El vidrio y sus aportes para garantizar la mejor eficiencia energética en la construcción

Desde Reinaudi Vidrios brindaron consejos para hacer que una vivienda sea térmicamente eficiente ya que se estima que las ventanas representan el 20 % aproximadamente de las pérdidas de energía lo que obliga a aumentar el consumo de calefacción o del aire acondicionado.
Matías Reinaudi (*)
Luciana Martino (*) (*)
El cambio climático es un tema moviliza a todo el mundo. La Argentina integra el grupo de países que acordaron objetivos y estrategias para ir reduciendo de a poco el consumo energético y la producción de gases contaminantes. Las actividades industriales, las agrícola-ganaderas y la construcción, tienen un fuerte impacto y compromiso con el consumo energético.
A través de la arquitectura existen innumerables alternativas para mejorar la calidad ambiental con menores recursos energéticos, optimizando de éste modo el comportamiento térmico de las viviendas, para minimizar el consumo de gas y energía eléctrica.
En este contexto para lograr que una vivienda sea térmicamente eficiente, es necesario que el proyectista establezca prioridades en la etapa del diseño y muy especialmente al momento de proyectar las aberturas.
Se estima que las ventanas representan el 20 % aproximadamente de las pérdidas de energía de una vivienda, esto quiere decir que los usuarios deben aumentar el consumo de calefacción y refrigeración para alcanzar los niveles de confort aceptable. En este punto es de fundamental importancia que se tenga en cuenta en el diseño las orientaciones, para garantizar un buen asoleamiento y ventilación cruzada, además de la protección a través de los dispositivos de oscurecimiento, como son los postigos, cortinas de enrollar y cortinas interiores, toldos y otros como pérgolas o parasoles.
Además de todo lo mencionado anteriormente la incorporación de los DVH (Doble Vidriado Hermético) garantiza una notable disminución en los costos de los servicios energéticos. Es una inversión a largo plazo para el usuario y para el planeta. Existen múltiples opciones a la hora de elegir un DVH en relación a los requerimientos de la abertura a intervenir, porque además de poseer una cámara de aire que garantiza la aislación térmica y acústica, dan respuesta a otras exigencias como la seguridad de las personas y de los bienes, el control del deslumbramiento y el exceso de calor solar. El desafío es saber elegir los vidrios que componen este doble o triple vidriado hermético.
Ahora bien, si el proyecto define la ubicación de ventanas en orientaciones que reciben radiación solar directa permanente durante el verano, es fundamental la utilización de vidrios de control solar como parte del DVH. Dentro de las opciones de vidrios de control solar existen los de color, como por ejemplo gris, verde, bronce, azul, y los vidrios reflectivos con diferentes niveles de reflexión, llegando a verse incluso como espejos desde el exterior. La elección dependerá del nivel de control de radiación que se pretende (mientras más bajo el coeficiente de factor solar del vidrio, más ahorro de energía en refrigeración), de la estética buscada (color y nivel de reflexión) y del nivel de iluminación natural adecuado para cada tipo de ambiente, por ejemplo, un living requiere menor nivel de intensidad lumínica que una cocina.
Si bien la aislación térmica que brinda un DVH estándar reduce a la mitad las pérdidas y ganancias de calor comparado con un vidrio simple, existen opciones para aumentar esta brecha y lograr un mayor ahorro energético. Podemos encontrar en el mercado vidrios que incorporan un revestimiento o coating de baja emisividad LowE en una de sus caras, que filtra el paso de calor de longitud de onda larga. Esto que parece muy complicado es en realidad sencillo: evita que el calor de los sistemas de calefacción se pierda a través del vidrio. Adicionalmente, filtra el calor que emite la Tierra al calentarse por el sol. Todo esto lo hace una excelente alternativa para lograr una gran aislación térmica. Pero si tenemos la posibilidad de ir un paso más allá, podemos elegir triple vidriado hermético con vidrios de baja emisividad, logrando una excelente aislación térmica, como la de los sistemas de muro compuestos.