Seis personas fallecieron en un enfrentamiento con la policía
El hecho ocurrió en Pakistán, donde además se registraron más de 200 heridos en Islamabad. Fue durante un operativo para reinstaurar el orden en la capital.
Al menos seis personas murieron y más de 200 resultaron heridas hoy en Islamabad en enfrentamientos entre policías y manifestantes islamistas durante un operativo para reinstaurar el orden en la capital tras dos semanas de piquetes, indicaron autoridades sanitarias.
A lo largo de la jornada, la policía y fuerzas paramilitares intentaron dispersar a los manifestantes, que cortan accesos claves a la capital paquistaní desde hace 18 días en reclamo de la destitución del ministro de Justicia, Zahid Hamid, por supuesta blasfemia.
Unos 5.500 efectivos de las fuerzas de seguridad cargaron con balas de goma, gases lacrimógenos y cañones de agua contra unos 1.500 manifestantes, que respondieron con piedras, gases y granadas, según informó en un comunicado la policía. Al menos tres vehículos de la policía fueron incendiados y más de 200 personas, entre policías y manifestantes, resultaron heridas.
En consecuencia, el Gobierno paquistaní emitió una orden para autorizar el despliegue del Ejército en Islamabad. Las protestas se han extendido al menos a otras seis otras ciudades, entre ellas Lahore, en el este del país, y Karachi, en el sur, según reprodujo la agencia de noticias EFE.
El 7 de noviembre pasado, los manifestantes acamparon en una de las principales autopistas de la capital para exigir la renuncia del ministro de Justicia, en rechazo a una reforma electoral que cambia el enunciado del juramento para los cargos públicos. Según dicha reforma, en lugar de decir "Yo creo" que Mahoma fue el último profeta del islam, los ministros debían decir "Yo juro". El abierto rechazo a la nueva norma hizo que, tres días después, el Parlamento restableciera el artículo original.
Los islamistas también reclaman la renuncia de los responsables del cambio de la ley, que consideran un acto de blasfemia. El Código Penal de Pakistán establece penas por blasfemia que van desde una multa hasta la muerte. Se considera blasfemia el daño o profanación de los lugares de culto o de objetos sagrados, ultrajar los sentimientos religiosos, profanar el Corán o difamar a Mahoma.