Morla: “Este contexto causó una regresión en el trabajo”
El entrenador de San Isidro, Gustavo Morla aludió a los inconvenientes en la planificación de las tareas que ocasionaron las continuas restricciones por la emergencia sanitaria.
Se sabe que los constantes interrupciones a causa de las restricciones por la pandemia conspiraron contra la formación y crecimiento en los diferentes deportes. En el básquet local por ejemplo, los entrenadores en sus distintos clubes buscaron alternativas al entrenamiento táctico o técnico que se realiza en cancha para paliar el complicado panorama.
En ese marco, el director técnico de los planteles de primera división y U19 de San Isidro, Gustavo Morla, aludió a la planificación que aplicó para este impasse deportivo, a la vez que admitió que este contexto causó una regresión en la labor con los equipos.
-¿Cuál es la planificación que están ejecutando en este nuevo paréntesis deportivo?
-Estamos trabajando los fundamentos individuales y parte física desde el hogar de cada chico. Con los profesores Daniel Pérez y Andrés Buseghin hemos planificado ejercicios tanto de técnica individual y ejercicios físicos, con videos ilustrativos, para que puedan realizarlos.
-¿Implementar un contacto virtual?
-Preferimos con el cuerpo técnico y los jugadores comunicarnos por los grupos de whatsapp y hacer un ida y vuelta por ahí. Ya que demasiada demanda de conectividad tienen con la escuela y academia de idiomas.
Siempre es importante mantener el contacto, saber cómo se encuentran ellos y sus familias más allá de hablar solamente de básquet. Por suerte no hemos tenido deserción desde que esto arrancó en marzo del año pasado.
-¿Existe buena predisposición de los planteles?
-Sí, los chicos siempre están presentes y con muchas ganas e ilusión que esto vuelva a ser como antes.
-¿El trabajo en cancha es insustituible?
-Sin dudas, la competencia es lo que hace crecer al jugador. El desafío de convertir una canasta, de tomar decisiones y tener diferentes situaciones de juego que en una práctica existe pero de diferente manera.
-¿Este escenario causó un retroceso en el trabajo?
-Seguro, muchos de nuestros jugadores estaban acostumbrados a jugar entre 90 a 100 partidos por año sumando competencia local, selecciones asociativas, selecciones provinciales y hasta selecciones argentinas. Hoy eso pasó a ser nulo, pero trabajamos para que sea de la menor escala posible, tratando de hacer entrenamientos con la competitividad similar a la de los juegos.
-¿Qué análisis haces en cuanto al nivel de primera y U19, son el trampolín al plantel de Liga Argentina?
-Después de tres años y medio de procesos en las formativas del club, hemos podido llegar a tener un gran nivel de juveniles. Con el cuerpo técnico del básquet local siempre buscamos el crecimiento de ellos en pos de que puedan ocupar un lugar en el plantel y posteriormente se ganen sus minutos de juego. En un análisis de la cantera del club, creo que eso llegó y hoy en día tenemos grandes juveniles en el plantel.
-Esto habla entonces de un responsable trabajo en las formativas...
-En las categorías formativas considero que la labor que cada jugador hace es al máximo de sus posibilidades. Siempre buscamos darle todas las herramientas que están a nuestro alcance a los chicos para que puedan crecer tanto deportivamente como humanamente. No solo se trata de formar jugadores, sino personas integras en todos sus aspectos.
Hoy un jugador de formativas de San Isidro tiene la posibilidad de entrenar fundamentos individuales con entrenadores a su disposición. Cuenta con un preparador físico que les de sus rutinas individuales para el crecimiento fisiológico, también un kinesiólogo todos los días en el club que los atiende y también para trabajar en la cancha todos los aspectos técnicos y técnicos que necesiten.
Seguramente hay muchas herramientas que se pueden sumar y a su vez potenciar más aun las que tenemos. Pero sin dudas pueden llegar a jugar en el plantel profesional sin desentonar y sobretodo rendir de gran forma.
-¿Se extraña la competencia?
-Se extraña mucho la competencia, es lo más lindo que todos tenemos para poder expresar lo que entrenamos diariamente. Resta confiar en que esta situación mejore. Ser responsable ante las medidas de prevención que nos piden desde el estado y sumar para que todo vuelva a su eje o nueva normalidad como así llaman.
-¿Un mensaje final?
-Me gustaría poder disfrutar de ver jugar a los chicos que hace tiempo entrenan en el club, por su esfuerzo y contracción al trabajo diario. Hemos formado una gran familia y como todo integrante de familia le desea lo mejor al que tiene al lado. Quiero agradecer estos años de confianza en lo laboral y vamos por más.