Estado local y seguridad
Si está fuera de debate la necesidad de crear el Cuerpo de Prevención Urbana, el interrogante que puede surgir ronda en torno a si el municipio agota su intervención en materia de seguridad con la instalación del centro de monitoreo y la puesta en marcha de la fuerza de prevención.
El municipio informó que ya está abierta la convocatoria para los aspirantes a formar parte del cuerpo municipal de prevención y seguridad que anunció el intendente en su último mensaje de apertura de sesiones del Concejo Deliberante. El jefe comunal ha sostenido al respecto que "el Cuerpo de Prevención Urbana será un órgano que va a trabajar sobre la prevención, prestando colaboración con quienes tienen a su cargo la responsabilidad de la prevención, persecución y sanción del delito, que tiene que ver con la Policía de la Provincia de Córdoba, el Ministerio Público Fiscal y el Poder Judicial".
"El objetivo es poder trabajar de manera conjunta con la policía de la provincia en tareas de prevención ya que el uso de la fuerza legal en todo lo que tiene que ver con la seguridad preventiva es facultad de la policía de Córdoba. Pero en una ciudad que en los últimos años ha duplicado su ejido urbano, que tiene 8.500 hectáreas de superficie, resulta necesario incorporar más recursos humanos para que la gente pueda vivir con mayor tranquilidad", agregó el intendente, dando precisiones acerca del funcionamiento previsto para esta guardia que será toda una novedad para San Francisco.
El anuncio se inscribe en una concepción moderna del Estado local, cuya competencia en materia de seguridad urbana hoy ya no se discute. Es más, uno de los precandidatos de la principal fuerza de la oposición ha lanzado también una propuesta similar que es posible que procure una diferenciación de la idea que hoy se maneja en el municipio. Estamos en tiempos de campaña proselitista, sin embargo, los conceptos centrales de ambas iniciativas se sustentan en el mismo principio. Que no es otro que el que establece que los Estados locales deben desarrollar estrategias de prevención del delito y del control de la criminalidad en su ámbito de competencia. La discusión pasaría, entonces, por los detalles de su implementación o las características del accionar que tendría la guardia urbana.
Si está fuera de debate la necesidad de crear un cuerpo de estas características, el interrogante que puede surgir ronda en torno a si el municipio agota su intervención en materia de seguridad con la instalación del centro de monitoreo y la puesta en marcha de la fuerza de prevención. Es posible que el avance que significan estas medidas para devolver la tranquilidad a los habitantes de la ciudad deba ser reforzado con otras acciones. La experiencia en esta materia advierte que los municipios son entes calificados para recopilar información relevante. Por ejemplo, la creación de Observatorios que sistematicen la producción y analicen los fenómenos vinculados con la seguridad ciudadana complementaría el trabajo y otorgaría evidencias que permitirían la acción en el terreno, otorgando coherencia y superando la tentación de improvisar sobre la marcha.
Son claras las normas que establecen las funciones de los distintos niveles del Estado y las cuestiones referidas a las competencias. No obstante, el municipio es, en la actualidad, un actor indispensable en el diseño y concreción de las políticas referidas a la seguridad. Coordinar e integrar a todas las jurisdicciones y cuerpos que trabajan en seguridad, así como recopilar la información indispensable para diseñar políticas específicas para la ciudad son roles indispensables de la municipalidad, necesarias para garantizar el éxito de las medidas puestas en marcha.