Se instaló en los cuartos de final
River, sin jugar bien, pudo avanzar en la Copa Libertadores al igualar 1 a 1 en el Monumental frente a Guaraní. Alario, con su conquista, le dio tranquilidad al equipo de Gallardo.
River Plate trabajó y sufrió más de lo pensado anoche con el empate como local ante Guaraní, de Paraguay por 1 a 1, que dejó la serie 3-1 a su favor, y le dio la clasificación a los cuartos de final de la Copa Libertadores.
El equipo paraguayo se puso en ventaja con el gol de Marcelo Palau y el delantero Lucas Alario marcó el empate para el club de Núñez, que tuvo las presentaciones en el Monumental de Javier Pinola e Ignacio Scocco y los estrenos de Germán Lux y Enzo Pérez.
El "Millonario", que salió a la cancha con un solo delantero como Alario, no tuvo una buena noche en lo futbolístico y por momentos quedó en apuros con la enjundia de los paraguayos.
El equipo de Gallardo, en su partido número 200 como entrenador, tuvo el control de la pelota con un medio campo superpoblado, pero le faltó profundidad.
Las escasas proyecciones de Jorge Moreira y Milton Casco, retenidos por la defensa de Guaraní, fueron una constante, y cuando Gonzalo Martínez tuvo un mano a mano con el arquero Alfredo Aguilar (9m) su remate fue atajado.
La pelota detenida fue el arma más peligrosa de River en la primera parte en los pies del "Pity" Martínez, el futbolista más desequilibrante. Con un tiro libre suyo, Alario tuvo el gol (29m) con un remate de cabeza y también mostró otra situación con Pinola (31m).
Guaraní no inquietaba a River, y de hecho Lux no registró atajadas y solo devoluciones desde el fondo, pero en la última jugada del primer tiempo encontró el gol con Palau en una salida deficiente de la defensa "millonaria".
El gol de Guaraní impactó en los hinchas que colmaron el Monumental y River también tomó nota de la situación. Al minuto del segundo tiempo, Alario pudo haber marcado el empate con un pase en profundidad.
Sin embargo, el conjunto del argentino Daniel Garnero demostró que todavía podía inquietar aun más a River y el mano a mano de Cristian Chávez con Lux fue un aviso de peligro extremo. El ex-San Lorenzo definió mal, con Lux cayéndose y con River mal parado.
El dueño de casa salió con todo y pegó primero con el disparo de "Nacho" Fernández que desvió Aguilar.. El córner fue la antesala del gol, cuando en una serie de rebotes apareció el oportunismo de Alario, quien quebró el maleficio de ocho jornadas sin anotar, aunque en la repetición televisiva se advirtió que el último en tocar la pelota fue Pinola. "Me parece que 'Pipa' me lo 'choreó' cuando salió a gritarlo", confió el ex-Central.
La igualdad trajo alivio a un River apurado y nervioso. De ahí en más crecieron Ponzio, Rojas y Enzo Pérez en el medio, pero no impuso condiciones en el juego.
El equipo paraguayo luchó hasta el final con un River que lució falto de fútbol, que necesita rodaje y que Gallardo deberá pulir esa idea de un medio poblado de volantes y con un solo delantero.
El pitido final del árbitro ecuatoriano Roddy Zambrano marcó el pase de River a los cuartos de final de la Copa Libertadores, a la espera del rival entre Atlético Mineiro, de Brasil (0) y Jorge Wilstermann, de Bolivia (1), que se enfrentarán hoy.
El objetivo de River se logró, su gente lo festejó, pero la Copa Libertadores no otorga muchas posibilidades cuando el juego no aparece. Guaraní pudo haber dañado de verdad y River lo sabe.
Pasó Lanús
Lanús venció anoche a The Strongest de Bolivia 1 a 0 y pasó a los cuartos de final de la Copa Libertadores de América, tras el empate 1-1 en el partido de ida en La Paz.
El delantero José Sand, a los 39m. del segundo tiempo, marcó el único gol del encuentro de vuelta de los octavos de final, que se jugó en el estadio Ciudad de Lanús y fue arbitrado por el uruguayo Andrés Cunha.
Lanús se enfrentará en cuartos de final con San Lorenzo o Emelec de Ecuador, cuyo partido de vuelta se jugará este jueves en el Nuevo Gasómetro, con ventaja para el equipo de Boedo por el triunfo 1 a 0 en la ida.