Salud
Dengue: se trabaja para demorar el crecimiento poblacional del mosquito
La prevención temprana, las fumigaciones, el control larval y las innovaciones como las ovitrampas y el uso de drones, son herramientas fundamentales para ralentizar el crecimiento de la población de Aedes Aegypti. En tanto, alertan sobre la posibilidad de un aumento en las próximas semanas.
Las condiciones climáticas favorables y la prevención temprana sumada a la toma de conciencia por parte de la población han permitido que, al inicio de febrero, la cantidad de mosquitos en San Francisco no sea tan elevada como en el mismo período del año anterior. Según los expertos, el trabajo conjunto de los ciudadanos y el municipio ha logrado ralentizar el crecimiento del mosquito transmisor del dengue, Aedes Aegypti.
Los mosquitos, en todas sus especies, dependen de factores como la temperatura, la humedad y las precipitaciones para su reproducción. Cuando las lluvias caen en áreas bajas que se inundan y permanecen por varios días, las condiciones se vuelven ideales para su desarrollo. Sin embargo, la cantidad de mosquitos este año es menor comparada con la del año pasado, un indicativo de que las acciones preventivas están dando resultados positivos.
Campaña temprana de prevención
En agosto de 2024, la municipalidad comenzó una campaña preventiva de lucha contra el dengue. De acuerdo con Darío Muratore, director general de Servicios Públicos de la ciudad, “la campaña comenzó a mediados de agosto, siendo de las primeras ciudades en la provincia en tomar estas medidas, e incluye tareas como la colocación de ovitrampas en domicilios y contenedores en los barrios, el descacharreo, charlas con vecinos e intervenciones en lagunas de retardo”. Muratore explicó que estas acciones fueron ejecutadas con un fuerte énfasis en la prevención, siguiendo los lineamientos establecidos por la Provincia, pero con un “valor agregado” de permanentes intervenciones de campo para combatir el mosquito.
En este contexto, la implementación de ovitrampas fue una de las principales innovaciones. Estas trampas permiten monitorear la población de mosquitos y evaluar su desarrollo. Adrián Pagliano, director de Sostenibilidad municipal, detalló: “Las ovitrampas nos permiten determinar que hasta el día de la fecha el crecimiento poblacional de mosquitos es bajo, si bien los hay y va en ascenso, algo que era lo esperado, es más lerdo que lo que se pensaba en la temporada”. Inicialmente, se habían instalado 100 ovitrampas en domicilios, pero al detectar la presencia de mosquitos adultos, se redujo el número a dos por barrio para estudiar de manera más focalizada el comportamiento de la población de mosquitos.
Pagliano también dijo que el sistema de ovitrampas tiene cinco niveles de intensidad, donde el nivel 5 representa la mayor presencia de mosquitos. Actualmente, la ciudad se encuentra en el nivel 2, lo que indica una población de mosquitos bajo control. “Si bien no se pueden hacer predicciones exactas, estimamos que el pico de población de mosquitos podría darse en marzo”, indicó el funcionario.
Fumigaciones y tecnología
El municipio redobló esfuerzos para fumigar las zonas más afectadas por la proliferación de mosquitos, principalmente en áreas periféricas. “No se fumiga en los domicilios, sino en la periferia para hacer una cortina espacial, tratando de reducir el ingreso del mosquito del campo a la ciudad”, indicó Pagliano. Además, se ha incorporado tecnología de vanguardia para la fumigación en espacios más amplios. “Gracias a un acuerdo con la firma Akron, hemos sumado un Drone Pulverizador Agras T25, que permite fumigar áreas más alejadas y difíciles de alcanzar con un vehículo, lo que ha sido de gran utilidad”, destacó.
El descacharreo, acción fundamental
Un aspecto clave en la prevención es el descacharreo, que consiste en la recolección de objetos y materiales que pueden servir como criaderos para los mosquitos. Pagliano destacó la labor de los promotores que visitaron casa por casa en los barrios y la importante colaboración de los vecinos. “La gente los atiende, se interesa por saber y nos aporta muchos lugares que potencialmente podrían ser criaderos. Les agradecemos por su valiosa colaboración”, expresó.
El municipio también realiza “desacharreos intensivos” por la tarde, donde se ingresan a sectores más complicados para limpiar lotes o domicilios que presenten basura o elementos que favorezcan la proliferación de mosquitos.
Control larval en lagunas y espejos de agua
Una acción adicional que ha tenido un impacto significativo en la reducción de mosquitos es el control de su etapa larval. El municipio ha estado aplicando larvicida biológico en lagunas y espejos de agua. Según Pagliano, “hemos estado aplicando el larvicida Bacillus thuringiensis (Bt) de manera quincenal. Este larvicida tiene una alta eficacia y es de bajo impacto ambiental, pues actúa exclusivamente cuando el insecto lo ingiere”. Este tratamiento ha sido fundamental para atacar al mosquito en su fase más temprana y evitar su desarrollo en adultos.
Conciencia y colaboración ciudadana
Tanto Muratore como Pagliano coincidieron en que una de las claves del éxito de la campaña ha sido la colaboración de los vecinos. “La población tomó más conciencia del tema y parte de esa conciencia tiene que ver con las acciones que la municipalidad hizo, con las campañas provinciales, con que un promotor visite los hogares, con un contenedor ploteado para descartar elementos, etc.”, señaló Muratore. Ambos funcionarios agradecieron el compromiso de los habitantes de San Francisco y pidieron que sigan colaborando con las medidas preventivas.