Sociedad
Invitan a los vecinos de barrio Sarmiento a adornar casas con motivos navideños
“Queremos que el barrio se vista de Navidad”, expresaron desde el centro vecinal organizador de la movida. Un barrio con vocación de hacer y gestionar. Luces led, reductores de velocidad, sendas peatonales y alarmas comunitarias, entre las demandas de los vecinos.
“Queremos que el barrio se vista de Navidad; que se respire en barrio Sarmiento el espíritu navideño”, manifestaron las nuevas autoridades del centro vecinal.
Para ello, invitan a cada frentista a decorar su casa, local o la cuadra con motivos navideños. Como agradecimiento, entre los vecinos que se “prendan” a esta propuesta la entidad barrial sorteará cajas navideñas.
“El objetivo es dar desde nuestro barrio a la ciudad un mensaje de paz en medio de un mundo convulsionado y en guerra”, aseguró Marcelo Pérez, presidente del centro vecinal.
Quienes participen decorando su vivienda, locales, cuadra o calle, entre el 8 y 18 de diciembre próximos, deberán enviar fotografías y datos personales al WhatsApp 3564 641615 (Olga).
Obras y servicios necesarios
Consultados sobre cómo está hoy barrio Sarmiento en cuanto a servicios y obras de infraestructura, Pérez indicó que necesitan “luces led a todo el sector”, ya que hoy esta tecnología ilumina “solo avenidas y bulevares como Sáenz Peña”.
Otra necesidad son los reductores de velocidad en calle López y Planes, “para que ésta no sea una pista de carrera. Así como en bulevar Sáenz Peña y en el camino interprovincial existen lomos de burro, queremos que también se coloquen en López y Planes, desde el interprovincial hasta Echeverría. El barrio tiene un constante movimiento por cuestiones deportivas, sociales y comerciales”.
En materia de tránsito, los vecinos además solicitarán a la municipalidad que “se pinten las sendas peatonales y se coloque carcelería para que la prioridad la tenga el peatón”. En el mismo sentido, los dirigentes vecinales piden “una campaña de concientización y educación vial, sin penalizaciones pero sí concientizando a los vecinos”, siguió Pérez.
“Somos el segundo barrio más poblado de la ciudad. Se necesitan obras de infraestructura como bacheo en las calles que hace mucho que no se hace”, agregó.
Sobre cuáles son las demandas más constantes de los habitantes del sector, Joaquín Yuan, primer vocal de la comisión barrial, afirmó que “la inseguridad es hoy el reclamo más urgente”.
Para garantizar seguridad, “desde el centro vecinal estamos siempre en contacto con las autoridades de la Departamental San Justo de la Policía de Córdoba y con el municipio para gestionar mejor y más iluminación. Será importe el aporte que haga el Cuerpo de Prevención Urbana próximo a ponerse en marcha así como también el funcionamiento de las alarmas comunitarias”.
Actualmente, 13 hogares cuentan con el sistema de alarmas comunitarias en el barrio, “pero queremos que se extienda a más familias porque lo consideramos una buena medida para prevenir hechos delictivos, aunque todavía falta capacitación a los usuarios para que el sistema sea aún más efectivo”, sostuvo Yuan. “En una primera etapa, esta política de seguridad dio resultados, pero el delito no descansa y es necesario reforzarla”, aportó Pérez.
“Con una buena iluminación, con alarmas y un trabajo mancomunado con los vecinos en materia de cuidados y campañas de prevención, eso redundará en beneficio para todos”, dijo.
“Todas las acciones y decisiones que tomamos como centro vecinal las abrimos a los vecinos. Contamos con un grupo de socios a los que les informamos cada movimiento del centro y estamos contactados con todos los vecinos para solucionar los problemas que surjan”, aseveró Pérez.
Proyecto del paseo urbano
Pérez señaló además que no abandonaron aquel proyecto urbanístico de un paseo en el ferrocarril para unir los barrios Sarmiento y La Milka. La idea de construir un paseo abierto desde el camino interprovincial hasta Echeverría, de ambos lados de las vías del Belgrano, que incluya veredas, bicisenda, iluminación, bancos, árboles, juegos, entre otras características, fue presentada al municipio quien la está analizando, según informó. “Estamos a la espera de una respuesta”.
“Es un proyecto extraordinario que nació en la anterior gestión junto al Centro Vecinal Barrio La Milka” –recordó-, que pretende lograr la intervención urbanística en el predio donde se encuentra emplazado el puente peatonal que cruza las vías del ferrocarril.
Un barrio con vocación de hacer
“El vecinalismo es un trabajo ad honorem, todos tenemos otras obligaciones laborales y dedicamos parte de nuestro tiempo para ponernos al servicio del vecino, para su bienestar -resaltó Pérez-. Siempre estamos dispuestos a escuchar al vecino”.
“Constantemente lanzamos campañas de socios para que más vecinos participen, pero entendemos que la situación económica es complicada”, coincidieron Alberto García, vicepresidente del centro vecinal, y Olga Zalazar, tesorera.
“La mayoría de quienes viven aquí son gente grande, muchos jubilados, aunque también hay jóvenes”, comentó Zalazar. Y precisamente allí está “una de las cuestiones más lindas del movimiento vecinal, que significa vocación y trabajo por el otro y es muy gratificante cuando las nuevas generaciones se suman”, asintió Pérez.
“Cuando entrás al barrio, quizás pase desapercibida, pero acá tenemos la gruta de la Virgen de la Medalla Milagrosa (en el predio del centro vecinal, en López y Planes 505) a quien le pedimos que nos guíe en estos momentos de incertidumbre y crisis”.
“Si todos trabajamos juntos, se pueden lograr grandes cosas, por ello, nuestro mensaje para los vecinos es que se acerquen al centro, que nos conozcan, que se sumen a participar, porque nosotros siempre los escucharemos e intentaremos llevar soluciones”, concluyó Pérez.