Intendentes cordobeses, bajo presión por el aguinaldo: caída de ingresos y más demandas sociales

El calendario marca una de las fechas más exigentes para las arcas municipales y el contexto económico no ayuda. En Córdoba, los intendentes enfrentan serias dificultades para afrontar el pago del medio aguinaldo de junio, en un escenario marcado por la baja en la recaudación propia, la caída de la coparticipación y un aumento sostenido en la demanda social.

En diálogo con La Voz del Interior, varios jefes comunales reconocieron que se ven obligados a recurrir al Fondo Federal Cordobés —una herramienta financiera creada en abril pasado— para poder cumplir con esta obligación salarial. Aunque desde el Centro Cívico aseguran que es un “grupo menor” el que pidió asistencia específica para aguinaldos, los intendentes aseguran que el malestar es generalizado.

“Estamos complicados, más aún los que no recibimos el municipio con cuentas ordenadas. Los que no ajustaron en este año y medio están muy complicados”, graficó un intendente radical del norte provincial. La frase, repetida en grupos de WhatsApp de funcionarios locales, sintetiza el clima que atraviesa a las administraciones municipales.

Más gastos, menos recursos

El impacto no se limita al sueldo extra. A la presión del aguinaldo se le suma una demanda social creciente. “Tenemos que mantener comedores, salud, Paicor, lo poco que queda. La obra pública, olvidate”, señaló Agustín González, intendente de Cruz Alta. En su municipio —como en tantos otros— los recursos se redirigieron a lo urgente.

Rubén Dagum, presidente del Foro de Intendentes Radicales, también puso el foco en la pérdida de ingresos. “La baja de la recaudación es el gran problema. Y la coparticipación provincial no ofrece previsibilidad”, denunció. Incluso adelantó que los legisladores radicales presentarán un pedido de informes al ministro de Finanzas, Guillermo Acosta, para que detalle cómo se están calculando los envíos a cada municipio.

Natalia Contini, intendenta de Anisacate, explicó que sin la ayuda del Fondo Federal no podría cumplir con el aguinaldo. “Hicimos planes de pago para que los vecinos se pongan al día, pero la recaudación cayó fuerte”, detalló. La jefa comunal, que llegó al cargo por el PRO pero ahora se identifica con La Libertad Avanza, advirtió además que la llegada del frío incrementó la demanda social.

¿Qué pasa en San Francisco?

Aunque hasta el momento la municipalidad de San Francisco, a cargo del intendente Damián Bernarte, no ha informado públicamente si requerirá asistencia provincial, en el entorno de los intendentes se señala que la situación no escapa a las dificultades del resto del interior cordobés. Con una recaudación que también se ve afectada por el contexto nacional y una presión creciente sobre las finanzas locales, no se descarta que eventualmente se evalúe recurrir al Fondo Federal Cordobés si la situación se agrava. Por ahora, no hay definiciones oficiales al respecto.

Entre la urgencia y la gestión

En municipios como Jesús María, el pago del medio aguinaldo está garantizado, pero el intendente Federico Zárate fue claro: “Vamos a tener que seguir ajustando gastos si queremos mantener el equilibrio”. Algo similar expresaron Sebastián Demarchi, de Morteros, y Edgar Bruno, de Canals, quienes reconocen que la salud pública está absorbiendo recursos que antes llegaban desde Nación.

“La Nación se queda con el 78% de lo que recaudamos y antes algo volvía. Ahora no vuelve nada. La provincia está haciendo un esfuerzo enorme”, sostuvo Bruno, alineado con el PJ.

El Fondo Federal Cordobés, creado con $30 mil millones —mitad aportados por la Provincia y la otra mitad retenida de la coparticipación municipal— aparece como la vía de escape en este escenario de estrechez. Según datos oficiales, algunos municipios lo usan para obras, pero otros, en menor medida, lo destinan al pago del medio aguinaldo.

La respuesta provincial

“Desde el Gobierno provincial hay decisión de acompañarlos. En cada pueblo hay una obra”, remarcaron cerca del gobernador Martín Llaryora. Esta semana, los intendentes recibirán la segunda cuota de coparticipación de mayo, con una suba del 19,8% respecto al mes anterior. Aunque el dato genera alivio, los intendentes dudan de que alcance.

“Hasta los municipios ordenados empiezan a mostrar déficit. No hay margen para imprevistos”, reconoció un jefe comunal del centro cordobés.

El contexto nacional —con recortes, caída del consumo y paralización de la obra pública— también juega su parte. Mientras tanto, los intendentes ajustan, recortan, y piden ayuda para atravesar una de las etapas más complejas en la gestión local de los últimos años.