Márcico: "La Selección no fue mi prioridad”
El exfutbolista de Alberto "Beto" Márcico admitió que "la Selección Argentina" no fue "prioridad" en su carrera porque su deseo siempre fue "jugar en Europa", algo que le dejó en claro a Carlos Salvador Bilardo en 1985 cuando dirigía el equipo nacional.
Aquel año, recordó el "Beto", Bilardo le advirtió que si dejaba Ferro Carril Oeste para jugar en el Viejo Continente ya no sería "prioridad" en sus listas de convocados pero que igualmente decidió partir al Toulouse de Francia, donde permaneció hasta 1992 cuando volvió al país para jugar en Boca Juniors.
"En el '85 Bilardo fue muy claro y me dijo que si me iba a Europa ya no era prioridad para la Selección y me fui igual. Cuando volví de Francia, en 1992, fui convocado por (Alfio) Basile y le hice saber que mi único deseo era jugar en Boca y obvio, ya no me citaron más", explicó Márcico en el programa Ferro en Radio (AM 670).
El "Beto", campeón nacional con el club de Caballito en 1982 y 1984, recordó sus comienzos en esa institución, en la que debutó oficialmente en 1980. "Llegué a probarme junto con un amigo, tenía casi 20 años y no había realizado inferiores en ningún club, salvo unos tres meses que estuve en Racing".
"En realidad no pensaba ser jugador profesional", confesó Márcico, antes de considerar a Carlos Timoteo Griguol, su DT en Ferro, como "un padre futbolístico".
"Ese equipo de Ferro era sensacional. Todos aportaban lo suyo y salimos campeones 1982 y 1984, ganándole la final a River con una goledada en el Monumental y después definiendo en nuestra cancha. Jugábamos un fútbol que hoy es reconocido pero en aquellos tiempos era criticado por los medios que habían armado una polémica entre (César Luis) Menotti y Bilardo. Entonces Griguol y Ferro cayeron en la volteada sin ninguna razón", opinó.
A propósito, abundó: "A mí me dirigieron los tres: Griguol, Menotti y Bilardo y puedo decir que los que más se parecen son Griguol y Menotti porque querían que sus equipos jugaran buen fútbol. Es más, Griguol quería que si hacías infracción a un rival lo levantaras de la mano y le pidieras disculpas".