Los que trabajan en su día
Hay trabajos que no saben de feriados pero para quienes los llevan a cabo, es motivo de orgullo. Los festejos, el descanso pueden quedar para otro momento porque de ellos depende que la sociedad siga "funcionando".
El olor a empanadas, locro, un asado... todas comidas propias de los festejos del Día del Trabajador se verán impedidas para muchos "laburantes" este miércoles. No es por capricho, sino que simplemente hay tareas que no pueden dejar de hacerse, servicios indispensables que tienen que brindarse.
Sucede que la sociedad funciona con determinados servicios esenciales y ahí están los trabajadores como engranajes que mueven las bases para que un vecino pueda ir al almacén a comprar, a la estación de servicios a cargar nafta o acudir a la Policía por un problema.
Son trabajos en los que no hay feriados y que a muchos entonces los tendrá en la calle dando vueltas, atendiendo, ayudando y sirviendo a la comunidad este 1 de mayo.
Económicamente todos son compensados pero hay cosas dentro de la cultura que trascienden al valor monetario que pueda dárseles.
El Día del Trabajador es una de esas, sin embargo, la sociedad seguirá girando gracias a ellos.
Juliana
Piazzo. En las estaciones de servicio la atención al cliente no tiene feriado
Firmes en la playa
Para Juliana Piazzo, el Día del Trabajador no será de descanso. Quizá su franco sea otra jornada y ahí pueda descansar, pero este 1 de mayo siempre con una sonrisa y a gusto por tener una tarea que la solventa económicamente atenderá en la estación de servicio Axion, en Caseros y 9 de Julio.
La joven se encarga de tomar pedidos, preparar el café, cobrar y mantener impolutas las instalaciones. Gracias a su trabajo, la gente sigue eligiendo al lugar para tomar un café, leer LA VOZ DE SAN JUSTO aun cuando sea feriado.
"Nosotros vamos a hacerle honor al día y atender al público acá en la estación de servicio. Con mi compañera nos encargamos de la atención a los clientes, limpiamos, preparamos el café", dijo la joven sobre su labor.
Para ella y los playeros de las estaciones de la ciudad será un día normal donde estarán esperando a los clientes que necesitan cargar nafta, comprar, salir de un apuro o simplemente parar a tomar algo. Por eso expresó un deseo para esta jornada venidera: "Mi mensaje, en especial, para mis compañeros es que tengan un muy lindo día en cualquier ámbito y rubro esperamos que la pasen muy bien".
La sargento Lorena Jobson llevará el uniforme, orgullosa de su profesión, este miércoles
El desayuno no se suspende
Son muchas las personas que tienen que viajar, están hospedadas y necesitan del servicio de los hoteles. Todos estos espacios tienen un servicio gastronómico que complementa la estadía.
En el Hotel Mediterráneo está Hugo Mansilla, que hace poco está encargado de la confitería del lugar. Entre pocillos recién lavados, medialunas de la mañana y el inconfundible olor del café, el hombre que tiene 40 años en el rubro gastronómico contó que "el miércoles el desayuno se hace igual".
Con unos pequeños ajustes, Hugo trabajará una parte del día preparando la comida y después, "en familia" aprovechará las restantes horas de descanso.
Reconoció que "a veces en el trabajo la gente no los reconoce como profesionales por las tareas que hacen" pero eso nunca lo desanimó en este tiempo y por eso no duda del oficio que eligió y del que "está orgulloso".
Mansilla es consciente de que así como él habrá otros trabajadores que también deberán tener un día laboral como cualquier otro, pero asimismo "les deseó un muy feliz día de descanso, en la medida que se pueda".
Con el uniforme a todos lados
La gente dice que se siente "más segura" con los policías barriales en las calles de San Francisco. Son varios los efectivos que patrullan a pie, en bici o moto la ciudad buscando llevar seguridad a los vecinos y ayudarlos ante cualquier imprevisto.
Esas tareas están a cargo de una mujer, la sargento Lorena Jobson, que es jefa de Compañía en la Policía Barrial de nuestra ciudad. Cuando la conocimos venía de la calle, el lugar donde más le gusta estar porque la conecta con quienes más la requieren.
"Nuestro objetivo acá es el de llevar seguridad y ayuda, estar en contacto y tener más relación con los ciudadanos. Por suerte, todos nos reciben muy bien y están satisfechos con nuestro trabajo", relató Jobson sobre las tareas que desempeña habitualmente.
Para ella no hay día que no se conciba sin el uniforme. Los policías no tienen feriados y por eso este miércoles igual que muchos otros efectivos volverá a calzarse el uniforme para salir a la calle. "Hace 9 años que estoy en la fuerza, esta es mi verdadera vocación", sostuvo la sargento y agregó: "Los policías trabajamos todos los días por igual. Sí sabemos que es una fecha muy especial pero nosotros siempre volveríamos a elegir esta profesión".
La fidelidad a las tareas, el orgullo de tener un trabajo en tiempos donde a muchos se les dificulta acceder al mundo laboral son todas cualidades que hacen que todos aquellos "laburantes" no se arrepientan de tener que ir a su puesto de trabajo cuando la mayoría descansa.