La Fábrica: la función inigualable del club en el desarrollo integral de niño
En este lugar los chicos dan sus primeros pasos rumbo a la escolaridad formal por medio de actividades lúdicas y plásticas.
El jardín de infantes de La Fábrica Club, de calle Belgrano 300, es un lugar diferente donde la naturaleza hace lo propio para el aprendizaje de los niños.
Con 19 años de trayectoria en la educación inicial, la docente Liliana Sández, tan querida por sus "pollitos", lleva adelante actividades recreativas y de aprendizaje dentro y fuera de la sala.
El jardín aborda al niño como un ser independiente y único, convirtiéndose en un espacio donde el chico empieza a dar sus primeros pasos hacia el nivel inicial de la educación formal.
En La Fábrica los chicos realizan actividades lúdicas y plásticas, entre otras; utilizando todas las variantes para su mejor aprendizaje.
Además, el gran parque y el resto de los salones del club permiten hacer otras tareas educativas relacionadas con lo corporal, logrando así su ubicación en el espacio y una mejor relación con sus pares. Los chicos toman clases de educación física, baile, expresión corporal y el contacto con la naturaleza es permanente.
Aparte de la actividad educativa que rige durante el año, en el receso escolar de verano, el jardín cuenta con acceso a la pileta y predio del club.