Industria
Robert Maggi: “Es un gran desafío volver a liderar en un contexto tan complejo”
Tras iniciar su cuarto período al frente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de San Francisco, el empresario se mostró preocupado por el difícil panorama que debe afrontar el sector ante la apertura de las importaciones que ponen en jaque a la industria nacional.
Con un vasto recorrido en la Asociación de Industriales Metalúrgicos de San Francisco (AIM), Robert Maggi asume nuevamente la presidencia en un momento de incertidumbre para el sector. Su experiencia previa y su compromiso con la industria local lo colocan al frente de una institución que enfrenta desafíos importantes debido al contexto económico nacional e internacional.
"Es un honor y una responsabilidad enorme liderar nuevamente esta asociación", afirmó Maggi.
El empresario habló sobre su nuevo mandato, el panorama que se presenta para los metalúrgicos y las preocupaciones que comparte con sus colegas industriales.
“Arrancando una nueva etapa, si bien para mí no es nueva,” comentó Maggi, quien ya había ocupado este cargo en tres periodos anteriores. Tras la gestión de Ariel Poli, vuelve a tomar las riendas de una asociación que describe como “muy bien manejada”. “Hoy agarro una asociación de industriales con un grupo de gente y una comisión directiva que trabaja con nosotros de manera incondicional. Todos le ponemos el pecho a la situación, y la verdad que estoy contento, muy feliz de poder estar nuevamente al frente de tan prestigiosa institución.”
Sin embargo, su entusiasmo se contrasta con un panorama económico complicado. Maggi analiza con franqueza la situación que atraviesa el sector: “Con la llegada de este nuevo gobierno hacía falta un cambio de aire importante, pero nos sorprendió a todos con los gastos, los impuestos, con todo. Eso nos repercutió bastante a las empresas. Hoy hay que sumarle también la baja de trabajo. Muchas empresas han anunciado recortes de personal a nivel nacional. En San Francisco, por ejemplo, la gente de Lear dio de baja a muchas personas, y eso nos preocupa mucho".
A este escenario se suma la creciente entrada de productos importados, principalmente de origen asiático, que afecta la competitividad de las empresas locales. “Es imposible competir contra esos precios. Sumándole flete, gasto de nacionalización y todo, no llegamos ni cerca al precio al que ingresan los productos importados. Tenemos muchos impuestos, cargas sociales, energía, y un montón de rubros que nos hacen imposible competir. Como empresario, en vez de pensar en agrandarme y contratar más personal, estoy pensando en achicarme. Y eso no es bueno para el país porque queda gente sin trabajo, sin poder de compra, y se va achicando la rueda".
Respecto al futuro inmediato, Maggi se muestra cauto. “El panorama, por estos meses, no lo veo alentador. Dicen que va a ser un año muy bueno, que hay muchos países con la mirada puesta en nosotros, en este presidente. Ojalá que así sea, ojalá que vengan a invertir, pero no sabemos a qué plazo, y eso preocupa".
Aunque reconoce el potencial impacto positivo de las inversiones extranjeras, enfatiza que estas deberían tener ciertos requisitos para beneficiar a la industria local: “Está perfecto que vengan a invertir, pero debería exigirse que la mano de obra y los insumos sean locales, y también una baja de impuestos para equiparar condiciones".
Sobre la situación puntual de las empresas locales, Maggi destaca que, aunque el trabajo ha disminuido, no tiene información de despidos masivos. “Muchas empresas han acortado horas extras, han achicado horarios, pero están trabajando horarios normales. Por ahora, no hay más que eso.” En cuanto a las negociaciones salariales, mencionó que las paritarias aún no están cerradas. “Viene habiendo negociaciones tras negociaciones, pero todavía no se llegó a un acuerdo. Se habló incluso de realizar paros por hora, pero no se llevó a cabo. Estamos atentos y seguiremos conversando con la UOM cuando haya novedades".