Desde el aislamiento, un chico reconvirtió un viejo juego para ayudar a otros

La cuarentena trajo a Marcos Quirelli de vuelta a San Francisco, él es de acá, pero estudia Arquitectura en Córdoba y éste es su último año; consciente de la difícil situación que atraviesan muchas familias comenzó a pensar cómo podría contribuir cada uno desde su propia casa solidariamente con espacios comunitarios.

Mezcló el aislamiento, con lo lúdico y después le sumó la solidaridad para obtener como respuesta un Tutti Frutti online que permitiera a unos divertirse y a otros recibir ayuda a través de un merendero.

"Se me ocurrió la idea para que mediante el juego se pueda ayudar desde la casa con esta modalidad virtual que nos atraviesa y significa un gran cambio donde nadie puede escaparse y que con el tiempo va a cambiar lo cotidiano", contó a LA VOZ DE SAN JUSTO.

Esto le permite a la gente ayudar y también dentro de su aislamiento salir de la rutina. El estudiante dijo también que "está familiarizado con la información respecto a las falencias dentro del campo social" y, en consecuencia, comprende a la perfección que "hay familias que no pueden afrontar la cuarentena porque no trabajan y sino producen no comen".

Cabe destacar que anteriormente fue voluntario en la ONG Techo donde participó en construcciones y colectas para recaudar fondos y también en una agrupación que se llama El Tren y hacen acompañamiento familiar.

Para ayudar

En los últimos días con una amiga empezó a jugar al Tutti Frutti mediante videollamada y eso le permitió entender cómo podía ayudar.

"Me puse a pensar qué juego se pueda jugar on line y sea conocido por todos. Se me vino a la cabeza el Tutti Frutti y me dije por qué no implementar esto a gran escala, difundirlo en internet y cobrar una suma no tan grande y así destinar todo lo recaudado a un merendero", agregó.

Ahí tuvo intervención su madre que es docente de Nivel Medio. Él lleva varios años alejado de la ciudad y su cotidianeidad debido a que estudia en Córdoba y ella le contó sobre un merendero con el que podía colaborar.

"Como yo no vivo acá no conocía tanto los merenderos y mi mamá conocía a Gonzalo Giuliano Albo que trabaja en La Amistad de Frontera. - indicó - Lo llamé, le comenté y me contestó que todo lo que es ayuda está buenísima porque necesitaban comida para preparar las cenas y meriendas".

En la actualidad por cada cena la cantidad de viandas de la asociación civil ubicada en calle 100 al 900 de la ciudad de Frontera se incrementa exponencialmente. Tal es así que llegan a entregar 150 raciones, todo esto debido al aislamiento y que muchas personas viven de changas o no pueden trabajar y necesitan colaboración con los alimentos.

Marcos tiene armado un documento para llevar adelante el campeonato y también se encarga de enviar los datos para quienes deseen donar solamente.

Cómo se puede colaborar

Se trata de una plataforma online que permite crear partidas de Tutti Frutti de hasta 20 personas. El usuario puede crearlas (Marcos) e invita a otros mediante un enlace.

A jugar se puede acceder de la computadora o teléfono sin necesidad de una aplicación, solo haciendo clic en un link.

El creador de la partida decide qué campos se van a jugar y también el número de rondas. Todo lo que se recaude será para el merendero La Amistad al que él no conocía previamente.

"Creo que se puede replicar en otros ámbitos siempre para ayudar a las personas, que en el contexto de emergencia sanitaria y económica está bueno unirnos y colaborar un poco entre todos; por eso a la iniciativa la llamo Manos", sostuvo el estudiante.

Su inspiración viene de un poema que dice "Codo a codo en la calle somos más que dos" y yo traduzco como "Mano a mano en la vida somos muchos más que dos". Sobre esto señaló: "Creo que es la única forma de atravesar esta situación de la mejor manera, pensando en el otro y haciendo así que la construcción social sea sólida, sin grietas entre nosotros".

Logística

Su iniciativa se viralizó a través de las redes sociales, con flyers que decidió dando los detalles en su objetivo de llegar a más gente. "Se recibieron donaciones de distintos lugares además de la ciudad como Reconquista, Rafaela, Arroyito, Buenos Aires, Rafaela y muchos lugares que aportaron su granito de arena", puntualizó.

El sistema está aceitado gracias al ingenio de Marcos con una original modalidad en la que sus amigos también tienen participación: "Cuando se difunde esto sirve para que la gente vea y responda la historia entonces aparece un mensaje donde explica más detalles de la propuesta y se agrega un link".

De ahí las personas cliqueando en ese link van a un formulario de Google donde hay que rellenar datos y un mail y cómo se quiere participar: con un campeonato de Tutti Frutti o una donación. "Tengo un Excel acomodado y a cada uno se les envía el mail con los datos de Mercado Pago para enviar el dinero a la cuenta", sintetizó.

También en el formulario se les pregunta si quieren participar en el juego y participan de un grupo de WhatsApp donde organiza las partidas y a los inscriptos se les deja un link para acceder.

Marcos está en aislamiento, pero gran parte del día estudia o tiene clases virtuales, intenta hacer ejercicio y en el medio diseñó todo este proyecto solidario. No olvida que la cuarentena es una buena medida "que impactará en la economía del país". Su deseo es que pronto se reactive de a poco la actividad por zonas y que todo mejore.