Mi hijo tiene Tdah: ¿Cómo se identifica el trastorno?
El Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (Tdah) está rodeado de falsas creencias y no es un invento. Quienes lo presentan son chicos muy inquietos y les cuesta mucho concentrarse. Es un trastorno crónico y por eso es clave un diagnóstico certero, acompañado de una completa evaluación. Especialistas de la Fundación Akenatón-Cdei, explican cómo es proceso
Que no existe, que está de moda o que es producto de padres que no saben poner límites. El Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (Tdah) está rodeado de falsas creencias y actualmente suele estar sobrediagnosticado, convirtiéndose en una etiqueta para chicos difíciles.
Lo cierto es que el Tdah es un trastorno crónico caracterizado por la dificultad para prestar atención, la hiperactividad y la impulsividad. Afecta a una de cada 20 personas (5,3 %). Quienes lo presentan son chicos muy inquietos, no pueden quedarse sentados ni prestar atención a lo que dice la maestra o se distraen fácilmente y les cuesta mucho concentrarse.
Aunque se desconoce su origen exacto, los científicos creen que el trastorno podría estar causado, en parte, por un desequilibrio de dos neurotransmisores, la dopamina (DA) y noradrenalina (NA), que podrían desempeñar un papel importante en la capacidad para concentrarse y prestar atención a las tareas.
No es un invento, de hecho existe desde siempre y en la historia hay personalidades, hasta genios que lo padecían como Albert Einstein, Thomas Alva Edison, Leonardo da Vinci, Steve Jobs, Sylvester Stallone, entre otros.
Al ser un trastorno crónico, es clave un diagnóstico certero acompañado de una completa evaluación, un proceso de varios pasos, que permita determinar y planificar el tipo de tratamiento que brindará al niño o adolescente herramientas para potenciar las fortalezas sobre las dificultades.
La Fundación Akenatón- Centro de Diagnóstico, Estimulación e Integración trabaja desde hace 18 años en San Francisco, en el abordaje de dificultades en el aprendizaje como un proceso de toda la vida y todas las edades. Ubicada en Paraguay 1565, amplió sus instalaciones donde brinda una atención integral e interdisciplinaria con psicólogos, psicopedagogas, psicomotricistas, fonaudiólogas, neurólogo, profesores de educación especial, entre otros.
La psicopedagoga Analía Dussin (MP-230934) con posgrado en Neuropsicología y Demencia y la licenciada en Psicopedagogía, Agostina Coniglio (MPP-324073), especialista en evaluación neuropsicológica de la Fundación Akenatón, explicaron la importancia de los pasos hacia el diagnóstico del Tdah.
- ¿Cómo son las personas que tienen Tdah? ¿Hay distintos tipos de este trastorno?
Se trata de una alteración al nivel de las funciones cerebrales superiores fundamentalmente del lóbulo frontal que es donde están las dificultades que afectan más a estas personas.
Estas personas tienen dificultades para organizarse, todo lo que tiene que ver con el plano ejecutivo, atencional, la anticipación, la impulsión los frenos inhibitorios para poder parar. Es típico que se desorganicen, que no puedan seleccionar los estímulos, que se desborden ante situaciones.
Dentro del Tdha hay distintos subtipos. Es déficit de atención solo, con hiperactividad, con impulsividad o combinado.
Es un trastorno que existió siempre. Antes se le llamaba disfunción cerebral mínima, sindrome hiperkinético y ahora es trastorno de déficit de atención o trastorno de perturbación de la atención. Los nombres fueron cambiando.
- ¿Tiene algo que ver con el autismo?
Muchas veces vienen niños con diagnóstico de trastorno del espectro autista y en realidad es un trastorno del déficit de atención.
Se suele confundir el diagnóstico con el trastorno del espectro autista, por eso es importante quien y cómo hace el diagnóstico. Se los confunde con trastornos del desorden de la atención de tipo de sobre enfoque. Una persona no presta atención porque hay muchos estímulos y no puede seleccionar uno, no puede inhibir los estímulos que son irrelevantes.
También puede pasar que preste atención, que pueda focalizar, pero es una atención muy breve y cae enseguida. En el momento que cayó la atención la persona no entendió y fracasa, eso afecta el rendimiento académico con un coeficiente por debajo del normal y se determina un retraso mental, aunque no son retrasados mentales.
Funcionan en ese nivel porque su atención no puede estar óptima para poder responder adecuadamente por eso afecta el resultado final de la evaluación. Si nos quedamos con ese resultado lo diagnostican de retraso mental y no es el diagnóstico correcto.
