Cómo hacer para que toda la familia ayude con las tareas del hogar

¿De qué manera lograr que los chicos colaboren?. Las vacaciones de invierno se convierten en una oportunidad para organizar rutinas y cambiar hábitos para formar un gran equipo: "la familia".
Poner la mesa, secar los platos, ordenar la ropa, tender la cama, cocinar... las tareas de la casa son interminables. Ya pasaron los tiempos en que mamá resolvía todo y hoy cada vez más, esas tareas se comparten con papá.
Sin embargo para muchos padres es muy difícil lograr que los niños quieran ayudar en casa y no es raro escuchar: "no quiero ir al almacén" o "no me corresponde poner la mesa". No sienten la necesidad de colaborar porque desde muy pequeños lo han hecho por ellos.
Ya comenzaron las vacaciones de invierno y por varios días los más chicos estarán más tiempo en casa, una oportunidad para organizar rutinas y cambiar hábitos para formar un gran equipo: "la familia".
¿Cómo enseñarles a colaborar?. ¿Es importante aprender a delegar algunos trabajos aunque los chicos sean pequeños?. La licenciada en Psicología, Marisa Silvina Panero (MP-2297), del centro Rayuela, explicó en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO que el primer paso para comenzar a enseñarles es, "ayudarles a entender que el hogar es un sitio donde viven varias personas juntas y todos deben colaborar para poder llevar una convivencia adecuada, saber que es una obligación que todos y cada uno de los integrantes deben hacer".
Organizarse y dar el ejemplo
La licenciada aconsejó que para que los chicos lo vean más claro, se les puede establecer un cuadro de tareas que todos deben cumplir, empezando por papá y mamá dando el ejemplo. "El mejor maestro que existe para los niños, con respecto a las tareas domésticas y otras cosas de la vida, que realmente les enseña lo que debe hacer y cómo hacerlo son los padres", afirmó.
Panero afirmó que justamente con esto se trata de establecer el hábito, para que los chicos después puedan hacer las cosas por sí mismos, sin necesidad de recordarles todo el tiempo lo que tienen que hacer. "El objetivo también es ir aumentándoles la responsabilidad y a su vez su autoestima por realizar bien las tareas".
Lic. Marisa Panero
Nunca pagar por el trabajo realizado
En esta enseñanza, bajo ningún punto de vista los chicos deben ser recompensados con dinero o bienes materiales, ya que, según consideró la psicóloga "las tareas domésticas son una obligación y no debe haber un pago por realizarlas".
Agregó que es bueno tomarlo desde el punto de vista de consecuencias positivas o negativas, por ejemplo "retirar privilegios cuando no se cumple lo asignado, en caso de niños pequeños resulta muy productivo el uso de colores o caritas que les ayude a estar motivados, premios afectivos, aumento de privilegios, más tiempo libre para sus preferencias, etc.".
"Una tarea de todos"
El hábito de colaborar en las tareas domésticas debe incorporarse cuando los niños son muy pequeños. Es una "tarea de todos", los integrantes de la familia. Panero afirmó que es "un modo de integrarlos en el funcionamiento familiar, desarrollando el sentido de pertenencia a la familia".
"Obviamente, cuando son pequeños no se los deja limpiar como a un niño mayor ni permitirles manipular productos tóxicos, pero sí pueden ver que a la hora de hacer las tareas domésticas puede ser divertido y logran hacer lo que se les pida. Así se sentirán capaces, tendrán mayor responsabilidad e incorporarán que las tareas domésticas es cosa de todos", remarcó.
Aprender a delegar
Muchas mujeres prefieren "ser orquesta" y hacen todo solas. Pero eso no es recomendable. La licenciada Panero aconsejó que es importante aprender a delegar, "fundamentalmente para enseñarles a ellos que si bien tienen derechos, también tienen obligaciones. Les otorga autonomía ya que supone un reto a cumplir y a superar, además explota las habilidades sociales porque aprenden a superar las dificultades, organizar el tiempo planear estrategias, etc.".
Añadió que además fortalece el trabajo en equipo, "los chicos se sienten parte importante del equipo llamado 'Familia' y sin olvidarnos también de los valores -el valor del esfuerzo, la solidaridad, la empatía, la paciencia, la colaboración- y la responsabilidad que se supone el asignarles una tarea".
En qué pueden colaborar según la edad
Aunque sean muy pequeños se puede comenzar involucrar a los chicos en las tareas domésticas. Hay tareas para todas las edades:
A partir de los 2 años, se empieza a desarrollar el juego simbólico, que consiste en imitar las acciones que realizan los adultos en la vida real, así que es una gran oportunidad para que empiecen a colaborar en tareas sencillas, por ej., recoger sus juguetes colocándolos en una caja, poner las servilletas en la mesa, recoger basura y tirarla en un cesto, etc.
Cuando van creciendo ya pueden ayudar en tareas más complejas, sobre todo haciendo hincapié en sus espacios como su cuarto y su lugar de estudio, y el cuidado de sus objetos personales.
No olvidemos que colaborar en las tareas del hogar es un proceso de aprendizaje por lo tanto debemos incentivarlo, tener paciencia ante los errores o ante las ocasiones en que parece que nos molestan más de lo que nos solucionan o ayudan.