Padres volvieron a los controles de alcoholemia a la salida de los boliches
Los voluntarios destacaron que los conductores hoy tienen más conciencia a la hora de consumir alcohol que hace dos años.
Los padres voluntarios regresaron a los controles de alcoholemia después de más de dos años de ausencia.
De esta manera, en la madrugada del sábado, volvieron a prestar una importante tarea de contención de las personas que son sometidas a los controles de alcohol por parte de las fuerzas de seguridad de nuestra ciudad.
El matrimonio conformado por Ana y Roberto Cesca fueron convocados por el secretario de Gobierno del municipio, Gustavo Piscitello, quien los invitó a participar de los operativos de control al tiempo que se comprometió en hacer gestiones para conformar un grupo de voluntarios más numeroso que se sume a esta iniciativa en el marco del Programa de Cultura Vial.
Menos conductores alcoholizados
Transcurrida la primera experiencia en este regreso a la actividad, Roberto Cesca explicó a LA VOZ DE SAN JUSTO que "estamos muy satisfechos con lo que pudimos observar porque notamos que la calle está mucho más tranquila ahora (que en dicembre de 2014 cuando dejaron de participar de los controles). Creo que en todo este tiempo hubo un cambio fundamental".
Entre los cambios que advirtió, el voluntario puso énfasis en señalar que "hay menos presencia de jóvenes alcoholizados y muy pocas infracciones por alcoholemia. En definitiva, me pareció que la calle está mucho más tranquila que antes".
Cesca remarcó que "le pedí al secretario de Gobierno que convocara a más personas para formar un grupo como el que teníamos anteriormente y de esa manera podamos hacer mejor las cosas".
Destacan presencia de gendarmes
El entrevistado comentó que "nuestra tarea es la de conversar con los infractores, brindarles contención y si es necesario, ofrecerles café para que puedan recobrarse de la ingesta alcohólica. De todas maneras, como han sido muy pocos los que estaban en esa situación en esta primera oportunidad, nuestra tarea fue escasa".
Si bien recordó que "hubo alguna escaramuza entre motociclistas" dentro de los operativos de control, Cesca agregó que "fue rápidamente controlada a partir de la intervención de Gendarmería y de Policía de la provincia de Córdoba".
Cesca comentó además que ve a "las autoridades municipales con muchas ganas de trabajar en la prevención de accidentes de tránsito mediante controles y campañas. Es muy positivo el hecho de que a los inspectores municipales se haya sumado Policía de la provincia y Gendarmería Nacional. Estos últimos imponen una presencia importante que tranquiliza bastante y además se han ordenado para obtener buenos resultados en los operativos".
"La gente toma bien nuestra presencia en los operativos y colabora bastante. En otras oportunidades veíamos que muchos jóvenes eran sorprendidos con los vehículos de sus padres mientras que en esta oportunidad eso no ocurrió. Los jóvenes salían caminando de los boliches y otros se movían en remises o taxis. En este regreso no he visto gente portándose de manera indebida o bajo los efectos de una ingesta alcohólica grave. Todo fue mejor de lo que esperábamos, fue una sorpresa grata".
Más allá del secuestro de 17 motovehículos en dicho operativo de control en distintos puntos de San Francisco, Cesca comentó que "muchas motocicletas eran secuestradas por falta de chapa patente. Sobre esto hablábamos con el secretario de Gobierno acerca de la necesidad de trabajar en conjunto con los vendedores de motovehículos quienes tienen que tomar conciencia que no pueden entregar una moto sin chapa patente".
Recomponer el grupo
Cesca dijo que el secretario de Gobierno "esta semana iba a convocar a voluntarios para sumarse a los controles de manera de que podamos contar con más personas colaborando en esta iniciativa que siempre que se implementó dio buenos resultados".
Por último, señaló que "la idea es continuar participando de los controles los fines de semana y por eso es fundamental que se sumen más personas a esto porque eso siempre facilita la tarea".