La Iglesia Cristo Rey bendecirá a las mascotas el próximo domingo

El ritual también se reanalizará en la Capilla del Divino Niño de barrio El Prado.
La presencia de una mascota en el hogar suele ser vivida como una bendición por contar entre las personas con un ser que de inmediato incorporamos a la familia como si fuera uno más de ella y muchos de nosotros solemos pensar que su llegada configura una especie de bendición.
Por eso, el próximo domingo a las 12, la Iglesia Cristo Rey realizará el ritual de la bendición de las mascotas al término de la celebración de la misa en ese templo, así como también en la misa que se celebra en la Capilla del Divino Niño en el barrio El Prado, que concluye a las 20.
Esta fecha se tomó como proximidad al viernes 29 de abril, Día del Animal, por lo cual desde la Iglesia Cristo Rey se pretende brindar una bendición especial a todas las mascotas.
La bendición de animales es un ritual presente en algunas religiones para cumplir diferentes propósitos. El acto de bendecir a una especie animal, implica un vínculo con el ser humano, sea este un animal de compañía (mascota), ganado u otros animales domesticados para el uso del sector agropecuario.
Es una práctica común en la mayoría de las denominaciones del cristianismo, así como también en el islam, el judaísmo, el sintoísmo, hinduismo, entre otras. Asimismo, históricamente, la bendición de un animal previa a las prácticas de sacrificio de animales o rituales donde se les utilizan, ha sido considerado como un elemento clave para algunas creencias.
El sacerdote Mario Ludueña, cura párroco de la Iglesia Cristo Rey, recordó que la bendición de las mascotas es una práctica "bastante común" para la Iglesia Católica, que incluso figura en el bendicional en un apartado dedicado especialmente a las mascotas, aunque en su caso particular explicó que "desde que yo soy párroco aquí es la primera vez que hago estas bendiciones".
"En este tiempo de profunda crisis ecológica, esta es una manera de llamar profundamente la atención y resaltar la necesidad de revalorizar la obra creadora de Dios".
Para este caso, el sacerdote solicitó a todos los interesados que, una vez terminada la misa, "ingresen al templo con sus mascotas equipadas con todas las medidas de seguridad necesarias de manera que puedan recibir la correspondiente bendición".
El ser humano como administrador de la creación
El padre Mario recordó que "desde el inicio del Génesis se habla del ser humano como administrador de la creación" tras lo cual explicó que este tipo de prácticas "nos ayuda a tomar conciencia de la importancia que tienen los animales en el mundo".
De hecho, el Papa Francisco en su encíclica Laudato Sí dedica una sentida reflexión acerca de la importancia que tienen los animales en el mundo.
Entre otras cosas, el Sumo Pontífice explica que "cuando el corazón está auténticamente abierto a una comunión universal, nada ni nadie está excluido de esa fraternidad. Por consiguiente, también es verdad que la indiferencia o la crueldad ante las demás criaturas de este mundo siempre terminan trasladándose de algún modo al trato que damos a otros seres humanos. El corazón es uno solo, y la misma miseria que lleva a maltratar a un animal no tarda en manifestarse en la relación con las demás personas. Todo ensañamiento con cualquier criatura «es contrario a la dignidad humana».
"Es una bendición muy linda"
El padre Ludueña comentó que en este caso "es una bendición muy linda" la que se les da a las mascotas porque "ayudan mucho a los niños y adultos en diferentes momentos de la vida. Se trata de seres que brindan una invalorable compañía a personas evitando que las mismas se encierren ya que en muchos casos terminan 'conversando' con ellas".
Luego explicó que esta bendición a las mascotas "es la segunda acción" que la Iglesia Cristo Rey pone en práctica vinculada con resaltar la importancia del cuidado de la naturaleza.
Más adelante recordó que "en los cursillos de bautismo entregamos a las familias que así lo deseen un pequeño árbol autóctono para el que quiera lo lleve a su casa y a la vez que ven crecer a su hijo, vean crecer también a la naturaleza representada en ese árbol".
Solicitud de bendiciones
A lo largo del tiempo, los fieles católicos suelen solicitar a los sacerdotes que realicen bendiciones sobre diferentes cosas de la vida cotidiana.
En este caso, es común recibir una bendición sobre personas o bien un inmueble que se convertirá en el hogar de una familia, así como también de algunos vehículos como automóviles o motocicletas en la creencia de que esta bendición obrará podrá obrar como una especie de protección hacia las personas.
Entre las bendiciones más frecuentes se cuentan las mujeres embarazadas. "En este caso el pedido de una bendición es muy común, sobre todo hacia el niño por nacer" mientras que "siempre tenemos pedidos de bendición para algún objeto religioso" como un rosario, crucifijo o imagen.
Además, explicó que "nos piden mucho la bendición de agua para contar con agua bendita en el hogar. Muchas veces se la utiliza para persignarse al inicio del día o para rociar la vivienda" que se habita.
En todos los casos, el padre Mario recomienda a las personas que solicitan la bendición de un objeto o elemento "que sea bien utilizado" es decir "que su finalidad sea la correcta ya que la utilización de agua bendita es una manera de implorar a Dios por su ayuda".