Nutrición
El desafío de lograr diversidad y calidad en la dieta infantil
En la Argentina, 6 de cada 10 niños tienen una alimentación poco diversa. Ante esto, se plantea el desafío de educar y concientizar para un desarrollo saludable de los chicos. La licenciada en Nutrición Florencia Baravalle brindó recomendaciones.
Por Isabel Fernández | LVSJ
Una alimentación equilibrada y sana durante la etapa crucial de la infancia desempeña un papel fundamental para garantizar un crecimiento y desarrollo óptimos. Por eso es clave prestar atención a qué alimentos se les ofrece a los más chicos y cómo se puede contribuir a la construcción de hábitos saludables que los acompañen durante toda la vida.
Una investigación realizada por el Centro de Estudios sobre Política y Economía de la Alimentación, determinó que 6 de cada 10 niños en Argentina llevan dietas poco diversas.
Para un crecimiento saludable, es importante concientizar sobre la importancia de educar a los chicos en una nutrición equilibrada. LA VOZ DE SAN JUSTO analizó este importante tema junto a la licenciada en Nutrición, Florencia Baravalle quien se refirió a la influencia de la alimentación familiar y el entorno en la formación de hábitos saludables. “La familia actúa como el principal modelo a seguir: los niños tienden a imitar las elecciones alimentarias. Los problemas nutricionales más prevalentes en el país son el retraso crónico del crecimiento, deficiencias de micro nutrientes y obesidad”, remarcó.
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- ¿Cómo influye la alimentación familiar y el entorno en los hábitos alimentarios de los niños?
La familia actúa como el principal modelo a seguir: los niños tienden a imitar las elecciones alimentarias. Comer juntos en familia, la disponibilidad de alimentos saludables en casa y la forma en que se presentan los alimentos influyen directamente en sus preferencias y actitudes. La influencia de amigos, la publicidad de los alimentos y el acceso a opciones saludables en la escuela sobre la alimentación pueden moldear los hábitos. Un entorno que promueve opciones saludables y una actitud positiva hacia la alimentación variada fomenta mejores decisiones en los niños.
- ¿Cuáles son los nutrientes esenciales que no pueden faltar en la dieta de un niño y por qué?
En cuanto a los micronutrientes:
• El calcio para el desarrollo muscular, esquelético y endocrino. Lo encontramos en los lácteos, verduras verdes, semillas como el sésamo.
• El hierro que transporta el oxígeno en la sangre. Está en carnes, verduras verdes, legumbres.
• El zinc para el crecimiento y maduración sexual. Lo hallamos en carnes, legumbres, huevos, frutos secos, semillas, cereales integrales.
• Vitaminas especialmente A, C, D, E, K y el complejo B. Están en frutas, verduras, cereales y lácteos fortificados.
En cuanto a los macronutrientes:
• Las proteínas necesarias para el crecimiento y reparación de los tejidos, las encontramos en carnes magras, huevos, lácteos, legumbres y frutos secos.
• Los hidratos de carbono, principal fuente de energía. Presentes en granos integrales, frutas, verduras y legumbres.
• Las grasas saludables que se obtienen de pescados, palta, frutos secos, semillas y aceites vegetales.
- ¿Qué impacto tienen las nuevas tendencias, como los alimentos orgánicos o los probióticos, en la salud infantil?
El consumo de alimentos orgánicos puede mejorar el desarrollo cognitivo y reducir la exposición a pesticidas disminuyendo el riesgo de alergias y trastornos hormonales. Estos alimentos contienen niveles más altos de nutrientes, fortaleciendo el sistema inmunológico. Incorporar probióticos y prebióticos, favorecen la salud digestiva y el equilibrio de la microbiota intestinal contribuyendo al bienestar general. La leche materna contiene probióticos promoviendo el crecimiento de bacterias saludables en el intestino. También hay fórmulas que incluyen probióticos para ayudar a desarrollar la microbiota del bebé. Una dieta de alimentos saludables y sin procesar como frutas, verduras frescas y yogur, ayuda a prevenir infecciones gastrointestinales, mejorar la absorción de nutrientes, reducir los síntomas de alergias y fortalecer el sistema inmunitario.
¿Qué hacer si un niño rechaza frutas y verduras?
Algunos consejos son:
• Incluirlos en las compras ya sea en la verdulería, supermercados; para que observen diferentes colores, texturas y así despertar su curiosidad.
• Que participen de la elaboración de las comidas.
• Crear platos divertidos como caritas o figuras con las frutas y verduras para que sean más atractivos visualmente.
• Crear una huerta en casa y que ellos sean partícipes del crecimiento de las plantas.
• “Camuflar” en las comidas que a ellos les guste, como en salsas, licuados, tortas, tartas, galletitas, hamburguesas, albóndigas, entre otras.
• Ser un buen ejemplo porque los niños imitan lo que ven.
- Ofrecer porciones pequeñas y repetir la oferta en diferentes ocasiones sin forzar, ni utilizar los alimentos como castigo ni como premio.