Jugó el Nacional para Sportivo, pasó por Boca y lo fichó el Barcelona

Se trata del cordobés Santiago Ramos Mingo, que se fue del "xeneize" en conflicto y llegó a costo cero al gigante español en febrero de este año. En nuestra ciudad, defendió la camiseta de la "Verde" en 2013.
En este 2020, antes de la consagración de Boca Juniors en la
Superliga Argentina, una noticia había sacudido al "xeneize", Santiago Ramos
Mingo (18), un juvenil marcador central que ya había ocupado un lugar en el
banco de suplentes del plantel profesional ni más ni menos que en la Copa
Libertadores, había fichado por el Barcelona de España en medio de un conflicto
con la institución, que perdía a una de sus máximas promesas.
Hasta allí, una historia conocida por la exposición mediática que había tenido por aquellos días de febrero. Pero un dato, poco recordado, emerge sobre el futbolista: jugó el Nacional de Baby Fútbol de nuestra ciudad en diciembre de 2013, defendiendo la camiseta de Sportivo Belgrano.
En aquella oportunidad, la "verde" llegó hasta los octavos de final, donde quedó eliminado a manos de Independiente de Avellaneda, en un certamen al que habían llegado varios "grandes" del fútbol argentino. De hecho, Boca Juniors fue el campeón de ese certamen ganándole la final a Talleres de Córdoba.
Su paso por la "verde"
En el mes de diciembre de 2013, se llevó a cabo la 38ª edición del Campeonato Nacional de Baby Fútbol, que contó con la presencia de varios equipos destacados del fútbol argentino como Boca, Independiente, San Lorenzo y Vélez, entre otros. La competencia estuvo reservada a niños categoría 2001.
La "verde", que fue dirigida técnicamente por Daniel Abratte, sumó a su base de chicos un total de cinco futbolistas provenientes de Atalaya de Córdoba para completar el equipo. Entre ellos se encontraba Ramos Mingo y Franco Vezzoni, que actualmente se desempeña en el Inter de Italia y ya sumó entrenamientos con el plantel profesional.
En la primera ronda, Sportivo Belgrano compartió zona con San Lorenzo B, Talleres B, River de San Francisco y La Hidráulica. Ganó de punta a punta su grupo, con puntaje perfecto.
Por su parte, en la segunda fase, cayó con Vélez Sarsfield, empató con 2 de Abril y le ganó a Cultural Arroyito, para meterse en los octavos de final donde quedó eliminado ante el "rojo" de Avellaneda.
El equipo de Sportivo en el Nacional: Ramos Mingo se ubica abajo, en la punta derecha
"Era el que hacía jugar al equipo"
El entrenador de aquel equipo de Sportivo Belgrano que contó con la presencia de Ramos Mingo, Daniel Abratte, indicó a LA VOZ DE SAN JUSTO que "era el jugador que hacía jugar al equipo. El Nacional lo jugó como volante, tenía muy buena salida".
"Hicimos un gran torneo, llegando hasta los octavos de final. A la base de jugadores que teníamos, que no era muy grande porque la mayor cantidad de niños en edad del Nacional juegan en clubes del Baby, le sumamos cinco chicos de Atalaya de Córdoba, por la buena relación que tenían ambos clubes", agregó Abratte.
"Hace poco tiempo otro chico del club, que era categoría 2000, me contó que Ramos Mingo había pasado al Barcelona, yo a algunos jugadores no los recordaba o les había perdido el rastro. Me jodían de que les había enseñado bien y por eso llegó a España", comentó entre risas la "bruja".
Ramos Mingo, con la camiseta del Barcelona
Su paso por Boca y la llegada a España
El zurdo marcador central, pasó cinco temporadas en las divisiones juveniles del Xeneize antes de marcharse al Barcelona, donde se desempeña en el equipo filial. A Boca llegó desde Atalaya de Córdoba, club que también lo había cedido a la "Verde".
En Boca, no llegó a debutar oficialmente pero sí firmó planilla y ocupó un lugar en el banco de suplentes, con Gustavo Alfaro como entrenador, en un choque de Copa Libertadores ante el Atlético Paranaense.
Tras llegar a España, Ramos Mingo firmó un contrato por tres años con el "Blaugrana", que le puso una cláusula de rescisión de 60 millones de euros, que ascenderá automáticamente a los 100 en caso de debutar en el primer equipo "Culé".
Vezzoni, en el Inter
Otro de los futbolistas que había llegado a Sportivo Belgrano para disputar aquella edición del Nacional fue Franco Vezzoni, otro joven proveniente de Atalaya que años más tarde también dio el salto al fútbol europea, más precisamente al Inter de Italia, donde permanece aún en el equipo primavera (reserva) y ya sumó entrenamientos con el plantel de primera división.