El diagnóstico debe ser certero pero también completo porque además de evaluarse si hace sobre enfoque en algo, se deben analizar muchas cosas más para decir si es autismo o no. Por ejemplo que no responda a ciertos parámetros que sí sería específico de un niño con autismo.
Cuando hay un sobre enfoque la persona conecta con algo y no desconecta. Un niño por ejemplo que se concentra en lavarse las manos y si no se le cierra la canilla o se le brinda otro estímulo no deja de hacerlo. O que juega siempre con el mismo juguete y estaba en su mundo.
Las psicopedagogas Analía Dussin y Agostina Coniglio explicaron como se realiza la evaluación para el Tdah (Foto: Marcelo Suppo)
- ¿En qué consiste la evaluación neuropsicológica para lograr el diagnóstico?
Es muy delicado el tema porque no se puede diagnosticar por un síntoma nada más. Implica diagnósticos muy profundos, baterías de evaluaciones neuropsicológicas.
Las sesiones que realizamos en nuestro centro se extienden por al menos un mes, se lo ve una vez por semana y duran 45 minutos, se pueden extender más dependiendo de cada chico.
No se obliga a que el niño continúe en la sesión cuando la atención no está más, además si es lento, si le cuesta más. A veces por ser muy inteligente termina todas las pruebas y lleva más tiempo.
Muchas veces los chicos son lentos no porque tienen menos capacidad intelectual sino porque se dispersan y les lleva más tiempo. Al tener que hacer tanto esfuerzo para poder lograr la atención los chicos se cansan más.
Entonces lo que no se contempla en otras evaluaciones que se hacen en menos tiempo, es el efecto fatiga, la atención y lo emocional influyen en el resultado.
- ¿Cómo se realiza el abordaje?
Se hace un abordaje integral de la persona de manera interdisciplinaria en la que intervienen profesionales como neurólogos, psicólogos, fonaudiólogos, psicomotricistas, etc. Evaluamos no solamente las funciones cerebrales sino también la personalidad, la estructura psíquica, las emociones, cómo es el niño y cómo se manifiesta a los demás. Se evalúan muchas más cosas que solamente una función cerebral.
Después de toda la evaluación se brinda una devolución a los padres, se informa a la escuela y se indica el tipo de tratamiento que necesita.
En la devolución no solamente se les transmite el nombre del diagnóstico, sino que se les explica todo y conocen verdaderamente qué le pasa a su hijo y por qué actúa de esa manera. Pueden ver los gráficos y que pasa con su atención, su conducta, por qué si es inteligente no puede aprovechar su inteligencia.
Actualmente en la Fundación Akenaton trabajan en un espacio renovado y más amplio (Foto: Marcelo Suppo)
- ¿Qué herramientas se brindan en el tratamiento?
Se muestran las fortalezas, para que pueda usarlas para trabajar las debilidades. Son las herramientas que tendrá el niño para compensar lo que no puede y ayudar en su vida.
En el tratamiento se trabaja sin medicación para abordar el trastorno puro y se les enseñan estrategias para que el niño pueda ir manejando la situación.
La evaluación también se hace sin medicación, entonces se ve el trastorno como es para de esta manera hacer un diagnóstico mas certero y un tratamiento adecuado, las sugerencias que se brindan a los padres y a la escuela.
La familia y la escuela tienen que ser entrenados para ayudar a los chicos a que aprendan. Muchas veces le terminan haciendo las cosas porque los chicos no las completan, o les insisten con que copien y lo hacen de manera automática sin aprender.
Estos niños entonces generan dependencia, son niños que no se cambian solos, no hacen las cosas por si solos y generalmente tienen inmadurez porque no logran autonomía.
- ¿Hasta donde está bien la medicación en los chicos?
Muchos creen que todo chico que tiene Tdah tiene que estar medicado y no todos tienen que tomar medicación.
Es importante que quien haga el diagnóstico sea un especialista, quizá puede ser un neurólogo o un psicólogo y no estar especializado, igual ocurre en el caso de orientar o supervisar los tratamientos.
A veces llegan bien diagnosticados y no tienen un buen tratamiento.
Si lo trata solamente un neurológo no puede hacer otra cosa más que medicar porque otra herramienta no tiene para intervenir sobre la conducta.
Muchas veces como el trastorno es crónico se recurre a la medicación. El tratamiento si bien no va a curar ayudará a compensar.
En el caso que el neurólogo sugiera medicación casi siempre es para la escuela y a los tratamientos vienen sin medicación, salvo que sea un caso muy severo y esté afectando mucho la calidad de vida.