Pablo VI ya no podrá tomar examen de ingreso excluyente
Tendrán prioridad los hermanos de estudiantes, hijos o familiares del personal del colegio y los hijos de ex alumnos. Si hay más aspirantes que vacantes, se hará un sorteo y quienes ingresen deberán hacer un cursillo nivelador obligatorio.
A partir del año 2020, el Instituto Pablo VI de nuestra ciudad no podrá tomar más su tradicional examen de ingreso eliminatorio luego de que se aprobaran una serie de modificaciones respecto a las condiciones y criterios que se tendrán en cuenta para el ingreso a primer año del nivel medio en este colegio privado pero de gestión pública.
Las nuevas condiciones fueron comunicadas oficialmente por los Misioneros de La Consolata, representados por su apoderada legal y el equipo directivo del Instituto Pablo VI y serán las que rijan para el cupo de 105 ingresantes previsto para el próximo año.
Inscriben desde septiembre
Las preinscripciones se realizarán el próximo mes de septiembre. Se estableció un orden de prioridades para ocupar las vacantes y en caso de que el número de inscriptos sea mayor, se hará un sorteo. Además, quienes queden en la lista deberán realizar un cursillo nivelatorio de cinco semanas.
El director del establecimiento, Horacio Moriondo, aseguró en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO que la razón de la nueva disposición obedece a la necesidad de "adaptarse a las políticas educativas actuales".
Afirmó que considerando el espacio físico disponible y las condiciones para una mejor calidad educativa, el número de ingresantes a primer año es de 105 estudiantes, 35 en cada división, que son tres.
Quiénes tendrán prioridad de ingreso
En cuanto al orden de prioridades para ocupar vacantes, el director explicó que fue establecido de la siguiente manera: "Primero tienen prioridad los hermanos de estudiantes que estén cursando en cualquiera de los niveles del Instituto Pablo VI; luego hijos o familiares directos del personal que trabaja en la institución, hijos de ex alumnos y finalmente los demás postulantes".
La razón de la nueva disposición obedece a la necesidad de "adaptarse a las políticas educativas actuales", aseguró el director Horacio Moriondo
Si superan las vacantes se irá a sorteo
Moriondo añadió que en caso de que el número de postulantes supere las vacantes, se hará un sorteo de acuerdo a la siguiente modalidad: a) si con el número de hijos de ex alumnos se superan las vacantes, el sorteo se hará entre ellos; b) en caso de que los hijos de ex alumnos no superen las vacantes, se sorteará ente los demás postulantes y c) quedarán elaboradas, también por sorteo, las listas de suplentes.
El entrevistado detalló que luego de conocerse la nómina de ingresantes, éstos tendrán que asistir a un cursillo nivelador obligatorio de aproximadamente cinco semanas. El cursillo tendrá las asignaturas matemática, lengua y metodología del estudio.
Dijo además que si el cursillo nivelador "lo realiza algún estudiante que necesita adaptaciones curriculares o presencia de docentes integradores, se tratará con el equipo de apoyo del estudiante".
Asistencia al cursillo y reuniones
Por otro lado, Moriondo afirmó que para conservar su lugar, el estudiante "durante el cursillo nivelador deberá presentar toda la documentación y requerimientos administrativos, tener una asistencia mínima del 80% y respetar los códigos de disciplina y convivencia".
El director señaló que el adulto responsable del estudiante "deberá participar de forma obligatoria en la reunión previa al inicio del cursillo nivelador y en la entrevista posterior organizada por el equipo directivo de nivel medio".
Advirtió que la ausencia en esta reunión "se considera como la pérdida de la plaza, salvo causa justificada y avisada con anterioridad. En caso de que alguien pierda el lugar asignado, el puesto vacante será reemplazado por los suplentes en el orden que haya sido determinado por el sorteo".