El sello Merlino, un clásico que enaltece la artesanía local
El luthier, creador de las guitarras de las voces más famosas del cancionero nacional, participó junto a su hijo Alberto, también artesano, de la Feria Nacional de Artesanías que permanecerá abierta hasta las 23 de hoy en el Superdomo.
El reconocido lutier Aldo Merlino y su "heredero", Alberto José, pasaron por la 9ª Feria Nacional de Artesanías, Manualidades y Diseño, que se desarrolla con éxito en el Superdomo de nuestra ciudad, donde permanecerá abierta hasta las 23 de hoy.
La presencia de Aldo siempre dota de calidad a una muestra, a las que concurre aun habiéndose retirado de la labor como luthier en 2016, aunque no de la pasión por ese arte que cultivó durante 70 años. Desde hace 40, la elaboración artesanal de cabos de cuchillo, es otra de sus obsesiones artísticas.
"Esta ha sido una de las ediciones que más gente ha reunido para visitar las creaciones de los artesanos y expositores", destacó Merlino sobre la feria que este año reunió a más de 180 artesanos de San Francisco y otras partes del país.
"Me sigue gustando mucho la actividad -argumentó-. De todas maneras, aquí estuve para acompañar a mi hijo Alberto José que continúa con mi legado y junto a él tengo a mi nieto que se dedica a elaborar guitarras eléctricas".
Además, "estos eventos permiten reencontrarse con la gente". Tampoco pude dejar de ir a su taller de calle Libertad al 800: "todas las mañanas paso y me quedo por algunas horas haciendo las empuñadura de cuchillos".
"Siempre trato de traer cosas nuevas. Además del oficio de lutería, que ahora lo sigue mi hijo, luego de que yo transitara durante 70 años en trabajo de la madera, me dedico desde hace 40 años a la elaboración de cabos de cuchillos para coleccionistas", comentó el artesano a LA VOZ DE SAN JUSTO.
Entre sus últimas exposiciones, Merlino fuer parte, junto a un grupo de artesanos de la Asociación San Francisco de Artesanos (Asfa) de la Exposición Internacional de Artesanías en Feriar en Córdoba "donde estuvimos junto a 1.100 artesanos provenientes de 25 países. En esos lugares se ven cosas distintas, con una fiscalización muy importante y con una calidad notoria".
Los instrumentos de Alberto Merlino atraen a los visitantes de la muestra
El elegido de los más
renombrados solistas
Merlino recordó que en un momento de su carrera "junto a mis hermanos, cuñados y amigos hicimos más de 20.000 guitarras con Optima. Luego me tuve que retirar de la empresa cuando empezaron a venir Los Chalchaleros y los Fronterizos y a partir de allí muchos más a pedirme guitarras. El trabajo que me pedían era muy distinto a la producción en serie, porque se requiere de la tarea artesanal y de esa manera nunca más trabajé con negocios sino que trataba directamente con los artistas".
Las últimas y las primeras guitarras
Tras haberse alejado de la elaboración de guitarras, Merlino explicó que "aún me quedan las dos o tres últimas que hice que tengo disponibles. El Chaqueño Palavecino me había encargado una y también Jorge Rojas, que estuvo hace algunos días en el taller visitándome".
El artista oriundo de Miramar tiene hoy 86 años y afirma sin vacilar: "Toda la vida hice lo que me gusta, a la primera guitarra la terminé cuando tenía 19 años, en 1949. Me acuerdo que un amigo me había prestado una guitarra suya para sacar las dimensiones y el contorno, y así la pude terminar. Nunca tuve maestro, seguí el camino autodidacta".
Con el paso de los años, los artistas famosos con 'las Merlino' en sus manos se multiplicarían: Los Chalchaleros, Los Cantores del Alba, Jorge Cafrune, el Chaqueño Palavecino, León Gieco y muchos más tuvieron el lujo de ejecutar tan valiosa artesanía.
También sus instrumentos atravesaron fronteras, serían adquiridos en Francia, Italia, Bélgica, Portugal, México, Estados Unidos y otros países.
De su modesto taller saldrían también laudes de modelos árabes, arpas indias, requintos, rebeles, charangos, violines y violonchelos.