Galliano se despidió del vóley de El Tala
Romina Galliano se desvinculó del voleibol de El Tala, su entrañable club al que había regresado en 2019 para hacerse cargo de las categorías formativas luego de una extensa trayectoria como jugadora.
Romina Galliano se desvinculó del voleibol de El Tala, su entrañable club al que había regresado en 2019 para hacerse cargo de las categorías formativas luego de una extensa trayectoria como jugadora. La entrenadora se despidió con una sentida publicación en las redes sociales, la que a continuación reproducimos:
"Así, con los brazos, la mirada y la cabeza bien arriba me despido del vóley de El Tala".
"Lugar que me llenó de satisfacciones y me hizo crecer. Mi casa desde siempre.
Decidí dar un paso al costado del proyecto por varios motivos, que cuando sea pertinente los comunicaré y los haré saber, porque fueron cosas que no le hacen bien al deporte ni a ningún ser humano".
"Y después de haber atravesado dos cirugías el año pasado, decidí priorizar mi salud física y mental".
"Estoy absolutamente agradecida con la comisión directiva del club, en especial María Elena, porque entendieron y me acompañaron en esta decisión. Agradecida de por vida a las jugadoras y a mis colegas Tuca, Cami Gastaldi, Sofi Galotto, Sofi Miguel, Vale Suárez por haberme enseñado tanto".
"Lamento mucho irme así, sé que hay muchas personas que no tienen nada que ver con aquellas cosas que me fueron empujando para dejar. A esas personas, les pido perdón".
"Me voy como me fui siempre de cada lugar, más grande, más experimentada. Más crecida, y más convencida de quién soy".
"Ojalá algún día me vuelva el amor que le tenía al voley. En este tiempo, lo perdí. A veces las cosas feas, te van consumiendo las ganas, el amor, la pasión. Por momentos, siento que el vóley fue lo más lindo de mi vida, y en otros como ahora, que fue muy injusto. Igual, en el corazón siempre queda lo lindo".
"Para limpiar lo malo y lo que hizo doler, hay tiempo. Sólo hay que saber cuándo correrse y darle paso a quiénes estén al 100% para entregarse. Yo ya no lo estaba, ya no era quien el proyecto necesitaba que sea".
"Así que ahora, es tiempo de sanar. Seguiré siendo una colaboradora, pero esta vez desde afuera. Gracias por todo Tala de mi vida".