Malestar entre los profesionales de la salud por imputaciones a médicos
En San Francisco expusieron su rechazo e indignación por imputaciones a colegas del geriátrico de Saldán acusados por el brote de coronavirus y hoy realizarán un "bocinazo" como signo de protesta contra la criminalización de los profesionales de la salud. Mientras tanto, la disminución de ingresos enciende las alarmas entre las clínicas. "Fuimos discriminados en la pandemia", aseguraron.
A partir de que en nuestro país se estableció el aislamiento preventivo, social y obligatorio que comenzó a regir el 20 de marzo y se extiende -con algunas flexibilizaciones- hasta el próximo 7 de junio, los profesionales de la salud han tenido una actuación fundamental a la hora de contener el avance de la pandemia del covid-19.
Sin embargo, en los 67 días de aislamiento, los trabajadores de la salud pasaron de ser héroes sin capas aplaudidos desde los balcones a peligrosos villanos, sufriendo todo tipo de discriminaciones por parte de sectores de la población que sienten amenazada su salud con el solo hecho de tener cerca de uno de ellos.
El reciente caso de contagio masivo registrado en un geriátrico de la localidad cordobesa de Saldán puso a estos profesionales en el ojo. La Justicia provincial imputó a dos médicos pertenecientes a ese establecimiento por "propagación de enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas", lo que inmediatamente despertó el repudio generalizado de profesionales, clínicas y sanatorios que decidieron protestar en distintos puntos de la provincia.
En San Francisco la medida se cumplirá hoy lunes a partir de las 17, mediante un "bocinazo" en torno a la Plaza Cívica, bajo la consigna "Ni héroes ni asesinos. Somos médicos. Basta de maltratos, culpas y amenazas".
Al rechazo declarado por la Federación de Entidades Profesionales Universitarias de la Provincia de Córdoba (Fepuc) y la Asociación de Clínicas y Sanatorios Privados de la Provincia de Córdoba (Aclisa) se sumó el de médicos autoconvocados de nuestra ciudad.
En diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO, los profesionales locales dejaron en claro su postura respecto a la peligrosa estigmatización social hacia los equipos de salud, primera línea de combate de la pandemia.
Además, expusieron los efectos colaterales del nuevo virus que contrajo el sistema de salud privado y generó que la gente, por temor a contraerlo, no se asome por las clínicas y sanatorios por otras enfermedades, provocando una drástica disminución de ingresos. "Las clínicas y sanatorios fuimos discriminados en la pandemia", advirtieron desde el sector alegando que la mayoría de los recursos "se volcaron en la salud pública".
El detonante del reclamo
El secretario de Relaciones Federativas de la Confederación Médica de la República Argentina y presidente de la Federación Médico Gremial de Córdoba, Daniel Martelli junto al presidente del Centro Médico San Francisco, Luciano Stoppani y al doctor Pablo Vega brindaron su total apoyo a los colegas acusados por el brote en la residencia Santa Lucía.
"Hay mucha gente que sale y aplaude de corazón el esfuerzo que se hace pero siempre surgen inadaptados en el medio que opacan todo el trabajo", dijo Martelli y reclamó que "se tomen medidas" para proteger a los profesionales al tiempo que puso como ejemplo el hecho de que "el doctor Lucas Figueroa, de Saldán, tuvo que soportar que le apedreen el auto y la casa y hasta le hicieron una manifestación en su contra".
"Muchos médicos fueron amenazados mediante notas anónimas. Eso genera una angustia muy grande que los médicos tenemos que soportar todos los días", siguió Martelli.
Por su parte, Vega recordó un episodio de un médico que trabaja en Unquillo y "un día hizo fiebre y se tomó la decisión de hisoparlo y cuando llegó a la casa se encontró con que se la habían apedreado".
Martelli continuó expresando que lo ocurrido con los profesionales de Saldán "fue el detonante" para que la comunidad médica exprese su descontento. "Ya veníamos con el reclamo para que nos protejan y esto fue la gota que colmó el vaso. No solo tenés que estar atendiendo en malas condiciones, al pie del cañón, con riesgo de enfermarse sino que además tenés que tener cuidado que no te metan preso".
Vega se sorprendió por "la velocidad increíble con la que actuó la Justicia en este caso de los médicos de Saldán porque teóricamente la Justicia estaba de feria y sin embargo, acá se ocuparon al instante del tema con una celeridad que sorprende".
Cabe recordar que la Unidad Fiscal de Emergencia Sanitaria (Ufes), que lleva adelante las acciones penales en el marco del coronavirus dio a conocer el viernes la imputación del médico Lucas Figueroa en la figura de "propagación de enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas" en calidad de autor, y al director médico de la Residencia de Saldán, Marcelo Santiago Lazaro, por considerar que habría incurrido en la comisión del delito de "propagación culposa de enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas", agravada por el resultado de enfermedad y muerte, en calidad de autor.
En la residencia se infectaron 56 personas, 11 de las cuales fallecieron.
Stoppani cruzó a Benedetti
Stoppani aludió a las expresiones del intendente de Arroyito, Gustavo Benedetti, quien al momento de referirse al primer caso de coronavirus en su ciudad aseguró que "nos metieron el virus en una ambulancia" al cuestionar el accionar del Hospital Italiano de Córdoba desde donde dieron de alta a la paciente arroyitense que luego resultó positiva de la enfermedad.
"Los intendentes defienden su territorio y tratando de cuidar al máximo que no ocurra nada y lo ven de esa forma. No obstante, pienso que fue una expresión desafortunada de parte de Benedetti", indicó.
Clínicas privadas en crisis
Martelli aseguró que "el sector privado está complicado", marcando de esta manera la preocupante situación por la que atraviesan clínicas y sanatorios en la provincia de Córdoba a partir de la fuerte caída del número de pacientes que desaparecieron de las consultas, disminución de intervenciones quirúrgicas o tratamientos que quedaron inconclusos por miedo a contraer el covid-19.
"Las clínicas y sanatorios fuimos discriminados en la pandemia", aseguró Martelli al indicar también que la mayoría de los recursos "se volcaron en la salud pública".
Los médicos recordaron que desde el inicio de esta pandemia, el personal de la salud y las instituciones privadas han puesto a disposición de toda la comunidad su capacidad de atención y esfuerzo para estar a la altura de las circunstancias.
"Una clínica tiene que estar preparada siempre para atender una determinada demanda. Hoy la demanda no está y las clínicas están abiertas igual. El sistema de salud argentino está quebrado hace mucho tiempo", agregó.
A su vez, Vega acotó que "la pandemia demostró que los recursos para la salud estaban disponibles. Si pudieron dotar al Hospital Iturraspe con doble de los respiradores en el transcurso de 20 días, el dinero siempre estuvo".