Análisis
Necesario fortalecimiento barrial
El Consejo Barrial de Prevención y Convivencia puede transformarse una herramienta útil para devolver a “las 800” su esplendor, su vitalidad, potenciar oportunidades sociales y afianzar su sentido de comunidad.
Se puso en marcha hace pocos días el Consejo Barrial de Prevención y Convivencia en barrio Roque Sáenz Peña. La iniciativa busca articular el trabajo de instituciones locales para identificar problemáticas y diseñar soluciones conjuntas. La iniciativa tiene como objetivo principal coordinar el trabajo de distintas instituciones del sector para identificar problemáticas comunes y diseñar soluciones de manera conjunta. Según se informó, participarán organismos del Estado municipal y provincial, junto con instituciones educativas, religiosas, deportivas y fuerzas de seguridad, con el fin de fortalecer esta barriada populosa.
De acuerdo con la información oficial, se procurará sistematizar la información, establecer prioridades y ejecutar medidas que el barrio necesita. El propio intendente anticipó mejoras en iluminación y seguridad, en línea con otras acciones que ya se vienen desarrollando en distintos puntos de la ciudad. El propósito es claro: que el sector conocido como “las 800” recupere su dinamismo, mejore la calidad de vida de sus habitantes, amplíe sus posibilidades de desarrollo y consolide la identidad barrial que históricamente lo ha caracterizado.
Es cierto que otros sectores de San Francisco ya cuentan con dispositivos similares al creado recientemente en Sáenz Peña. Y que, históricamente, la participación ciudadana y el trabajo conjunto entre instituciones han demostrado ser estrategias eficaces para fomentar la convivencia, fortalecer el entramado comunitario y abordar de manera preventiva y activa los problemas sociales, especialmente aquellos que afectan a los hogares más vulnerables.
Un recorrido por el barrio permite constatar que aún hay mucho por hacer, pero también que existen experiencias valiosas que merecen ser fortalecidas, ya que expresan el potencial del sector. En cuanto a las necesidades, la clave estará en identificar, con mirada social, las principales problemáticas, para luego analizarlas junto a los vecinos y autoridades y trazar estrategias de solución consensuadas y viables.
En cuanto a las fortalezas, resulta importante remarcar que “las 800” cuenta con una oferta educativa completa, posiblemente única en la ciudad. La educación inicial y primaria se brinda en la Escuela 2 de Abril; el nivel secundario y la modalidad para adultos, en el Ipem Dr. Francisco Ravetti; y desde este año se incorporó la formación superior, con la llegada del Instituto Madre Teresa de Calcuta, que dicta la Tecnicatura en Enfermería Profesional en parte del edificio escolar de la 2 de Abril. Además, el barrio dispone de un club de baby fútbol, un destacamento policial, un dispensario de atención primaria de la salud y diversas áreas comerciales que lo dotan de servicios esenciales.
Los afanes y anhelos del barrio Roque Sáenz Peña son la expresión de la vocación de progreso que exhiben los vecinos de un sector muchas veces postergado e incluso injustamente estigmatizado. El Consejo Barrial de Prevención y Convivencia puede transformarse una herramienta útil para devolver a “las 800” su esplendor, su vitalidad, potenciar oportunidades sociales y afianzar su sentido de comunidad.