Prescribió la causa de la valija de Antonini Wilson
La ex fiscal María Luz Rivas, quien estuvo a cargo de la investigación hasta su jubilación, dijo que "nunca recibió ayuda para encarar algo tan grande".
La causa penal por la valija con 800.000 dólares que Guido Alejandro Antonini Wilson quiso ingresar al país en agosto de 2007 finalmente prescribió, a poco más de diez años de su inicio.
El juez en lo Penal Económico Pablo Yadarola tomó la decisión de declararla prescripta luego de que el fiscal Pablo Turano optara por no recurrir "en queja" a la Cámara Federal.
Así, el cierre por prescripción de la pesquisa se registró al cumplirse diez años de la indagatoria al ex funcionario Claudio Uberti, quien a raíz del escándalo debió renunciar como titular del Órgano Contralor de Concesiones Viales (Occovi).
El juez había rechazado el año pasado un pedido de la Fiscalía para procesar al Uberti y negó su apelación: el ex funcionario, que estaba imputado por contrabando en primera instancia, había viajado en el avión de la empresa estatal Enarsa que aterrizó en Aeroparque el 4 de agosto de 2007 junto a Antonini Wilson y otras personas.
Antonini Wilson, en tanto, continúa viviendo en el estado de Florida, en Estados Unidos: reiteradas veces la Justicia argentina pidió sin éxito su extradición y la misma situación se dio con las solicitudes hechas a Venezuela por el ex vicepresidente de la petrolera PDVSA Diego Uzcátegui Matheu y su hijo, ambos investigados por el caso.
Al respecto, la ex fiscal que lideró el caso, María Luz Rivas Diez, dijo que "el expediente estaba en condiciones de ser elevado a Juicio Oral".
"Lo solicité al juez en varias oportunidades, pero después de que me retiré por la jubilación dispuso la falta de mérito. El fiscal subrogante apeló, pero luego no traspuso un recurso de queja y esta falta de mérito quedó firme. La cámara no pudo tomar intervención y siguió hasta esta fecha en el transcurso de diez años", explicó.
"Con la fiscalía pude andar muchísimo y cuando asume el juez Petrone asignado por el Gobierno retomó la investigación, citó testigos que ya había citado y se hizo un expediente inmenso", manifestó.
Según la ex fiscal, la causa prescribió porque de los cuatro imputados tres de ellos, a excepción del ex funcionario Claudio Uberti, jamás se presentaron a declarar. Es decir que Antonini Wilson y Diego y Daniel Uzcátegui (funcionarios de PDVSA), nunca se presentaron a la causa y siempre quedaron con orden de captura o prófugos.
"Yo pedí la orden de captura pero nunca más volvieron, ni fueron detenidos y tampoco se obtuvo la extradición de Venezuela, ni de Estados Unidos", precisó.
El caso
Antonini Wilson fue retenido por la Policía de Seguridad Aeroportuaria el 4 de agosto de 2007 al intentar ingresar una valija con 790.550 dólares, y luego de viajar en una comitiva en la que también lo hicieron Uberti, así como directivos de la estatal ENARSA.
Tras el episodio, el empresario venezolano con ciudadanía estadounidense y radicado en Miami se ofreció voluntariamente a brindarle información al departamento de Justicia de Estados Unidos, presuntamente después de su acuerdo con el FBI, aunque el departamento de Justicia indicó que no implicó ningún tipo de protección legal o económica hacia él.
De esta forma, Antonini declaró como testigo desde mediados de 2008 ante la Corte de Miami en una causa por la presunta comisión de espionaje ilegal en territorio norteamericano por parte de tres venezolanos y un uruguayo acusados de actuar como agentes extranjeros encubiertos para ocultar el origen y destino del dinero del maletín, que fue vinculado a la campaña electoral de Cristina Kirchner en 2007.
Puntualmente, el empresario ratificó que el dinero "provenía de PDVSA, de Venezuela, e iba para la campaña presidencial de Cristina de Kirchner", lo cual generó escándalo a nivel local: la presentación del "valijero" ante la justicia argentina fue reclamada con insistencia por el Gobierno de la presidenta Kirchner en medio de las fuertes acusaciones lanzadas por su administración contra la Corte Federal de Miami.
Con la culpabilidad de los agentes encubiertos probada por la Justicia estadounidense, Antonini Wilson quedó bien posicionado, puesto que esta resolución implicó que el jurado avaló su versión, es decir, que la valija no era suya y que él era un "chivo expiatorio".
Tras el fallo, Antonini Wilson anunció que viajaría a la Argentina para prestar declaración indagatoria ante la Justicia, que lo investigaba también por la valija con 800 mil dólares, aunque sus defensores indicaron que el empresario venezolano estaba dispuesto a declarar en Miami ante un juez argentino, lo que nunca sucedió.
A fines de 2016 y luego de nueve años, se definió el destino que se le dará a los 800 mil dólares de la valija: el dinero se utilizará para la construcción de dos Espacios de Primera Infancia (EPI) en las localidades de Tafí Viejo, Tucumán, y de Oberá, Misiones.
Fuente: Cadena 3.