Con la crisis las personas eligen mantener más los teléfonos
En el primer trimestre de este año por ejemplo la producción de teléfonos producidos en Tierra del Fuego cayó 33% en el primer trimestre del 2018. Los precios son el principal condicionante para que la gente cambie de modelo.
El mercado de venta de los smartphones se renueva permanentemente, tanto que se estima para fin de año que habrá al menos 1.500 millones de unidades de smartphones en todo el mundo.
Una de las claves para poder sortear todas las crisis es mantenerse siempre a la vanguardia y sumar de forma permanente nuevos aparatos que interesen a los consumidores estableciendo una relación de fidelización con ellos.
Las previsiones de 2017 marcaban que el año pasado los precios estarían a la baja porque había productos en stock de los que se ensamblan en Tierra del Fuego y comercializan en todo el país. Sin embargo, los vaivenes económicos también afectaron el costo de los aparatos.
Actualmente un teléfono gama media obliga a los usuarios en promedio a desembolsar unos 7.000 pesos, y, además, ahora tras el comportamiento irregular de la economía nacional la mayoría de todas las líneas incrementaron los costos para poder seguir manteniéndose en competencia.
Qué los hace más caros
Como se sabe los teléfonos vienen compuestos por distintos elementos que permiten tanto su conectividad a las redes de wifi y de datos, su aceleración, la posibilidad de soportar varias aplicaciones abiertas en simultáneo y almacenar lo que un usuario descarga básicamente.
De estas partes que a grandes rasgos pueden reconocerse todas son internas y trabajan en simultáneo para que el teléfono funcione. Lo que vemos en las pantallas no es ni más ni menos que el producto final de ese ensamble.
Al momento que algo se rompa, si sucede lo más frecuente es el módulo que contiene a la pantalla, precisamente éste es el elemento más caro para poder suplantar.
Le siguen las memorias, la cámara y el procesador que cuanto más novedoso es (según las compañías) completan el tridente sobre el que se puede conocer la calidad y el precio del equipo.
Más caros y baja producción local
La producción de teléfonos móviles en Tierra del Fuego cayó 33% en el primer trimestre del año respecto del mismo período de 2018, según datos de la Asociación de Fabricantes de Terminales Electrónicas (Afarte).
En el mundo también se está dando un proceso similar aunque el impacto es menor en el mercado. Se verificó también una merma del 6,6% en la cantidad de móviles vendidos durante el primer trimestre de este año, el sexto consecutivo en baja.
Los aumentos en los precios llevan a las personas a cambiarlos con menor regularidad y "estirar" el máximo posible los modelos que poseen, por lo menos unos dos años o más.