Denuncian a la Policía de Córdoba por el crimen de odio contra Samuel Tobares

La muerte de Samuel Tobares, de 34 años, ocurrida el pasado domingo en Villa Parque Síquiman, derivó en una investigación judicial que ya tiene a dos policías de la Departamental Punilla detenidos e imputados por homicidio preterintencional. El hecho dejó múltiples interrogantes y generó fuertes reclamos de organizaciones LGBTIQ+ y de derechos humanos, que piden el esclarecimiento del caso.

El episodio se produjo cerca de las 21, cuando Tobares regresaba a su casa tras trabajar durante la tarde en un hotel de Villa Carlos Paz. Después de bajar del colectivo y cruzar la ruta 38, fue interceptado por dos uniformados en la garita de colectivos del lugar. Según la reconstrucción inicial, una vecina había llamado al 911 para denunciar que un hombre la había amenazado con una piedra, señalando a Samuel como el presunto agresor.

Durante el procedimiento, uno de los efectivos intentó utilizar gas pimienta, pero Tobares logró arrebatarle el spray y el gas se dispersó dentro de la garita. A partir de allí, se habría desatado una violenta secuencia de golpes.

“Lo mataron como si fuera un perro”

Guillermo, un testigo clave que declaró ante la Justicia, brindó un relato contundente sobre lo ocurrido. En diálogo con Telenoche, sostuvo:
“A ese chico lo mataron como si fuera un perro. Vi cuando empezó el control, cuando lo llevaron para el móvil. Lo insultaron, lo agredieron. En un forcejeo le pegan una piña, lo tiraron contra el móvil, el chico se cayó y le pegaron patadas”.

El testigo afirmó que ambos policías se subieron sobre el cuerpo del joven:
“Estuvieron sentados arriba de él durante 15 o 20 minutos. Dos personas de 80 kilos arriba de un chico flaquito. Le dijeron ‘puto de mierda’, ‘gil de mierda’, ‘otario’. Le dieron como a una bolsa de boxeo”.

Su declaración agregó que, cuando llegaron otros móviles policiales, los efectivos se apartaron del cuerpo de Tobares y comenzaron maniobras de RCP.
“Los brazos se le caían. Es mentira que ese chico se murió en el Funes. Se murió acá. Lo dejaron morir en la calle. Cuando se dieron cuenta de que se la mandaron, se agarraban la cabeza”, aseguró.

Resultados de la autopsia y la investigación judicial

La autopsia confirmó que el cuerpo del joven presentaba múltiples golpes, pero no halló lesiones directas —como traumatismo de cráneo severo o daños internos evidentes— que expliquen la causa inmediata de muerte. Sin embargo, los forenses concluyeron que Tobares falleció antes de ingresar al Hospital Domingo Funes.

Restan los estudios anatomopatológicos y toxicológicos, que permitirán determinar si existieron factores adicionales que contribuyeran al deceso.

La causa está a cargo del fiscal de Instrucción N.º 2 de Villa Carlos Paz, Ricardo Mazzucchi, quien dirige todas las actuaciones bajo secreto de sumario. Desde el entorno de Samuel anticiparon que pedirán agravar la imputación a homicidio calificado, argumentando que el ataque tuvo motivaciones homoodiantes.

Reclamo de justicia

Organizaciones LGBTIQ+ y de derechos humanos expresaron su preocupación por lo ocurrido y denunciaron públicamente que Tobares fue víctima de un ataque brutal marcado por insultos discriminatorios. También exigieron que se garantice una investigación exhaustiva y transparente.

Mientras tanto, los dos policías continúan detenidos en la cárcel de Bouwer, imputados por homicidio preterintencional, una figura que contempla la intención de agredir sin prever el resultado fatal.

La muerte de Samuel Tobares abrió una fuerte conmoción en Villa Parque Síquiman y en la región. Su familia y distintas organizaciones reclaman respuestas claras y justicia en un caso que volvió a poner en debate el uso de la fuerza policial y las condiciones de los procedimientos de seguridad en Córdoba.