En el país de la cerveza proponen pasar un mes sin tomar alcohol para prevenir su consumo problemático
La Fundación contra el Cáncer de Bélgica lanzó una exitosa campaña de abstinencia para eliminar el consumo excesivo de alcohol.
La Fundación contra el Cáncer de Bélgica, país en el que 200 fábricas producen unos 1.500 tipos de cerveza, lanzó durante febrero una exitosa campaña de abstinencia para eliminar el consumo excesivo de alcohol y prevenir sus riesgos sanitarios asociados.
"Son sólo 28 días. Siempre es bueno, porque es más fácil para todo el mundo", explicó a Efe Mathijs Goossens, uno de los médicos que impulsó la iniciativa con la que esperaban seducir a unos 15.000 participantes y que roza ya los 128.000 adscritos.
Aunque "no hay ninguna justificación médica para beber alcohol", comentó el doctor, la campaña "no pretende alcanzar el cero absoluto" de consumo alcohólico en un país que hace bandera de su maestría cervecera, tanto que el pasado noviembre logró que la Unesco inscribiera en su lista de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad los más de siete siglos de tradición belga en el preparado de cebada fermentada, agua y lúpulo.
"No queremos crear una población que no beba alcohol. No hay necesidad. Sólo queremos eliminar el consumo automático", explicó el doctor, quien indicó que los expertos recomiendan no superar las "dos consumiciones de alcohol por día para los hombres y una para mujeres", representando cada una 12,5 mililitros de alcohol puro por trago.
El alcohol, prosiguió, "es una de las cinco primeras causas de cáncer entre la población y limitar su consumo aporta ventajas automáticas, aunque su efecto se perciba a largo plazo".
"Es completamente proporcional: 50 por ciento menos de alcohol, 50 por ciento menos de riesgo" de cáncer, resumió Goossens, quien subrayó que "si fumás el riesgo es mayor porque se produce una sinergia multiplicadora", de forma que "3+3 no son 6, sino 9", cuando se combinan alcohol y cigarrillos.
La operación, inspirada en campañas similares ensayadas en Estados Unidos o el Reino Unido, también intenta sensibilizar sobre otras ventajas asociadas a la moderación en el consumo alcohólico, como la mejoría en calidad del sueño, la reducción de la sequedad de la piel y, de manera más evidente, el ahorro económico y calórico.
Las estadísticas sitúan a Bélgica en la media respecto a lo que beben sus vecinos europeos, si bien la Organización Mundial de la Salud explicaba en un informe publicado en 2012 que "el actual volumen de consumo de alcohol en la Unión Europea (UE) se mantuvo estable durante varios años en un nivel muy alto que todavía es más del doble del nivel global".
Así, un belga tipo, extrapolable a la mayoría de países de la UE, bebe "entre nueve y once litros de alcohol puro al año", graficó Goossens.