San Isidro espera, pero no se queda quieto
Mientras los clubes de la Liga Argentina de Básquet continúan de vacaciones a la guarda del inicio de la temporada 2023/24, en calle Corrientes esperan confirmaciones y siguen poniéndoles nombres propios al plantel que volverá a comandar Daniel Beltramo en la segunda categoría del básquet nacional.
Por Manuel Ruiz
La dirigencia del Club Atlético San Isidro sabe que aún faltan un par de meses para que la pelota vuelva a picar en el "Severo Robledo" y el escudo rojiblanco vuelva a representar a la ciudad en la Liga Argentina de Básquet, pero como ya es tradición, esa espera, para la comisión "santa", no significa quietud.
El plan de vuelo para lo que viene ya tiene piloto confirmado. Y es que "Sani" confirmó al frente del primer equipo a Daniel Beltramo, que cumplirá de esta forma su tercera temporada consecutiva como DT de los "Halcones Rojos" en su segundo ciclo en calle Corrientes.
El cerrar a Beltramo significa tener las coordenadas precisas de lo que quiere, es decir los nombres que el entrenador pondrá una y otra vez en su pizarra de juego durante toda la temporada y que terminarán ejecutando eso que tienen DT en la cabeza.
En ese orden, hay dos bajas confirmadas. Se trata de los experimentados perimetrales José Montero y Agustín Carnovale que no serán tenidos en cuenta por Beltramo y buscarán otros rumbos. "Sani" pierde así a dos jugadores con recorrido en la competencia y especialmente en Montero, a uno de sus líderes anotadores de la pasada temporada.
Pero como hay algunos que ya se sabe no estarán con la camiseta del club en lo que viene, hay otros que si seguirán vistiéndose de "santo" en la Conferencia Norte de la segunda del básquet nacional que para la temporada 23/24 volverá a tener planteles conformados por 6 fichas mayores y 4 U - 23.
Una ficha mayor que tendrá continuidad será la de la base. Santiago "Chivo" Ludueña seguirá siendo el base titular y a sus 29 años (30 cuando la temporada ya esté en marcha) será una las manos con más experiencia del plantel.
Los casilleros de las fichas U23 también ya se van completando en el Nido. Y es que el base varíllense Santiago Bruno, el escolta santafesino Jerónimo Suñé y el pivote oriundo de Marcos Juárez, Jeremías Diotto, continuarán jugando en San Isidro.
El caso de Bruno y Suñé, con una buena cosecha de minutos en la temporada que pasó y siendo solución desde la banca para el perímetro de Beltramo difiere a la Diotto, que esta temporada se espera sume más minutos y pueda poner en valor su tamaño y fuerza en el aro propio y movimiento de piernas cerca del aro rival.
La ficha de jugadores menores a 23 años que resta la ocuparía el cordobés Federico Zezular. Pero "Zezu", es una de las dos grandes incógnitas que maneja la dirigencia "santa" en este momento donde el mercado descansa más de lo que se mueve.
Zezular, como sucediera antes del comienzo de la temporada que pasó, es pretendido por clubes de Liga Nacional. El saltó a la máxima categoría seduce al jugador, pero San Isidro como dueño de su pase, espera que esas intenciones se traduzcan a números. En el caso de que eso no suceda, Zezular será más que bienvenido por Beltramo y compañía porque se trata de un jugador que la gran parte de la temporada que pasó, fue uno de las 5 iniciales habituales del entrenador "santo".
Además de Zezular, la otra incógnita pasa por saber qué hará el neoyorquino Chris Hooper. El interno que llegó en enero y jugó hasta que la campaña de "Sani" se acabó en el 22/23 fue pedido por Beltramo y la dirigencia ya ofertó para que la continuidad sea posible. Pero, otra vez el mercado.
Y es que al ser un jugador estadounidense que acostumbra a girar por el mundo jugando al básquet y sabiendo que aún faltan dos mes para que arranque la pretemporada, seguramente esperará a alguna oferta que mejore lo que ofrece San Isidro. Si es no pasa, y Hooper decide volver, San Isidro tendrá a un interno versátil que ha demostrado ser valioso desde lo basquetbolisitico y lo grupal.
Los casos de Santiago Assum y Juan Cruz Oberto, son otros que dependen del tiempo. Assum, uno de los titulares de Beltramo y uno de los líderes de goleo del equipo, está jugando actualmente en el básquet de Ecuador; Oberto, hace lo mismo pero en Bolivia. Desde la dirigencia santa, esperaran a que vuelvan de sus experiencias sudamericanas, ver si están sanos y si quieren continuar en San Francisco. Tanto el riotercerense, como el de Las Varillas tendrían ofertas de Liga Nacional.
Pero además de ver qué sucede con lo nombres propios conocidos, San Isidro como lo hace siempre en esta parte del año, y habiéndose ganado el respeto en el mercado por ser un club cumplidor, ya salió a buscar eso que sabe que le hace falta. Y si bien no trascendieron nombres, ya tendría dos fichas muy cerca de ser las dos primeras nuevas caras del plantel "santo" versión 2023/24.
San isidro hasta ahora, además de su entrenador en jefe, tiene una ficha mayor y tres U23 abrochadas, espera por la respuesta de dos jugadores claves, la confirmación de dos fichas mayores nuevas y ver qué sucede con otros dos que hasta aquí son muy importantes para la idea de juego de Beltramo.
En "Sani" descansan, pero no se quedan quietos. Y esa, es una forma de trabajo que se ha vuelto cultura por calle Corrientes. Esa cultura que permite saber que el equipo será una cara conocida en los Playoffs y contendiente siempre presente para el tan ansiado ascenso a la Liga Nacional.