrugada desde la ciudad de Ushuaia, en Tierra del Fuego, y ya recorre las primeras millas de su travesía rumbo a la Antártida Argentina, informaron a Télam fuentes de prensa de la expedición.
El sobreviviente del hundimiento del "Crucero General Belgrano" durante la guerra de 1982 partió a las 3.30 de la capital fueguina junto a otros cuatro tripulantes con el objetivo de aprovechar una ventana meteorológica y atravesar el peligroso Pasaje de Drake, donde se unen los océanos Atlántico y Pacífico.
Los primeros cuatro días de la aventura serán claves para alcanzar la península antártica navegando la mayor parte a vela, y desde allí poner rumbo a destinos como la Base Esperanza, donde tienen previsto visitar la escuela provincial Nº38 "Presidente Raúl Alfonsín", dependiente del gobierno provincial y considerada la más austral del mundo.
Navas llegó a Ushuaia el jueves 2, para ultimar los preparativos del viaje que planifica desde hace tres años, y que tuvo como antecedentes otros recorridos anteriores hasta Puerto Deseado, la Isla de los Estados y el lugar exacto donde se hundió el Belgrano durante el conflicto bélico con Gran Bretaña.
"Venimos con una gran expectativa y con la misión de seguir dejando un mensaje de reafirmación de la soberanía en todo su territorio bicontinental", sostuvo el veterano de guerra que también es profesor universitario.
En los días previos a la travesía, el también presidente de la Fundación Malvinas Argentinas de Bahía Blanca se reunió con el resto de la tripulación del "Galileo": el capitán Andrés Antonini, el piloto Damián Galera, el patrón navegante Matías Miguez y el contramaestre Mario Monserrat.
La embarcación estuvo fondeada en el muelle del club de actividades náuticas de Ushuaia durante todo 2019, desde que los expedicionarios terminaron su último periplo a Isla de los Estados.
Navas combinó las preparaciones logísticas, que incluyeron la carga de 600 litros de combustible, agua y comestibles para 50 días, con visitas a centros de ex combatientes y autoridades navales.
El Centro de Ex Combatientes de Malvinas en Ushuaia volvió a confiarle una imagen de la Virgen de Luján que estaba entronizada en el Monumento a los Caídos durante la Guerra, para que la traslade a suelo antártico.
Es la misma imagen bendecida por el Papa Francisco que el "Galileo" había trasladado años atrás a Buenos Aires para el inicio de una peregrinación por todo el país a pedido de la Comisión Nacional de los Familiares fallecidos durante el conflicto.
Tanto Navas como los demás tripulantes tuvieron que realizar cursos de navegación en hielo, mejorar sus conocimientos sobre la cartografía y meteorología de la zona, y consultar a numerosos expertos antes de emprender la travesía a la Antártida.
También tuvieron que gestionar múltiples autorizaciones relacionadas con el tratamiento de residuos, la interacción con la fauna autóctona y otros requisitos fijados por las autoridades.
El "Galileo", de 11.50 metros de largo, navega por estas horas a unos 8 kilómetros por hora por el Canal Beagle, en una jornada que luce gris, con poco viento y buena temperatura, aunque sus tripulantes saben que apenas es el comienzo y que los espera el Drake, si quieren cumplir la hazaña de llegar hasta el Continente Blanco.
El sobreviviente del hundimiento del "Crucero General Belgrano" durante la guerra de 1982 partió a las 3.30 de la capital fueguina junto a otros cuatro tripulantes con el objetivo de aprovechar una ventana meteorológica y atravesar el peligroso Pasaje de Drake, donde se unen los océanos Atlántico y Pacífico.
Los primeros cuatro días de la aventura serán claves para alcanzar la península antártica navegando la mayor parte a vela, y desde allí poner rumbo a destinos como la Base Esperanza, donde tienen previsto visitar la escuela provincial Nº38 "Presidente Raúl Alfonsín", dependiente del gobierno provincial y considerada la más austral del mundo.
Navas llegó a Ushuaia el jueves 2, para ultimar los preparativos del viaje que planifica desde hace tres años, y que tuvo como antecedentes otros recorridos anteriores hasta Puerto Deseado, la Isla de los Estados y el lugar exacto donde se hundió el Belgrano durante el conflicto bélico con Gran Bretaña.
"Venimos con una gran expectativa y con la misión de seguir dejando un mensaje de reafirmación de la soberanía en todo su territorio bicontinental", sostuvo el veterano de guerra que también es profesor universitario.
En los días previos a la travesía, el también presidente de la Fundación Malvinas Argentinas de Bahía Blanca se reunió con el resto de la tripulación del "Galileo": el capitán Andrés Antonini, el piloto Damián Galera, el patrón navegante Matías Miguez y el contramaestre Mario Monserrat.
La embarcación estuvo fondeada en el muelle del club de actividades náuticas de Ushuaia durante todo 2019, desde que los expedicionarios terminaron su último periplo a Isla de los Estados.
Navas combinó las preparaciones logísticas, que incluyeron la carga de 600 litros de combustible, agua y comestibles para 50 días, con visitas a centros de ex combatientes y autoridades navales.
El Centro de Ex Combatientes de Malvinas en Ushuaia volvió a confiarle una imagen de la Virgen de Luján que estaba entronizada en el Monumento a los Caídos durante la Guerra, para que la traslade a suelo antártico.
Es la misma imagen bendecida por el Papa Francisco que el "Galileo" había trasladado años atrás a Buenos Aires para el inicio de una peregrinación por todo el país a pedido de la Comisión Nacional de los Familiares fallecidos durante el conflicto.
Tanto Navas como los demás tripulantes tuvieron que realizar cursos de navegación en hielo, mejorar sus conocimientos sobre la cartografía y meteorología de la zona, y consultar a numerosos expertos antes de emprender la travesía a la Antártida.
También tuvieron que gestionar múltiples autorizaciones relacionadas con el tratamiento de residuos, la interacción con la fauna autóctona y otros requisitos fijados por las autoridades.
El "Galileo", de 11.50 metros de largo, navega por estas horas a unos 8 kilómetros por hora por el Canal Beagle, en una jornada que luce gris, con poco viento y buena temperatura, aunque sus tripulantes saben que apenas es el comienzo y que los espera el Drake, si quieren cumplir la hazaña de llegar hasta el Continente Blanco.
El velero Galileo zarpó en la madrugada de este lunes desde Ushuaia.