Flathead y la vuelta a las bases del rock and roll
Tres jóvenes barbudos le dan vida a las canciones de los '70, época en que se consagraron grandes bandas del género. Ese rock ya no vende para los que dirigen la industria musical pero su espíritu vive en nuestra ciudad.
Entre los '60 y '80 el rock fue transformándose como género. Separándose de la imagen de Elvis y la revolución que significó en sociedades tradicionales para acercarse más a lo moderno con grupos grandes de músicos que aparecían en el escenario y cambiaban la mente de todos.
Era una época donde todo se estaba por inventar. Las bandas ícono de esta década se formaron en los '60 pero "la rompieron" en los años siguientes y así con esta base no solo se consagraron ellas sino vertientes del rock que aun hoy disfrutamos como el punk o el heavy metal.
Sin embargo, todo lo que llega allá a la cumbre y hace delirar al mundo al final - conforme también pasó en otras áreas sociales - se comercializó y cuando "dejó de vender" simplemente fue dejándose de lado.
No hubo continuadores del ritmo que identificó al rock de los '70, o por lo menos hasta hace 4 años cuando en un rincón de San Francisco apareció Flathead para cambiar el destino de las cosas.
Ese tridente que componen Gabriel Alegre, Agustín Martínez y Sascha Petrović solo precisa de dos cosas: por un lado, el power del rock y por el otro, el gusto por tocar haciéndolo de forma profesional y como en las grandes ligas así no lo hagan en el Madison Square Garden.
La música que estos chicos hacen es la savia del rock, y de la industria comercial que lo rodea. Este género fue la piedra filosofal que marcó a generaciones enteras y que entre las grandes bandas que regaló se cuentan por ejemplo a Deep Purple, Led Zeppelin, Judas Priest, Rainbow.
A estos tres barbudos no les hace falta ropa de cuero, tampoco una cresta, ni ser totalmente darks, como en esas viejas épocas donde el rock and roll era incipiente pero potente.
Barbas y música
No hay semana en que Gabriel, Agustín y Sascha no se junten a tocar, o a ensayar. Los tres son la esencia de Flathead una banda que arrancó 'Gabi' en el año 2015.
¿Por qué Flathead? "Es el nombre de un motor de Harley Davidson, nos gustó - a los tres pioneros - y quedó como nombre de la banda", dice Alegre que es el sobreviviente de la primera hora porque el grupo como, agregó Agustín, "tiene más formaciones que Deep Purple".
Cuando Gabriel fue quedando solo llegó Agustín en 2017 y Sascha en 2018. "Igual, siempre fuimos tres en el canto y guitarra, bajista y baterista", aclararon.
Esos chistes son entendibles, los nombres de las bandas que escuchan no son casuales. Además de Deep Purple están Rainbow, Steppenwolf, Led Zeppelin o Judas Priest, entre otras. Muchas de ellas de origen británico pero todas consolidadas durante una misma época: en la década de 1970.
Ahí fue cuando el rock and roll hizo eclosión y sentó las bases para la transformación en distintos subgéneros que dominan el universo de la música interconectados solo por la palabra rock.
"En la ciudad no hay otra banda similar, a la gente de ahora no le gusta el rock de los '70. A veces estamos sacando un tema dificilísimo pero la gente ni lo conoce"
¡Qué viaje que supone nombrar solamente a aquellas bandas! Solo porque hoy ya nada es lo mismo. Sin embargo, estos chicos con sus barbas - que afirmaron "solo es casualidad que la compartan en su look" - hacen un culto a aquella época, no solo como fans sino como músicos que traen los acordes y las letras a esta época posmoderna.
"Nosotros coincidimos en que nos gusta el rock de los años '70, justo entre blues, rock and roll y los principios de heavy metal antes del cambio en la década de 1980. Eso sucede mucho en bandas de los '70 que tienen esta mezcla", explicaron a LA VOZ DE SAN JUSTO.
Rock vintage
La banda se formó de una manera particular. Al llegar Agustín ya tenían en Flathead temas propios, pero eso no impidió que "las cosas se arreglaran". Él algo de experiencia tenía porque había tocado en Pucará, tributo a Charly García desde los 15 años; distinto fue el caso de Sascha "al que le colgaron un bajo y se sumó para tocar".
Ninguno tiene "formación musical" pero sí tienen el hábito de juntarse todos los sábados a ensayar después de una semana de trabajo combinada con el estudio.
Cuando se juntan los tres ensayan una y otra vez hasta que los temas salen como si fueran interpretados por quienes los compusieron. Así se trate de Steppenwolf (1960), ZZ Top (1970), Judas Priest (1969) o si son canciones de la Argentina Vox Dei (1967), Manal (1968), El Reloj (1971) o Pappo's Blues (1970).
Es que en esa época la variedad era mucha, claro porque todo estaba por desarrollarse y daba la sensación de que había espacio e industria para todos. Ahora, en cambio, el panorama es otro porque "algunas bandas parece que sonaran todas iguales", salvo, en nuestra ciudad con Flathead.
La banda local es única y ellos lo saben. "En la ciudad no hay otra banda similar, a la gente de ahora no le gusta el rock de los '70. A veces estamos sacando un tema dificilísimo pero la gente ni lo conoce. Nos pasó de un hombre que nos miraba, y le tocamos el corazón cuando escuchó la interpretación de un tema de Led Zeppelin. A mi edad - dijo Gabriel que tiene 22 años - no conocen mucho estas bandas, ni les gusta".
No pasan de moda
Los géneros dentro del mundo del rock siempre convivieron, por eso "nunca va a morir esta música, siempre hay alguien al que le va a gustar".
Su público y quienes escuchan a Flathead piensan lo mismo. El rock que tocan es diferente, quizá para muchos que no son fanáticos resulta "más aceptable", y además lo hacen de una forma particular: "Nosotros tocamos de corazón y porque nos gusta".
Hay cosas que hacen los shows de la banda especiales, diferentes y hasta auténticos. Ellos tocan "a la vieja usanza" interpretando no solo canciones sino un estilo y forma de conducirse en el escenario.
"La gente que a lo mejor no les gusta el rock, pero solo va a ver con nosotros siempre la pasa bien porque lo que tiene la banda es que vamos al choque, tenemos un cierto virtuosismo al tocar que llama la atención", indicaron.
Por eso, no es raro que "haya un solo de batería en cualquier momento" dado que en esa época se usaban, incluso en las grabaciones de estudio. Eso, otras bandas no lo hacen". Lo mismo pasa con sus ensayos donde "no hay auriculares ni cosas tan técnicas como ahora", como en esa época.
No hay muchas bandas como Flathead porque hace rato que la forma de tocar como en los '70 pasó de moda. No obstante, este tridente sostuvo que "el rock no morirá ni porque ya no lo pasen por la radio o porque no se pueda vender como antes".
El que no sea vendible, no es impedimento para que haya grupos que mantengan vivo el espíritu de esta época, y están tan arraigados a ese movimiento que "no saben dónde está la moda actualmente, cuáles son las bandas más mencionadas".
Gracias a músicos como los tres barbudos de Flathead el rock and roll sigue existiendo, porque "bandas nuevas siempre hubo, lo que cambió fue el foco".