"Mi hija va a descansar en paz ”, dijo el padre de Abigail tras que vecinos mataran al principal sospechoso
Vecinos lincharon y mataron al hombre al que culpan de haber asesinado a la niña en Tucumán.
El padre de Abigail, la niña de 9 años que fue encontrada asesinada en un descampado de Tucumán, aseguró anoche que su "hija va a descansar en paz sabiendo que el culpable ha pagado por lo que ha hecho", luego de que ayer fuera asesinado a golpes y machetazos el principal sospechoso del crimen.
"Mi hija va a descansar en paz sabiendo que el culpable ha pagado por lo que ha hecho y va a estar ella un poco más tranquila", dijo Pablo Riquel esta noche a Telefé Noticias frente a la comisaría 12da. hasta donde llegó una movilización.
El hombre además agradeció "a todos los vecinos porque siempre" lo "acompañaron" y lo "van a acompañar", y pidió "un poco de seguridad para el barrio" porque todos "tienen familia, tienen hijos".
Mientras Pablo hablaba, uno de los manifestantes señaló que era "mentira" que el principal sospechoso del crimen de Abigail estuviera "muerto" y aseguró que "la policía lo estaba cubriendo".
Sin embargo, el fiscal de la causa Ignacio López Bustos confirmó el deceso de José Antonio Guaymás (25), alias "Culón", "la persona" que buscaban por el asesinato de la niña.
Después de tres días de una intensa búsqueda, Guaymás fue sorprendido en el barrio 240 Viviendas, ubicado en El Manantial, al sur de la capital tucumana, por un grupo de personas que, antes de entregarlo a la Policía, lo desnudaron, lo golpearon con los puños y le patearon la cabeza cuando estaba en el suelo, causándole la muerte.
"Se trata de la persona que estábamos buscando por el crimen de Abigail", reconoció anoche el fiscal Bustos, quien precisó que "está muerto y el cuerpo fue llevado a la Morgue Judicial, donde se llevará a cabo la autopsia".
El fiscal agregó que "hay coincidencia en los cortes que presentaba en ambos brazos, que eran muchos, además de tatuajes y otros rasgos físicos", y añadió que el hombre "fue atacado a golpes y a machetazos".
Guaymás había salido hace menos de diez días de la cárcel y contaba con numerosos antecedentes, entre ellos al menos diez intentos de robo.
El ataque al expresidiario, por el que hasta el momento no hay detenidos, fue registrado por personas que estaban en el lugar con sus teléfonos celulares, por lo que se viralizaron varios videos.
En uno de los videos del linchamiento difundido en redes sociales, se ve el momento en el que el hombre es agredido a patadas y botellazos por un grupo de personas, que luego lo lleva a la rastra con el rostro ensangrentado, mientras recibía todo tipo de insultos.
En otro video, en tanto, se observa cómo policías protegían el cuerpo del hombre -que yacía inmóvil boca abajo y con el pantalón bajo- mientras unas veinte personas intentaban continuar con la agresión.
La filmación concluyó con un aplauso de todos los presentes mientras gritaban "¡Justicia!".
"Tuvimos que hacer justicia con manos propia y les advertimos a los que ataquen a nuestro niños que les pasará lo mismo", aseguró uno de los agresores a la prensa al justificar el accionar de las personas, que en algunos casos se movilizaban en caballos.
Por su parte, el padre de la niña, Pablo Riquel, participó esta noche de una movilización que llegó hasta la comisaría 12da, que tenía a su cargo la investigación del caso y aseguró que su hija "va a descansar en paz sabiendo que el culpable ha pagado por lo que ha hecho y va a estar ella un poco más tranquila".
"Señores policías, disculpen las molestias pero nos están matando", decía el mensaje de una pancarta que fue colocada en la puerta de la sede policial, en tanto que gritaban: "¡el pueblo unido jamás será vencido!".
En forma simultánea, otros grupo se instaló frente a la morgue judicial a la espera de la confirmación de la identidad del cadáver que llegó a ese lugar y fue sometido a una autopsia por parte de los médicos forenses.
Algunos de los manifestantes intentaron romper el vallado que se montó en el acceso para asegurarse que el cuerpo de Guaymás estaba en el lugar, algo que confirmaron posteriormente los voceros judiciales
Durante la tarde, cientos de personas se movilizaron por las calles del centro tucumano reclamando justicia por Abigail, pero la marcha se interrumpió de forma abrupta cuando se conoció que el presunto asesino había sido ubicado.
Abigail, quien vivía en un barrio muy humilde, fue hallada asesinada el domingo pasado en un descampado de la zona norte de San Miguel de Tucumán, detrás de unos enormes montículos de tierra que se formaron con la apertura de una calle en el lugar.
De acuerdo con los informes médicos, la niña murió a raíz de un golpe en la cabeza y tenía signos de abuso sexual y de intento de asfixia manual.
En el marco de la causa, uno de los aportes fundamentales fue la declaración de un testigo que aseguró haber visto al sospechoso, apodado "Culón", cuando caminaba de la mano de la pequeña por el lugar donde finalmente, horas más tarde, fue encontrado el cadáver.
Según la primera hipótesis que manejan los investigadores, la niña les pidió permiso a sus padres para ir jugar en la casa de una amiguita del barrio, aunque nunca llegó hasta ese lugar.
En el camino, sospechan los pesquisas, fue abordada por su asesino, quien la llevó hasta un descampado ubicado en las avenidas Francisco de Aguirre y Las Américas, donde la atacó sexualmente y luego la mató, presuntamente, para evitar que lo identificara.
