Morandini en la SIP: "En mi época éramos educadas para susurrar"
La periodista y política Norma Moranidini fue una de las oradoras centrales del domingo en la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa. La cordobesa habló sobre el rol de la mujer en la transformación de la industria mediática.
Por Manuel Ruiz
Salta (Enviado especial). El tercer día de la 74° Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa que se desarrolla en la ciudad de Salta, tuvo un temario que cómo cada jornada de la reunión hasta aquí, fluctúo entre un abanico de tópicos y abordajes bien amplio y que aparecen como inherentes a la coyuntura actual de los medios y del periodismo.
El turno tarde de domingo tuvo un eje trascendental de discusión para la agenda actual de los medios en un momento vital de construcción y deconstrucción de las pautas culturales que llevan adelante los movimientos feministas en todo el continente. En épocas de #MeToo en los Estados Unidos y de #NiUnaMenos en Latinoamérica, el rol de las mujeres en los medios resulta un tema de análisis y debate urgente.
"En Argentina, tenemos una tradición de mujeres que luchan. De mujeres en plazas, que luchan. Las mujeres en Argentina ya han gritado que no quieren más morir, sino que quieren vivir", ilustró Morandini.
Bajo la idea de debatir sobre el rol de la mujer en la transformación de la industria mediática, la SIP sentó en un panel a las estadounidenses Christine Morgan de Bloomberg y a Alice Ting de The New York Times junto a la argentina Norma Morandini, ex columnista de Clarín, ex diputada y senadora de la Nación y actualmente a cargo del Observatorio de Derechos Humanos del Senado de la Nación Argentina.
Ting, Morgan y Moranidni durante el panel.
El panel que tuvo como primeras oradoras a Morgan y Ting, quienes explicaron cómo están trabajando las empresas que representan en cuanto a diversidad e inclusión de mujeres y otros grupos minoritarios en sus redacciones y en sus puestos de mando buscando tener más perspectivas, más capacidad de análisis y alcanzar a públicos a los que no llegaban, se cerró con la participación de Morandini.
La periodista, escritora y política cordobesa, a la hora de tomar la palabra festejo las intervenciones de sus predecesoras con una frase que definió el tono de su participación "En mi época éramos educadas para susurrar y tuvimos que gritar, así que celebró lo que mujeres como ellas están construyendo dentro de la industria de medios".
Después de recordar que en sus inicios en Clarín en la década del 70 las mujeres no firmaban sus notas y que recién puedo escribir su nombre completo en un artículo cuando estuvo exiliada en España, donde entendió la importancia que el periodismo tiene en la democracia, Morandini señaló que el movimiento Ni una menos fue justamente gestado por un grupo de mujeres periodistas que "dijeron basta" y alzaron su voz cansadas de la opresión de un sistema rotundamente machista.
"En Argentina, tenemos una tradición de mujeres que luchan. De mujeres en plazas que luchan. Las mujeres en Argentina ya han gritado que no quieren más morir, sino que quieren vivir", ilustró Morandini.
Ya en la parte final de su disertación, Morandini resaltó la necesidad de que las mujeres tengan más peso dentro de las redacciones y marcó el ejemplo de que son muy pocas las que escriben columnas de opinión y de opinión política en particular, y destacó la fortaleza de las mujeres periodistas, de notoriedad pública que enfrentan el desdén diario a través de redes sociales ""Que fortaleza que tienen esas mujeres de hoy que se exponen sin miedos y que son agredidas constantemente en los comentarios de redes sociales. Lo peor es que no las agreden por sus argumentos sino que las agreden sexualmente. Sigue siendo gravísimo que cuando una mujer se planta con capacidad desde su discurso, se la llame loca".
"En mi época éramos educadas para susurrar y tuvimos que gritar", recordó Morandini.
El cierre del panel encontró a Morandini resaltando la necesidad del periodismo, del buen periodismo en las democracias actuales, más allá de una cuestión de género "Nada mide mejor la democracia que su calidad de opinión pública, que la calidad de su prensa. Es importante para eso, la prensa independiente con periodistas bien formado e informados, que den buena información porque a mejor calidad de información, mejor democracia. Hay que volver a entender que estamos sirviendo al ciudadano y recuperar su confianza porque cuando la gente desconfía del periodismo desconfía de la democracia y eso es peligroso".