El tango: la danza de los abrazos se fortalecerá tras la pandemia
El dos por cuatro todavía debe esperar para volver. Para José Bollea, estos tiempos de coronavirus revalorizarán el baile típico que nació a orillas del Río de la Plata.
Por Stefanía Musso | LVSJ
José Bollea (45) camina por todo el salón de ensayos de la Dirección de Cultura del municipio. Le vuelve a sacar brillo a los acordonados bien lustrados y se acomoda el impoluto traje. Hace 100 días que esos zapatos y pilchas estaban esperándolo para volver a la pista.
Pero José está solo en la pista porque el tango no es como otras disciplinas que ya volvieron en pandemia como es el caso de la danza clásica. Por su cercanía, sensualidad y contacto físico, seguramente este baile típico del Río de la Plata sea uno de los últimos en regresar.
El profesor de Tango de la Municipalidad de San Francisco tiene la suerte de que su esposa Soraya es también su compañera de baile y juntos, pueden recrear una milonga en el living de su casa. Pero nada más. Este año no pudo comenzar el dictado de clases en el salón y unas 45 parejas deberán esperar hasta que pase la pandemia. "Probablemente el tango no vuelta este año y no sabemos cuándo volveremos a bailar", dijo con nostalgia José.
"Las danzas individuales permiten que se baile con distancia y te diría que hasta en el folclore se puede pero en el tango, eso es imposible. El tango en su esencia es la danza de los abrazos y del cuerpo a cuerpo".
El profesor sostiene que tras la pandemia la gente se volcará a la práctica de esta danza.
Tango "sin contacto"
Según Bollea, hay algunas versiones de la danza que se expresan de manera individual como son la española y árabe. Sin embargo, poco tienen que ver estos estilos con el que nació en la Buenos Aires de fines del 1800. "El tango que el mundo conoce lejos está de ser individual. El que enamoró a cada punto del planeta es el del abrazo cerrado, el que está lleno de sensualidad y toda esa pasión no se vería si se baila separados".
"El tango se podría hacer desde otras miradas, pero el rioplatense dista mucho de la individualidad. Tiene que ser sí o sí abrazados porque el tango es pasión en todo sentido; en la danza del contacto del cuerpo y la mirada".
Revalorizar el 2 x 4
Sin danza ni posibilidades de poder practicarlo en un salón de baile, el tango parece ser de esas costumbres argentinas que extrañamos tanto como el mate con amigos. Porque sin darnos cuenta, es parte de nuestro ADN aunque no lo bailemos como al cuarteto y la cumbia.
Con esa nostalgia, José reflexionó cómo será el tango post-pandemia. "El día que podamos volver a bailar, vamos a revalorizar la danza porque las ansias de volver a una pista o a vestirnos como tangueros le va a ganar a la pandemia. Hay ganas de volver a un piso de madera, a una noche milonguera, a los abrazos del tango".
"El tango es parte de nosotros. Es la vidriera que usaron muchos bailarines para salir al mundo y el mundo nos mira. Cuando vuelva todo a la normalidad, el tango va a ser furor".
José Bollea espera volver pronto a bailar el tango de salón
Sin clases
Este año como los anteriores, la convocatoria para las clases de tango de adultos y mayos colmaba las expectativas del profesor Bollea. Sin embargo, la pandemia solo dejó que 45 parejas lograran anotarse y el aislamiento impidió el comienzo del taller. "Abrimos las inscripciones y al poco tiempo se cerró todo. El tango es una de las actividades más buscadas y se anota mucha gente que merma durante la cursada pero son muchos los que quieren aprender a bailarlo".
"Soy un bailarín de folclore adoptado por el tango. Bailo desde que tengo uso de razón pero el tango empecé a bailarlo en 1988 en el Ballet La Docta y desde entonces no dejé. Extraño mucho bailarlo, usar los zapatos brillosos y escuchar esa música".
José siente el tango en cada parte de su cuerpo, lo refleja en sus ojos. Ahora solo queda esperar que puedan volver esos abrazos para sacarle virutas al piso.
La milonga se disfruta por You Tube
Nathalia Carballo y Lucas Fenoglio apostaron a la milonga en San Francisco desde la pasión de ella como docente de la Escuela Municipal de Danzas y el un técnico electromecánico que además trabaja como DJ.
El 8 de marzo, el espacio tanquero "Pero la última de La Morocha" tuvo su última jornada en nuestra ciudad. Hoy, la pareja se reinventó a través de You Tube proponiendo sábados de tango virtual, donde el DJ Fenoglio pasa música e invita a la danza en casa así como artistas y cantantes del género. "El formato virtual fue idea de Lucas y fue tomando forma hasta que todos los sábados de 20 a 21.30 implementamos nuestro canal de You Tube La Morocha donde se fueron sumando artistas".
"A la gente le gusta mucho esta forma de llevar la milonga a la casa. Lo interesante es que trascendió la ciudad y se disfruta en todo el país y en el exterior. No tenemos el contacto humano, pero sí el virtual y que es igual de reconfortante", concluyó Carballo.