"Mi hija va a descansar en paz sabiendo que el culpable ha pagado por lo que ha hecho y va a estar ella un poco más tranquila", dijo Pablo Riquel esta noche a Telefé Noticias frente a la comisaría 12da. hasta donde llegó una movilización.
El hombre además agradeció "a todos los vecinos porque siempre" lo "acompañaron" y lo "van a acompañar", y pidió "un poco de seguridad para el barrio" porque todos "tienen familia, tienen hijos".
Mientras Pablo hablaba, uno de los manifestantes señaló que era "mentira" que el principal sospechoso del crimen de Abigail estuviera "muerto" y aseguró que "la policía lo estaba cubriendo".
Sin embargo, el fiscal de la causa Ignacio López Bustos confirmó el deceso de José Antonio Guaymás (25), alias "Culón", "la persona" que buscaban por el asesinato de la niña.
El principal sospechoso de abusar y matar a Abigail, cuyo cadáver fue encontrado el domingo en un descampado de Tucumán, fue asesinado en la tarde de ayer a golpes y machetazos por un grupo de familiares y vecinos de la víctima, informaron fuentes judiciales y policiales.
Después de tres días de una intensa búsqueda, Guaymás fue sorprendido en el barrio 240 Viviendas, ubicado en El Manantial, al sur de la capital tucumana, por un grupo de personas que, antes de entregarlo a la Policía, lo desnudaron, lo golpearon con los puños y le patearon la cabeza cuando estaba en el suelo, causándole la muerte.
"Se trata de la persona que estábamos buscando por el crimen de Abigail", reconoció anoche el fiscal Bustos, quien precisó que "está muerto y el cuerpo fue llevado a la Morgue Judicial, donde se llevará a cabo la autopsia".
El fiscal agregó que "hay coincidencia en los cortes que presentaba en ambos brazos, que eran muchos, además de tatuajes y otros rasgos físicos", y añadió que el hombre "fue atacado a golpes y a machetazos".
Guaymás había salido hace menos de diez días de la cárcel y contaba con numerosos antecedentes, entre ellos al menos diez intentos de robo.
El ataque al expresidiario, por el que hasta el momento no hay detenidos, fue registrado por personas que estaban en el lugar con sus teléfonos celulares, por lo que se viralizaron varios videos.
En uno de los videos del linchamiento difundido en redes sociales, se ve el momento en el que el hombre es agredido a patadas y botellazos por un grupo de personas, que luego lo lleva a la rastra con el rostro ensangrentado, mientras recibía todo tipo de insultos.
En otro video, en tanto, se observa cómo policías protegían el cuerpo del hombre -que yacía inmóvil boca abajo y con el pantalón bajo- mientras unas veinte personas intentaban continuar con la agresión.
La filmación concluyó con un aplauso de todos los presentes mientras gritaban "¡Justicia!".
"Tuvimos que hacer justicia con manos propia y les advertimos a los que ataquen a nuestro niños que les pasará lo mismo", aseguró uno de los agresores a la prensa al justificar el accionar de las personas, que en algunos casos se movilizaban en caballos.
Por su parte, el padre de la niña, Pablo Riquel, participó esta noche de una movilización que llegó hasta la comisaría 12da, que tenía a su cargo la investigación del caso y aseguró que su hija "va a descansar en paz sabiendo que el culpable ha pagado por lo que ha hecho y va a estar ella un poco más tranquila".
"Señores policías, disculpen las molestias pero nos están matando", decía el mensaje de una pancarta que fue colocada en la puerta de la sede policial, en tanto que gritaban: "¡el pueblo unido jamás será vencido!".
En forma simultánea, otros grupo se instaló frente a la morgue judicial a la espera de la confirmación de la identidad del cadáver que llegó a ese lugar y fue sometido a una autopsia por parte de los médicos forenses.
Algunos de los manifestantes intentaron romper el vallado que se montó en el acceso para asegurarse que el cuerpo de Guaymás estaba en el lugar, algo que confirmaron posteriormente los voceros judiciales
Durante la tarde, cientos de personas se movilizaron por las calles del centro tucumano reclamando justicia por Abigail, pero la marcha se interrumpió de forma abrupta cuando se conoció que el presunto asesino había sido ubicado.
Abigail, quien vivía en un barrio muy humilde, fue hallada asesinada el domingo pasado en un descampado de la zona norte de San Miguel de Tucumán, detrás de unos enormes montículos de tierra que se formaron con la apertura de una calle en el lugar.
De acuerdo con los informes médicos, la niña murió a raíz de un golpe en la cabeza y tenía signos de abuso sexual y de intento de asfixia manual.
En el marco de la causa, uno de los aportes fundamentales fue la declaración de un testigo que aseguró haber visto al sospechoso, apodado "Culón", cuando caminaba de la mano de la pequeña por el lugar donde finalmente, horas más tarde, fue encontrado el cadáver.
Según la primera hipótesis que manejan los investigadores, la niña les pidió permiso a sus padres para ir jugar en la casa de una amiguita del barrio, aunque nunca llegó hasta ese lugar.
En el camino, sospechan los pesquisas, fue abordada por su asesino, quien la llevó hasta un descampado ubicado en las avenidas Francisco de Aguirre y Las Américas, donde la atacó sexualmente y luego la mató, presuntamente, para evitar que lo identificara.