Morteros y Brinkmann autorizan reapertura de boliches para las fiestas
Será bajo el protocolo de bares y restaurantes. La Nochebuena oficiará como "prueba piloto" para definir el futuro de estos locales nocturnos. Intendentes apuestan a la medida para desalentar las fiestas clandestinas.
Las fiestas clandestinas son moneda corriente cada fin de semana en los campos de nuestra zona constituyendo un enorme riesgo para los jóvenes que asisten.
Con el objetivo de desalentar este tipo de juntadas y reactivar la actividad que está paralizada desde hace nueve meses, municipios de nuestra región habilitarán la apertura de boliches para las fiestas. En principio, el 24 de diciembre y en función de los resultados, el 31.
La harán bajo el protocolo de bares y restaurantes, lo que obliga a los empresarios de la noche a reinventarse e incorporar, entre otras cosas mesas y sillas. Las mismas serán dispuestas al aire libre, con distanciamiento social, capacidad limitada por mesa y en el recinto. Podrán ofrecer espectáculos en vivo, o DJ pero no habrá pista de baile.
Según pudo conocer LA VOZ DE SAN JUSTO, es una medida que tomarán los municipios de Brinkmann y Morteros y que replicaría Balnearia y Miramar como prueba piloto para una apertura definitiva de los boliches durante el verano.
"La noche del 24 se tomará como prueba. Si los protocolos no se respetan o las cosas se van de las manos, se vuelve a cerrar todo y ni siquiera habrá 31", advirtieron los intendentes Gustavo Tevez, de Brinkmann y José Bría, de Morteros.
Apuestan a la responsabilidad social de todos: vecinos, jóvenes, empresarios. No obstante, dispondrán de inspectores municipales para controlar que se cumplan los protocoles.
Brinkmann: mesas "burbujas" y barras autoservicio
El intendente de Brinkmann, Gustavo Tevez confirmó que Morocco, el boliche más popular de la ciudad abrirá sus puertas con dos noches de gala, el 24 y el 31. "Será al aire libre y con espacios para 10 personas por sector, con DJ pero sin pista de baile", manifestó.
El mandatario municipal reconoció que "los dueños han hecho un gran esfuerzo para reconvertir el boliche, poniendo barras con sistema de autoservicio por sector, para evitar la conglomeración de gente, así como también la compra de mesas y sillas".
Tevez destacó que "en medio de esta pandemia, es la forma que encontramos para brindar esparcimiento pero a su vez que nos sigamos cuidando entre todos, porque el virus sigue circulando".
"Es un gran desafío para todos y de todos dependerá si esto sigue o se vuelve atrás", advirtió.
Por otro lado, reconoció los riesgos que implican las fiestas clandestinas y el impacto que cree tendrá esta reapertura de boliches. "Creo que las juntadas ilegales también se hicieron moda. A medida que se vayan concentrando en estos lugares permitidos, las clandestinas van a ir disminuyendo hasta desaparecer".
Bría: "Si el 24 es malo, no hay 31"
La Base, en Morteros será otro de los boliches que abrirá para las fiestas. "Si se hacen las cosas bien se puede continuar. No hay que tomarlo como una fiesta de fin de año sino como el comienzo del inicio de sus actividades bajo protocolo que la provincia está preparado para los bailes al aire libre con modo burbuja", sostuvo el intendente José Bría.
"Si el 24 es malo, no hay 31", advirtió.
"De esta manera le brindamos un lugar seguro a los jóvenes y a su vez, la posibilidad de que los empresarios vuelvan a trabajar y generar puestos de empleo. En esto hay múltiples responsabilidades", sostuvo.
El intendente morterense coincidió con Tevez en que "en la medida que le demos una contención a los jóvenes y una reglamentación a los boliches, las fiestas clandestinas tienen que desaparecer. Ya son insostenibles, es un descontrol y una locura total".
El pedido de los
padres
Tanto los bolicheros como los padres de los jóvenes ven con buenos ojos, que permitan la apertura de los locales nocturnos para las fiestas, pero piden el compromiso de las autoridades para que la medida se extienda al menos durante el verano. Al pedido se unieron propietarios de campos donde se concentran la mayoría de estas juntadas ilegales.
"Queremos que vuelvan los boliches. Eso nos da otras herramientas a los padres para poder controlar a nuestros hijos y saber a donde asisten"., expresó Pablo, papá de un joven de Brinkmann
"No es fácil tenerlos, sabemos que salen y se juntan, pero muchas veces no dicen que van a esas fiestas clandestinas", reconoció.
Sobre lo ocurrido el fin de semana, planteó que su hijo, junto a los amigos, terminó el sábado en una fiesta en un campo entre Porteña y Freyre donde había en el lugar alrededor de 300 personas.
"La policía llegó al lugar con las luces apagadas, y cuando las encendieron comenzó el descontrol, las corridas por terrenos lindantes y más", detalló el papá.
"Las autoridades deben tomar medidas y habilitar algún espacio seguro para que los chicos puedan reunirse porque por querer evitar contagios de covid ¿vamos a lamentar la muerte de un hijo?", cuestionó.
El hartazgo de los dueños de los campos
Gabriela Cerri,
propietaria de uno de los campos donde ya registró tres fiestas ilegales,
expresó la la problemática
que atraviesan cada vez que esto sucede. El campo está
ubicado a unos 30 kilómetros hacia el noroeste de Brinkmann, en jurisdicción de
Colonia Isleta. "La primera vez
no dimos cuenta por la basura que quedó en el lugar, jarros y botellas. Ya las
otras dos veces teníamos soja sembrada y arruinaron todo. Los brotes estaban
pisoteados, además de la basura que queda, y hay que hacer todo el trabajo y
gasto económico de nuevo", indicó la propietaria. Inclusive contó
que los propios empleados del campo se tuvieron que ocupar de limpiar. "Tuvimos que
resembrar la soja dos veces. Nos arruinaron más de 20 hectáreas", Agregó que "los
jóvenes cortan los candados y los alambres". Más allá del daño
económico, Gabriela expresó el riesgo de vida que constituye para muchos
jóvenes. "Huyen como delincuentes pudiendo generarse una desgracia". Asimismo,
explicaron que los jóvenes que organizan estos eventos están identificados. "Se
realizaron dos denuncias en la policía de Morteros. Hay material fotográfico y
fílmico que prueba los hechos".