Básquet
González vuelve a San Isidro
El psicólogo deportivo, Sebastián González, se suma al staff de profesionales de la institución de calle Corrientes.
Su nombre vuelve a sonar en San Isidro porque se trata de un importante refuerzo para la estructura deportiva del club, claro, desde otra función, pero con la misma responsabilidad y compromiso que exhibió en su época de jugador de básquet.
Santiago González, el otrora potente pivot, desde ahora prestará sus servicios de psicólogo deportivo al plantel de la Liga Argentina, una tarea que luego se extenderá a las demás disciplinas de la institución “santa”.
En comunicación con LA VOZ DE SAN JUSTO, quien actualmente cumple funciones en el Centro de Alto Rendimiento Deportivo de Misiones, no pudo ocultar la felicidad que le originó trabajar en un lugar donde vivió momentos inolvidables y en el buscará desde su rol profesional, lograr el bienestar integral de la persona y un óptimo rendimiento deportivo.
“El contacto se dio a través de Francisco Martelotto quien me manifestó que había intensiones en el club de sumar alguien en esta área, entonces tuve un encuentro con Alejandro Aimaretti y Marquitos Basso, donde vimos de poder brindar el servicio de psicología a otros deportes no solo al básquet de Liga Argentina con el que empezaremos junto al cuerpo técnico”, contó.
“San Isidro es un lugar donde pasé momentos inolvidables como jugar una final por el ascenso y ser elegido el mejor jugador del torneo, hasta también haber sufrido una lesión que me marginó 9 meses, en los cuales hice la recuperación dentro del club trabajando de manera excelente con el preparador físico, Daniel Pérez, y Martín Berra que en su momento era el kinesiólogo”.
“Tengo un hijo que nació en San Francisco, demás está decir entonces que trabajar en un lugar en el cual me sentí muy a gusto, es algo que me pone muy feliz. La verdad que tengo las mejores sensaciones y ahora queda trabajar desde otra función, tomando el desafío con la mayor seriedad y profesionalismo que me caracteriza”, enfatizó.
Sobre la tarea a desarrollar y la forma entendiendo su actual lugar de residencia, manifestó: “Mi abordaje será clínico y deportivo en la búsqueda del bienestar integral de la persona, el jugador, mismo el entrenador, muchas veces se toma como que su vida es solamente eso, ser jugador de básquet, ser entrenador de básquet, pero atrás también hay relaciones, vínculos, amistades, relaciones de pareja, de familia, que también influyen a la hora del rendimiento deportivo”.
“Entonces no tomar en cuenta esto, es dejar por afuera algo que influye directamente después en el rendimiento”.
“La tarea se va a desarrollar en forma virtual, como se acordó en su momento, en razón de que actualmente vivo en Posadas, Misiones. Voy a realizar mi labor con espacios individuales, con cada uno de los integrantes del plantel sean mayores como juveniles, así también con quienes conforman el cuerpo técnico y también un espacio grupal con el plantel”, explicó.
Acerca del objetivo trazado en su desembarco en San Isidro, expresó: “El propósito es brindarle una herramienta a la institución, por la cual el jugador y entrenador puedan tener ese espacio para hablar de todas las dificultades que tengan y desde mi escucha profesional poder orientarlos, brindarles herramientas para que puedan ir trabajando esos aspectos, entendiendo también que esto forma parte de un proceso”.
“Repito, espero ser una herramienta en la búsqueda del bienestar integral de la persona, tanto en su rendimiento deportivo para optimizarlo y también en su vida personal”, cerró.