El arte en la Mesa digna regalará más solidaridad

Mientras los miembros de las peñas de la ciudad servían el menú anoche en la plaza General Paz, "Pupulem" hizo dos obras que serán subastadas por 20 packs de leche larga vida que serán donados a merenderos.
Los viernes en San Francisco cambiaron este invierno desde que Red Solidaria puso en marcha el proyecto de la Mesa digna, para ofrecer a las personas que están en situación de calle o atraviesan dificultades económicas cenar de una manera diferente.
Anoche "Purpulem" pintó dos cuadros que se subastarán por 20 packs de leche larga vida que serán enviados a merenderos de la ciudad. De esta forma, lo que empezó en la Plaza General Paz con un puñado de voluntarios sigue regalando más gestos solidarios, entretejiendo una red más grande.
Desde aquel 26 de abril en que empezó todo hubo distintos hechos que agregaron color y calor a las jornadas. Se hizo un cumpleaños, se celebró llegada de voluntarios nuevos, también gestos para que las cenas se hagan bajo un techo y no en la plaza y ahora también arte.
El menú por otro lado fue pasando por distintas manos. A veces gastronómicos, mujeres, donaciones que hace la gente y anoche por ejemplo lo prepararon los integrantes de las peñas de fútbol de la ciudad.
Este viernes la cena fue realizada por los miembros de las peñas de fútbol de la ciudad.
Rompecabezas solidario
La Mesa digna comenzó a realizarse el pasado 26 de abril con la labor incansable y desinteresada de Red Solidaria en el marco de la campaña Frío Cero. Primero fueron 10 personas y cada viernes fueron acercándose más personas para recibir un plato caliente de comida, que muchas veces el único alimento que reciben durante el día.
Después entre las sorpresas que regala cada viernes, se conoció el gran festejo que hubo un frío viernes por la noche. El protagonista había sido Joaquín Canello Smith, que quiso celebrar su fiesta de cumpleaños ahí.
Aquella noche el niño le pidió a su mamá compartir el festejo en la Mesa digna y hubo fiesta, globos y hasta una torta y los regalos los hizo el pequeño para sus invitados.
Con unos 40 comensales hace dos semanas la Mesa digna se hizo bajo techo, gracias a que el Ipet 50 "Emilio F. Olmos" abrió las puertas de uno de sus salones para que la gente no pase más frío. Como corolario, esa vez no hubo gastronómicos que cocinaran sino que fueron un grupo de mujeres que son parte de un taller de manualidades y decidieron hacer su aporte acá también.
La Mesa digna da cuenta de que la sociedad de San Francisco nunca será la misma, y cada viernes en la noche el cambio, el verdadero, se hace ver aquí.