UN DESAFÍO DE ALTURA
Una experiencia inolvidable fue la que vivieron los integrantes del Club de Montaña Champaquí de nuestra ciudad, quienes pudieron llevar a cabo una Travesía Integral de Las Cumbres del Volcán Antofalla.
Los integrantes del Club de Montaña Champaquí de nuestra ciudad fueron parte de una Travesía Integral de Las Cumbres del Volcán Antofalla, donde se encaminaron a esta nueva aventura montañera, tratando de conseguir las siete cumbres posibles, 3 de ellas vírgenes, es decir que no tiene nombre propio ni han sido escaladas en los tiempos modernos.
Tantos años de planificación conjunta con colegas salteños, les daba cierta confianza extra en el proyecto, porque los resultados exitosos a lo largo de tantas expediciones, así lo corroboraban.
Durante casi 10 días, los montañistas Christian Vitry, Emilio González Turu, Julieta Balza, Javier Echenique, Adrián Gandino, Gastón Vitry, Gerardo Casaldi, Martín Giraudo y Sergio Cerutti partieron desde la capital salteña, con rumbo a la localidad de San Antonio de los Cobres, para comenzar con la aclimatación necesaria para dicha empresa.
Las cumbres ascendidas fueron: Cerro Negro (4905 metros) 1ª ascensión registrada; Cerro Colorado de Antofalla (5777 metros) 2ª ascensión registrada; Cerro Gringo Cerutti (5450 metros) 1ª ascensión y bautismo; Cumbre principal Volcán Antofalla (6461 metros); Cumbre Peñas Coloradas (6320 metros) 1ª ascenso y bautismo; Cumbre Oeste "Huamán" (6334 metros); Cumbre Sur (6404) 1ª ascenso y bautismo.
Los montañistas realizaron un minucioso relato de lo acontecido día por día:
Día 1
Luego del desayuno partimos hacia Tolar Grande, distante a unos 210 km. Cruzando algunas localidades y lugares muy pintorescos, como Olacapato, el Salar de Pocitos y el Desierto del Diablo, imponentes paisajes que los acompañan durante la travesía. Antes de llegar a Tolar Grande visitamos los impactantes "Ojos de Mar", pequeñas lagunas de aguas turquesas en el Salar de Arizaro.
Día 2
En la mañana, luego de reaprovisionar de combustible las camionetas, nos adentramos al Salar de Arizaro (el segundo más grande de América), luego en el "Cono de Arita". Después llegamos a la pequeña y pintoresca localidad de "Antofalla", un verdadero oasis en medio del desierto.
Día 3
Temprano nos ponemos en marcha por la senda arenosa bordeando el salar. Luego de unas 5 horas de marcha, encontramos un lugar cercano a una laguna casi seca, unas construcciones de piedra en ruinas a la que denominan, "Rumiyoc" que en lengua quechua significa: "Lugar de Piedra", estando a casi 4200 metros de altura.
Día 4
Después de levantar el campamento y cargar las camionetas, emprendemos nuevamente la marcha, esta vez el camino se ha vuelto una huella y exige pericia y paciencia en el manejo para ir ganando altura, hasta el pie del cerro Negro de 4905 metros y antes que se desate la tormenta, todos los integrantes subimos a su cumbre y en ella constatamos que no hay registro de que fuese anteriormente escalada y por ende sería la primera vez registrada. Se dejan los testimonios de rigor y bajamos al resguardo del campo base.
Día 5
Por la mañana se desarma el campamento y partimos en busca del campo base del volcán Antofalla. Por la tarde se arman dos grupos para ascender a los cerros que enmarcan el campamento, hacia el sur está el cerro "Colorado de Antofalla" de 5777 mts. y hacia allí se dirigen Javier y Gerardo, quienes rescatan de su cumbre el testimonio dejado por Christian en 2013 y por ende son los segundos en ascender el citado cerro. Por otra parte, entre Christian, Emilio, Adrián y Martín se encaminaron al cerro que está al norte, llegando a su cumbre de 5450 mts. y teniendo en cuenta que el mismo no registra nombre alguno ni ascenso moderno, deciden bautizarlo como cumbre "Gringo Cerutti" en homenaje al amigo y maestro, por tantos años de comunicación y enseñanza del amor hacia la montaña.
Día 6
Tras el desayuno, se alistan las mochilas para el primer porteo de altura, trataran de llegar a los 5700 mts. y encontrar un buen lugar para armar el campo de altura. Avanzamos por una quebrada bien marcada que gana altura de manera sostenida, son siete los integrantes que subimos, solamente quedan en el campo base Gerardo y Sergio, quienes tenían a su cargo la tarea fundamental para el grupo, siempre tener alguien que vele por el resto, dispuestos a ayudar cuando sea necesario.
A medida que se sube vamos perdiendo las esperanzas de encontrar agua, alguna vertiente que sea útil. A la tarde llegamos a un lugar que parece ideal para armar las carpas, estamos a 5700 mts. y confirmamos un tema no menor, no hay agua potable cercana, la que se encuentra trae mucho azufre incorporado. Dejamos la carga y bajamos al atardecer al campo base.
Día 7
Poco tiempo después del amanecer con el desayuno en marcha, cargamos nuevamente las mochilas y comenzamos el lento pero firme andar hacia el campo de altura. A las 18 se desata un fuerte temporal de viento y nieve, nos sumergimos en las bolsas de dormir tratando de descansar por las pocas horas que quedaban antes de partir hacia la cumbre.
Día 8
A la hora convenida todos salieron de sus carpas, hace frío y sopla un viento helado, pero tiene el cielo despejado que augura un hermoso día. Al cabo de unas horas Gastón, decide regresar a las carpas, un malestar le impide seguir la marcha y con buen criterio emprende el regreso. Luego de varias horas de ascenso lento pero sin pausas, una suave luz asoma en el horizonte, amanece y el sol va tiñendo las nubes de amarillos y rojos. Todo va cobrando vida lentamente, la cima ya se vislumbra cercana, una pendiente inestable, sostenida y muy marcada remata sus líneas en ese punto mágico, la cumbre. A las 8,30 horas llegamos todos juntos a los 6461 mts. del morro cimero.
Dos horas más tarde llegamos a otra cumbre virgen, por lo tanto sería el primer ascenso registrado, la cual es bautizada "Peñas Coloradas" de 6320 mts. un verdadero lujo poder disfrutar de la vida de esta manera y otro logro en conjunto del Club de Montaña Champaquí.
Día 9
Restan subir la cumbre Oeste de 6334 mts. y la cumbre Sur de 6404 mts. para completar la travesía integral del volcán. Cada uno evalúa sus condiciones físicas en la que se encuentran para participar en la salida, las ganas no faltan, pero es en estos momentos, cuando hay que ser sinceros con uno mismo y no poner en juego la seguridad del grupo, sino se está al 100% seguro. A las 4 de la madrugada Gastón, Javier y Christian, salieron para finalizar la travesía, sin dudas un esfuerzo notable que da sus frutos, los tres coronan la cumbre Oeste y la bautizan "Huamán".
Luego comenzaron el descenso y luego en solitario Javier haciendo alarde de su garra juvenil y de su experiencia logró dejar el testimonio en la cumbre Sur y se convirtió en el primero en hacerlo y con ello conseguir para la expedición las 7 cumbres.