El “Che”, San Francisco y su primer viaje latinoamericano
En algunos sitios y reseñas se indica que San Francisco, Córdoba, fue el punto de partida Ernesto "Che" Guevara en su primer viaje latinoamericano, el viaje en que empezó a descubrir su espíritu revolucionario. ¿Realidad, mito o simple error? "Historias extraordinarias de San Justo". Capítulo 1: El Che y San Francisco.
Por Manuel Montali | LVSJ
La referencia figura en sitios como Wikipedia y otros portales que se apoyan uno al otro como fuentes de información: "En 1952, Ernesto Guevara realizó con Alberto Granado el primero de sus dos viajes internacionales por América. Salieron el 4 de enero de 1952, desde San Francisco, Córdoba, en la moto de Granado, llamada 'La Poderosa II'".
Sin embargo, no persiste ninguna referencia en la ciudad sobre una circunstancia histórica tan trascendente como el haber sido punto de partida del viaje iniciático del "Che" por Latinoamérica, ese viaje en el que empezó a descubrir la América profunda, recorriendo las rutas de nuestro país pero también Chile (donde quedó la moto), Perú, Colombia, Venezuela, internándose en minas y leprosarios, e interactuando con poblaciones aborígenes y marginales. Esta experiencia resultaría sumamente transformadora para Guevara, por entonces estudiante de medicina, y lo terminaría conduciendo hacia el camino de la reivindicación armada de los derechos de las poblaciones latinoamericanas, convirtiéndose en protagonista principal de la revolución cubana.
La consulta nos llevó inevitablemente hacia el historiador Arturo Bienedell, que a su vez se apoyó en el periodista Marcelo Bailone, quien años atrás realizó una reconstrucción histórica de los viajes del "Che" para LA VOZ DE SAN JUSTO. De sus registros surge que, el supuesto punto de partida de Guevara y Granado desde San Francisco, Córdoba, no tiene una sola prueba que lo fundamente. No obstante, sí hay algunos posibles puntos de contacto con nuestra ciudad y región que, al parecer, han originado esta versión.
El "Che" y San Francisco. Las versiones y
datos a favor y en contra de esta historia.
El paso por la ciudad, ¿mito o realidad?
En principio, una aclaración necesaria: antes del emblemático viaje juntos, el cordobés Alberto Granado se desempeñó como biólogo en San Francisco, en donde supo visitarlo su amigo rosarino (pero criado en Alta Gracia) Ernesto Guevara de la Serna. Pero se trataba de San Francisco del Chañar, localidad también cordobesa, del departamento Sobremonte, en donde funcionaba el sanatorio "José J. Puente", leprosario muy reconocido.
El inicio del viaje se sitúa un par de años después, junto con las primeras casillas del calendario de 1952. Para entonces, Granado tenía 29 años y era el encargado de acondicionar la moto y estudiar las rutas. El "Che", para su amigo, todavía era el "Pelao" o "Fúser" (Furibundo Serna), contaba con 23 y su misión era rendir la mayor cantidad de materias posibles para convertirse en médico al regreso.
El inicio de este periplo suele figurar como 4 de enero en Buenos Aires, donde estudiaba Ernesto y se encontraba su familia. Pero según algunas versiones, su verdadero comienzo fue unos días antes, cuando Granado hizo preparar la célebre "Poderosa II" en Villa Concepción del Tío. Tal como explicó Bailone, fue un mecánico de apellido Martínez (ya fallecido pero con descendientes que recuerdan esta historia), quien tuvo ese honor.
"Granado salió de la Villa Concepción del Tío en la moto, él solo, y fue a buscarlo al 'Che' Guevara para iniciar el viaje. El 'Che', en ese entonces estudiante de Medicina aún, vivía en Buenos Aires. El viaje de Granado, por tanto, fue Villa Concepción-San Francisco-Rosario-Buenos Aires. De ese tramo estoy totalmente seguro, incluso existía la versión de que desde San Francisco viajó varios kilómetros por tierra a Rosario, por la conocida Avenida Sastre", detalló el periodista.
De lo que no hay dudas es de que ambos dieron inauguración formal a la epopeya en la capital nacional, el 4 de enero. Estuvieron en Villa Gesell el Día de Reyes y, una semana después, hicieron un paso obligado por Miramar, que puso en serio peligro la continuidad de uno de los dos integrantes del raid. Allí estaba María del Carmen "Chichina" Ferreyra, novia del "Che". De aquí se derivan otras confusiones, porque la familia Ferreyra era cordobesa, pero la Miramar que visitaron no quedan dudas de que no fue la de Ansenuza, sino la bonaerense, donde estaban vacacionando.
La dupla siguió luego hacia Bariloche, y de allí pasaría a Chile, donde ya comenzarían a interactuar con poblaciones aborígenes y empobrecidas, tomando contacto con diferentes miradas políticas sobre la región y asumiendo el rol de profesionales de la salud cuando los requerían.
Un viaje de descubrimiento
Bailone advirtió que este primer viaje latinoamericano, en principio, fue un viaje típico de aventura y placer, y que Guevara todavía estaba lejos de su futuro rol de comandante. Por eso eligieron puntos turísticos y fueron ascendiendo hacia el Caribe, por el atractivo que les generaba esta región, y también con la idea inicial de llegar a Norteamérica. Venían de familias acomodadas, estaban bien formados, tenían dinero en el bolsillo y se conducían en una moto Norton 500 cc que era un verdadero lujo para la época. Soñaban con el polvo del camino y el viento en los rostros.
