Hoy es el Día del Bioquímico: “Trabajamos en equipo, con el paciente y con el médico”
Es una profesión para revalorizar, clave en la cadena de salud para llegar a un diagnóstico preciso. Cristina Felizia, bioquímica desde hace más de 40 años, analiza la actualidad junto a su colega Atilio Bonzano.
Por Isabel Fernández|LVSJ
Cristina María Felizia es bioquímica desde hace 42 años, cuando egresó de la universidad con un título que fue gestando desde muy chica. Hija de Eduardo Felizia, un reconocido bioquímico de la ciudad, creció entre tubos de ensayo, jeringas y probetas, abrazando la vocación de ayudar e investigar
Cada 15 de junio se conmemora en la Argentina el Día del Bioquímico, en honor al nacimiento del doctor Juan Antonio Sánchez, propulsor de la instauración de la profesión Bioquímica, con fuertes bases científicas y profesionales.
En esta fecha especial, LA VOZ DE SAN JUSTO quiso rescatar la historia de Felizia quien junto a su colega y socio Atilio Bonzano llevan adelante el Laboratorio Central que nació de la mano de sus padres que se juntaron y lo pusieron en funcionamiento hace más de 50 años y trabaja tanto con particulares como con la Clínica de Especialidades "Enrique J. Carrá (h)".
En épocas en que la difícil situación económica que atraviesa el país, la inflación y la suba del dólar impactan negativamente sobre la profesión, Cristina destaca la lucha diaria de los profesionales y el "trabajo en equipo" que se da en nuestra ciudad, entre médico, bioquímico y paciente.
"Afortunadamente en San Francisco trabajamos en equipo, con el paciente y con el médico. La cercanía que uno tiene con el paciente y con los médicos con quienes podemos consultar hace que los resultados sean óptimos. Esta situación quizá no se da en las grandes ciudades", afirmó.
Agregó que su para ella ser bioquímica "es una satisfacción" y comentó que su vocación nació desde chica cuando pasaba horas en el laboratorio de su padre. "Mi papá tenía el laboratorio al lado de casa por calle Vélez Sársfield y yo estaba prácticamente todo el día ahí con él, lo vi hacer análisis desde muy chica y así fui descubriendo mi vocación".
Atilio Bonzano y Cristina Felizia analizaron la actualidad de la profesión
La tecnología al servicio de la salud
Los bioquímicos estudian e investigan la composición química de los seres vivos y son un eslabón fundamental en la cadena de la salud ya que permiten muchas veces llegar a un diagnóstico preciso y hacer un buen seguimiento de distintas patologías. Con el avance de la tecnología la tarea cambió radicalmente en los laboratorios: de ser artesanal pasó a ser automatizada y digitalizada, mejorando la precisión de los resultados.
La profesional aseguró que el avance de la tecnología "hizo que se mejore en calidad de los análisis que tienen mayor precisión en los resultados, además los controles de calidad son mucho más exhaustivos y ahora se hace la digitalización de informes".
"Desde esos años a la actualidad donde la tecnología ha avanzado en forma vertiginosa, la tarea cambió totalmente -afirmó-. De un trabajo artesanal que se hacía en el laboratorio, ahora está prácticamente todo automatizado. Los aparatos reemplazan ese trabajo artesanal, se coloca un tubo de ensayo en una máquina que lo analiza y da el resultado, antes era todo manual".
Recordó que cuando hizo las prácticas en los dos últimos años de la carrera en la universidad, en el Hospital de Clínicas "no había materiales descartables. Se sacaban las muestras de sangre con jeringas y agujas que se esterilizaban cientos de veces, hoy es normal acceder a una jeringa y una aguja descartables".
Felizia remarcó que el laboratorio "ayuda al médico con el diagnóstico y con el seguimiento del tratamiento y es fundamental, el médico puede seguir con la clínica determinados parámetros pero hay patologías que sí o sí necesitan el resultado del laboratorio. La función del laboratorio es completar todo ese conocimiento para ayudar al médico".
"Tenemos que tener capacitación constante, porque aparecen patologías nuevas o análisis nuevos y hay que estar informados. Tuvimos desafíos que afrontar en el momento como el covid, la gripe A o el dengue. Con el covid tuvimos que implementar distintas técnicas para la toma de muestras como el hisopado, el lugar y la vestimenta adecuados", dijo.
La crisis económica y el impacto en el laboratorio
La bioquímica aseguró que la situación actual de los laboratorios es muy difícil. "Tenemos insumos y aparatos que tienen un costo en dólares y los repuestos también. Mientras tanto el 90% de nuestro trabajo pasa por las obras sociales y, con una inflación de más del cien por ciento, nosotros tenemos la cobranza de nuestras prácticas realizadas entre tres y cuatro meses después".
"Actualmente estamos atravesando una crisis como una de las tantas que pasamos en la Argentina, pero para nosotros con la inflación es el peor de los escenarios. Es muy difícil porque todo el esfuerzo que se pone día a día no alcanza para renovarnos y avanzar. Esperamos que pase esta situación", aseguró.
Finalmente junto a su colega Atilio Bonzano dejó un saludo para todos los colegas en su día y un mensaje para los jóvenes bioquímicos. "La perspectiva del bioquímico es participar cada vez más en el diagnóstico médico, los invitamos a capacitarse en todo y a invertir en lo que se pueda en equipos lo más moderno posibles. Esperamos que la situación económica mejore porque estamos pasando un momento difícil".
"No se puede trabajar a plazo con el nivel de inflación que tenemos", aseguró Dante Ottero
La economía pone en jaque a los laboratorios
El Centro de Bioquímicos de San Francisco nuclea a 44 profesionales de la ciudad, Devoto y Colonia Marina. Este nuevo Día del Bioquímico los encuentra enfrentando serias dificultades por la crisis económica, la inflación y el valor del dólar. Sin embargo siguen adelante y la ciudad cuenta con laboratorios que hacen todo tipo de análisis y los de alta complejidad se derivan a laboratorios de Córdoba o Rosario.
El presidente del centro, Dante Ottero aseguró a LA VOZ DE SAN JUSTO que la situación es complicada "ya que tenemos insumos en dólares y en medio de la inflación, las obras sociales pagan a 45, 60, 90 o 120 días y entonces no hay rentabilidad".
"Siempre vamos para atrás y vemos que no mejora, no se puede trabajar a plazo con el nivel de inflación que tenemos. Cada vez hay más trabas y las obras sociales derivan trabajo administrativo a los bioquímicos y no se puede llegar con todo", advirtió.
Actualmente no hay laboratorios nuevos porque es muy costoso el equipamiento para armarlo, la mayoría de los bioquímicos trabajan en relación de dependencia, en laboratorios de clínicas y hospitales.
El centro convoca a capacitaciones constantes para estos profesionales. "Las capacitaciones se realizan de manera presencial en la ciudad de Córdoba y algunas son virtuales. Es fundamental la capacitación constante", remarcó Ottero.
Para celebrar el día, el centro organizó una cena que reunirá a los bioquímicos en actividad y los retirados, que se realizará hoy jueves en el Club Vélez Sársfield.