La crisis no espanta a los jugadores, aunque se apuesta menos
Radiografía del apostador de juegos de azar. En las agencias, el flujo de gente es el mismo pero se apuesta menos.
El Loto y el Quini 6 hicieron historia la última semana. El domingo 2 de julio, un apostador ganó $532 millones con el primero obteniendo las combinaciones perfectas en los seis números y los dos del Jackpot. Y el miércoles siguiente por la noche, un cordobés afortunado ganó $37 millones.
Si bien los juegos de azar son una fija para muchos cada semana, la noticia de estos dos agraciados movió un poco más las apuestas en los últimos días. Aunque, reconocen los agencieros de San Francisco y Frontera, ya no se juega tanto dinero como antes. En esto, la crisis económica actual -que sufren muchos- tiene mucho que ver. "La gente está con el tema de la inflación. El que antes jugaba $150, hoy juega $100. Cada vez apuestan menos, pero juegan", advirtió Virginia, de la agencia Pandora, ubicada en pleno centro de la ciudad.
Del lado santafesino, la realidad es la misma: "Hace unos años atrás la gente apostaba más, ahora cuidan su bolsillo debido a la crisis", reveló Nadia Pontet, propietaria de cuatro sucursales del As de la Suerte.
Este escenario actual no es nuevo, sino que la disminución en la recaudación se arrastra desde el año pasado. En el caso de Lotería de Córdoba, en 2016, el ente de juego estatal obtuvo ingresos por $1.678 millones, apenas 25,8 por ciento más que los $1.333, millones de 2015. Los cálculos publicados realizados de manera oficial y privada situaron la inflación en torno del 40% el año pasado, lo que significaría una caída real de las apuestas en la provincia.
Cuánto se gasta
Para Pontet, en Frontera un apostador habitual llega a gastar entre $500 y $700 al mes. "Hubo un tiempo en que la gente venía con sus Asignaciones Familiares o subsidios del Estado que cobraban en el banco de Santa Fe que está al lado de nuestra agencia y jugaban todo. En promedio, consideramos que la gente juega el 2% de su sueldo", analizó.
Para los agencieros, lo que más se juega son el Quini 6 y la Quiniela. Por detrás, viene el Loto, Brincos, Telekino, Raspaditas, Lotería de Santa Fe y también Poceada.
Pontet explicó que "la Quiniela o el Quini 6 son juegos fáciles, que la gente los entiende y puede seguir. El Loto, en cambio, es más complejo, fue cambiando con el tiempo y la gente se confunde, y además, hasta hace unos días, nunca salía".
Entre cábalas y sueños
Para un apostador, la cábala es su carta en la manga. "La gente juega con distintas estrategias. Lo que sueña, la patente del auto, la habitación donde está internado un pariente, la dirección de una casa que sale en la televisión", bromeó Virginia.
En este sentido, Pontet agregó: "Los apostadores tienen muchísimas cábalas y también lo aprenden de nosotros. Por ejemplo, cuando sueñan con un familiar fallecido juegan al 47 que es el muerto o el 48 que es el muerto que habla".
"Cuando les entregan las patentes de cualquier vehículo juegan las últimas 3 cifras; cuando hay un nacimiento juegan el número de habitación y el 02 por el niño. Otra cábala que tienen es para Navidad y es jugar el 33 por Cristo y en año nuevo las 4 cifras del año que se va y también que empieza".
Pontet contó algunos llamativos mitos dentro del juego: "Con la plata del premio, se compra pan y nunca calzado porque se considera que sino la suerte se va. Otro es que los lunes se juegan los números del sábado en el sorteo de la primera, porque aparentemente se vuelven a repetir. Los martes se apuestan a números dobles porque es más probable que salgan, por ejemplo el 11, el 33 o el 99. También cuando sale un animal, siempre al sorteo siguiente sale otro; por ejemplo si sale el gato (05) después sale el perro (06). El último -más parecido a una cábala- es entrar y salir siempre de la agencia con el pie derecho", describió.
Lo miran por tevé
Crónica TV es un canal quinielero por excelencia. Si uno presta atención, siempre ponchan números y los que juegan están siempre atentos a eso, revelaron desde las agencias.
La cuestión televisiva y farandulera parece ser el guiño del juego de los apostadores. "La gente selecciona qué jugar dependiendo por ejemplo de las fechas o acontecimientos claves. Con el casamiento de Messi se le apostó mucho al 69 que es el nombre Antonella, al 10 por Leonel, al 216 por los anillos que es el 16, y al 20 por la fiesta. Y salieron", contó Pontet.
El domingo 2 de julio al mediodía, en el programa "Morfi, la Peña" en Telefe, uno de los integrantes del grupo Los 4 del Suquía reveló su suerte en el programa de televisión con un número en particular y causó estragos en los quinieleros: "El lunes siguiente al programa vendimos en la matutina diez veces más que cualquier día. Hasta las 11 no paró de entrar gente", afirmó Virginia, relacionándolo con ese programa. El número era el 6327, que también se jugó a dos cifras. "Ese día no paró de entrar gente a la agencia", recordó Pontet.
Otra forma de selección -contaron las agencieras- son los pozos extras del Quini 6 y del Loto, que cuando se encuentran por encima de los $100.000.000, la gente elige los 6 números en base a los cumpleaños de sus familiares.
Días y fechas
Según fueron consultados los agencieros, cada apostador tiene sus días para jugar, sin embargo hay momentos en que se hace con más habitualidad. En palabras de Pontet, "la gente juega más en dos ocasiones. El último sábado de cada mes, por ser la última jugada del mes, se refuerzan los tres últimos números de la patente de los vehículos, de un crédito o de un plan de vivienda en la lotería Nacional, porque se considera que de esta manera se incentiva a la suerte para aquellos casos en que se necesite licitar". "También -agregó- juegan en fechas claves como el día del Padre, Madre y Navidad".
Entre
Córdoba y Santa Fe
A diferencia de la Lotería de Córdoba, la de Santa Fe suele ser más tentadora y eso es así por los descuentos que se aplican sobre los premios de las primeras: "La lotería de Santa Fe no aplica descuentos sobre los premios, ya que la lotería de Córdoba lo hace del 2%. Por ejemplo, de un premio de $30.000, si se hubiera jugado en la provincia de Córdoba le hubiesen descontado y quedado en $29.400". Además "los días sábados pagamos 700 veces las 3 cifras. Es decir, por cada peso apostado se gana $700. En cambio, en la lotería de Córdoba solo 600 veces", concluyó Pontet.