Además, recordó que el "Che" ya venía de una experiencia previa, en 1950, en la que había recorrido el norte argentino en una moto de 48 cc, "por puro hobby, divirtiéndose y amigando con todo el mundo".
De tal modo, si bien la exitosa película "Diarios de motocicleta" de 2004, que recreó esta aventura, muestra a un Che "muy combativo y solidario", Bailone aclara que, en ese entonces, "para nada fue un viaje programado como de liberación, ni de revolución, ni de ideales latinoamericanos", sino que la dupla todavía pensaban en una experiencia de diversión, en una aventura sobre lugares bonitos.
La confirmación del paso, pero del "Che" Granado
Bailone aportó un último dato como posible confirmación de que, en el origen de este viaje, el "Che" que pasó por San Francisco fue Granado: su abuelo Ángel Bailone, "Mingo" Chávez -delegado gremial de Miretti en 1929- y otros mecánicos y/o talleristas comunistas de la ciudad, ya desaparecidos, contaban que al llegar a San Francisco, y viendo que iba a tener que viajar de noche, Granado pasó por un conocido taller, cuyo encargado, de nombre José Domingo Franco, era conocido como "Franquito" por su baja estatura. Allí le consultó sobre la batería, porque fue lo único que no había cambiado. "Mi abuelo contaba que Franco le dijo a Granado que iba a llegar bien a Buenos Aires, pero que ahí la cambiara, y él, en su diario de viaje, habla de un cambio de batería antes de salir de Argentina. Es decir que algo cierto hay en esa historia que contaba mi abuelo", concluyó.
Las versiones que ponen en duda la historia
Las fuentes de consulta fundamentales sobre este emblemático viaje, por supuesto, son los diarios de sus dos protagonistas. El de Granado, recogido en el libro "Con el Che por Sudamérica", cuenta que, como Ernesto había viajado sorpresivamente en los últimos días de 1951 desde Buenos Aires a Córdoba, para visitar a su novia Chichina, ambos terminaron partiendo juntos desde la "Docta", yendo a Ballesteros (cercana a Villa María), luego a Rosario y a la capital nacional, para saludar a los padres de Ernesto. Allí, ya 4 de enero, siguieron para la costa. Granado no menciona Villa Concepción del Tío y mucho menos San Francisco. De haber tomado efectivamente esta ruta por el sur de la provincia de Córdoba, resultaría muy improbable que ambos hubieran pasado por alguna de las localidades de nuestra región.
El diario del "Che", en tanto, arranca en octubre de 1951, ocasión en que viajó a Córdoba aprovechando "las vacaciones del 17", y planeó este periplo con su amigo. De allí, salta directamente a enero de 1952, cuando ya están frente al Atlántico. No deja pistas sobre el camino previo, ni aporta ninguna referencia a si el comienzo lo hicieron ambos en Córdoba o si él esperó a Granado en Buenos Aires. Menciona sí, estando en San Martín de los Andes, que se encontraron con unos amigos de Alberto "de la lejana y casi fantástica Villa Concepción del Tío", localidad que, por su pasado histórico, generaba un atractivo especial para él. Estos amigos los invitaron a Junín de los Andes, adonde fue la dupla, y uno de los temas de conversación en este encuentro fue justamente "el lejano pasado de Villa Concepción, matizado con botellas de tinto en profusión inacabable". Pero en ningún momento menciona que Alberto hubiera acondicionado allí a su moto.
Conclusión
La afirmación de que San Francisco fue el punto de partida de este viaje no quedan dudas de que es, al menos, inexacta, y no cuenta con ningún sustento bibliográfico.
El taller de "Franco" ha funcionado desde la década del '60 hasta la actualidad sobre Independencia casi esquina España. Su propietario no tuvo descendencia, por lo que en la actualidad es dirigido por un antiguo empleado de la firma, quien estima que, para 1952, Franco se desempeñaba en el Taller Eléctrico - Mecánico "Olivelli" sobre Colón al 374. Lo cierto es que en este emprendimiento, que conserva verdaderas reliquias históricas de su larga trayectoria, no subsiste ninguna prueba del posible paso de Alberto con la "Poderosa II".
Pero, en los senderos de la historia oral, a partir de algunas "lagunas" en las crónicas de sus protagonistas, y por el testimonio que dejaron mecánicos locales, queda lugar para la consideración de que, en este periplo, en el acondicionamiento de la moto o en alguna otra experiencia previa a bordo de la "Poderosa II" (recordemos que la moto tuvo que ser abandonada en Chile), Granado sí haya estado en Villa Concepción del Tío, de donde eran los amigos que encontrarían luego en la Patagonia. Esto, a su vez, abriría la puerta a la posibilidad de que haya pasado por San Francisco, obsequiándole una pequeña referencia en el camino de la revolución.
El informe audiovisual de esta entrega estará disponible desde este domingo en las redes sociales (Facebook e Instagram) de LA VOZ DE SAN JUSTO.