El fiscal de la causa dijo que el secuestro de 84 kilos de cocacína de un avión fue "fortuito"
Quien está a cargo de la investigación por el hallazgo de esa cantidad de droga en una aeronave de KLM Cargo dijo que no había una investigación previa sino que la requisa exhaustiva se dio porque se detectaron anomalías.
El fiscal a cargo de la investigación por la que fueron secuestrados al menos 84 kilos de cocaína en un avión de carga en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza dijo esta noche que se trató de un operativo "totalmente fortuito" ya que "no existía una investigación previa".
Emilio Guerberoff, fiscal en lo Penal Económico 2, se refirió al éxito del procedimiento y aseguró al canal TN que "se trató de un caso totalmente fortuito", en el que intervino personal de narcotráfico del Aeropuerto de Ezeiza "que detectó una anomalía que dio pie a que realicen un control más exhaustivo sobre esa aeronave".
También afirmó que no existía "una investigación previa en relación a este cargamento" y que los pasajeros que viajaban en el avión de la empresa KLM Cargo "eran veterinarios y cuidadores de los caballos de polo", que era la carga consolidada, y que "en principio" no están vinculados a la causa.
Guerberoff señaló que la droga "se detectó atrás de unos pallets de una maquinaria", cuyo destino final era Viena, capital de Austria, a la que llegaría por tierra luego de arribar a la ciudad holandesa de Amsterdam.
"Estamos en contacto con las autoridades holandesas que han ofrecido todo su apoyo para el esclarecimiento de la maniobra", aseveró el fiscal, y agregó que ninguno de los siete detenidos tienen antecedentes penales y que una persona se encuentra prófuga.
Emilio Guerberoff, fiscal en lo Penal Económico 2, se refirió al éxito del procedimiento y aseguró al canal TN que "se trató de un caso totalmente fortuito", en el que intervino personal de narcotráfico del Aeropuerto de Ezeiza "que detectó una anomalía que dio pie a que realicen un control más exhaustivo sobre esa aeronave".
También afirmó que no existía "una investigación previa en relación a este cargamento" y que los pasajeros que viajaban en el avión de la empresa KLM Cargo "eran veterinarios y cuidadores de los caballos de polo", que era la carga consolidada, y que "en principio" no están vinculados a la causa.
Guerberoff señaló que la droga "se detectó atrás de unos pallets de una maquinaria", cuyo destino final era Viena, capital de Austria, a la que llegaría por tierra luego de arribar a la ciudad holandesa de Amsterdam.
"Estamos en contacto con las autoridades holandesas que han ofrecido todo su apoyo para el esclarecimiento de la maniobra", aseveró el fiscal, y agregó que ninguno de los siete detenidos tienen antecedentes penales y que una persona se encuentra prófuga.