“Esperamos volver a producir para exportación la próxima semana”
Alejandro Roasso, director general de ZF Argentina, habló del fuerte impacto que tuvo la pandemia en la industria automotriz. La planta de nuestra ciudad está paralizada desde el inicio de la cuarentena y se presentó un procedimiento preventivo de crisis. Sin embargo, con la posibilidad de que el Estado aporte para pagar sueldos y de volver a producir pronto por ser actividad exportadora, esperan una pronta reanudación para atenuar los efectos que de todas maneras serán importantes en el balance anual.
Si bien la planta de ZF Argentina de nuestra ciudad está paralizada hace más de un mes, el director Alejandro Roasso sigue de cerca las últimas novedades mientras se preparan las medidas de higiene y prevención para un eventual regreso a la actividad. En las últimas horas se supo que ante la decisión del Gobierno Nacional de aportar para que las empresas del sector privado puedan pagar los sueldos a pesar del parate, las negociaciones entre cámaras y sindicatos para implementar suspensiones quedaron en stand by. Además, se espera que se reglamente la autorización para volver a trabajar a las actividades exportadoras como la que lleva adelante la firma local.
En ese sentido, Roasso es optimista en cuanto a volver a producir la próxima semana para el mercado alemán y así volver gradualmente a la normalidad aunque aclara que la industria automotriz saldrá muy mal parada de esta crisis global.
"En nuestro caso el problema se debe exclusivamente a la pandemia. Hasta antes de esto la situación venía bastante bien. Pero el efecto de la pandemia en el sector automotriz ha sido terrible. La realidad es que en Argentina desde el 20 de marzo no se produce un solo auto y las terminales posponen cada vez más el regreso a la actividad. Algunos clientes van a arrancar recién en la segunda quincena de mayo y otros directamente en junio", explicó el director de la firma.
Asimismo añadió que "por otro lado, las terminales de Brasil están en una situación similar. Si bien no tienen cuarentena total, la mayoría de ellas han parado y van postergando el regreso semana a semana. Entonces tampoco en Brasil vendemos un solo amortiguador. Además, el mercado de reposición de Argentina -al estar los negocios cerrados y al haber poca circulación- está prácticamente parado".
La única posibilidad que tendrían ahora para volver a producir es el mercado alemán. "Nos queda solamente una pequeña parte de lo que exportamos a Alemania. Si bien ahí la cantidad es reducida, tenemos algo de demanda.", explicó.
"Nosotros hace más de un mes que estamos totalmente parados en producción y sin poder despachar. Solo estamos trabajando home office la parte administrativa. Entonces la situación es muy complicada", agregó.
La planta lleva más de un mes sin producción, pero con la posibilidad de volver a la actividad para exportar
Atenuar los efectos
Roasso explicó que en un panorama tan incierto como es el que planteó la aparición del coronavirus en todo el mundo, lo que se intenta es "estirar" todo lo posible los recursos financieros de las empresas.
"En este tipo de crisis entendemos que la clave pasa por no perder la capacidad financiera. El dinero existente es limitado y al pasar más de un mes con 0 ingresos tenemos un panorama futuro bastante incierto en el que en el mejor de los casos podremos producir un 60 o 70% de lo que estaba planeado para el año", comentó.
En cuanto a ello explicó: "Estamos reduciendo los gastos lo más que podemos, en materiales, en costos indirectos. Y con la planta totalmente parada lo que pasa a ser un costo fijo es el personal. Entonces, para tratar de ver cómo podemos tener un impacto menor hemos presentado un procedimiento preventivo para avanzar con alguna posibilidad de suspensión".
El director de la empresa comentó que se llevan a cabo negociaciones entre cámaras y sindicatos, pero que la intervención del Gobierno abriría una alternativa.
"Esto estaba siendo negociado a nivel nacional, pero en las últimas horas llegó un informe de las cámaras empresarias que, ante la noticia de que el Gobierno pagaría parte de los salarios, se han frenado todas las negociaciones hasta tener un poco más de claridad. Por ahora hay un gran marco de incertidumbre. Nosotros tenemos este procedimiento presentado por si no prospera esto del Gobierno. Inicialmente estábamos excluidos porque era para empresas de hasta 100 empleados", indicó.
De todas maneras fue tajante al señalar: "Si no surgiera ese aporte vamos a tener que hacer sí o sí algún tipo de suspensión con la menor afectación posible al bolsillo de la gente, pero que nos permita al ser no remunerativo tener un ahorro bastante importante en cargas sociales. Si esto se alarga, el riesgo más grande que tienen las empresas es quedar sin fondo y pasar a ser financieramente inviables".
La empresa pagó los sueldos de marzo normalmente más allá de que tuvo alrededor de 10 menos de producción. También pagó la primera quincena de abril sin tener actividad y en los próximos días deberá abonar la segunda.
"Esto no es sustentable en el largo plazo. Por eso estamos tratando de hacer que el dinero dure el mayor tiempo posible", consideró.
Un panorama incierto
Más allá de un eventual regreso a la actividad en los próximos días, Roasso dijo que nada volverá a la normalidad una vez que se levante la cuarentena. "El sector automotriz va a quedar muy golpeado. El ícono productivo del sector automotriz en la Argentina en los últimos años es Toyota. Ni aún en los peores momentos había bajado la producción cuando todas las otras terminales sí lo hacían. Ahora se está hablando que en el mejor de los casos, cuando vuelvan a producir, lo van a hacer al 50% hasta septiembre u octubre", ejemplificó.
"El mercado prácticamente desapareció. Es un problema nunca visto antes".
Ante la existencia de un DNU que prohíbe despidos o suspensiones, Roasso consideró que "cualquier atención cae ante la realidad: cuando no hay más plata, no hay más. Ahora, si se confirma este aporte del Estado obviamente cambia todo el panorama. Pero hay que ser cuidadoso porque en estos paquetes de medidas hay algunas que no se están concretando en los hechos".
En la planta ya se instalaron cabinas de desinfección
Esperando
el regreso
"Nosotros lo que esperamos es volver a producir la semana que viene al 50 o 55% de lo que lo veníamos haciendo exclusivamente para exportar a Alemania. Pero aun no fue definido el procedimiento para esa autorización. Estamos tratando de conseguir la información para saber cómo obtener la excepción oficial y volver el lunes", expresó.
En cuanto a ello acotó que "en casos de empresas más chicas es más fácil y creo que hasta con una autorización verbal de la municipalidad pueden volver. Pero en nuestro caso no tenemos esa posibilidad, debemos contar con todo en regla".
Sobre las medidas de higiene y prevención comentó que están bien preparados para el regreso: "Desde antes que se dicte la cuarentena venimos trabajando en ese sentido. Tenemos un protocolo que se lo estamos haciendo llegar a todo el personal que incluye declaración jurada, elementos para tomar la temperatura tanto a nuestros empleados como a quienes vienen de afuera. Habrá control a los transportistas, distancias seguras, tenemos cabinas desinfectantes que instalamos hoy y toda una batería de medidas para priorizar la salud, que es lo más importante".