Comisiones inmobiliarias: otro golpe al bolsillo de los inquilinos
El nuevo marco legal autorizó a cobrar altas sumas de dinero a la hora de firmar nuevos contratos o renovaciones. Vecinos de la ciudad relatan el drama que les significa esta erogación.
La nueva ley de alquileres, que entró en vigencia recientemente, puso a los inquilinos en una delicada situación ya que los aumentos fueron abruptos con el descongelamiento de los precios y el fantasma de los desalojos comenzó a sobrevolar con la finalización de su prohibición. Ahora, quienes deben afrontar una renovación o un nuevo contrato se encuentran con un nuevo dolor de cabeza: las altas comisiones inmobiliarias.
Vecinos de nuestra ciudad denuncian que más allá de que en algunos casos inmobiliarias y propietarios permiten pagar la comisión en cuotas, esto representa "estar pagando un alquiler y medio durante varios meses".
Gastón Funes, representante de Inquilinos Unidos de San Francisco, consideró que la carga de las comisiones no hace otra cosa que agravar la situación de quienes no poseen vivienda propia. "La verdad que a esta altura ya no nos sorprende, pero estamos pagando comisiones fuera de serie. Tanto las inmobiliarias como los propietarios que administran sus viviendas están cobrando comisiones que son muy altas, muy elevadas", expresó.
Sobre ello agregó: "La situación de los inquilinos sigue siendo muy complicada, a pesar de todos los reclamos y del llamado a que se pongan un poco en nuestra situación. La verdad es que no nos han dado mucho resultado porque la situación no cambió en nada".
"Los precios de los alquileres siguen subiendo, siguen aumentando los valores de las comisiones inmobiliarias. La verdad es que todo es un desastre. Sumado a la situación de pandemia, económica del país donde todo aumenta menos los salarios de los trabajadores, esto nos pone en un lugar muy complicado", concluyó.
El drama en primera persona
Paula Baigorria es mamá de 3 hijos, trabaja en el Hospital Iturraspe y su marido es viajante. Su drama comenzó cuando el mes pasado les avisaron que la casa donde viven se había vendido y tendrían que buscarse otro lugar donde vivir. Ello significó pasar de un contrato con la ley anterior a pactar uno con la nueva.
Allí se encontraron no solo con los altos valores que piden por el alquiler de una casa "normal" sino también con los costos de las comisiones y los requisitos muy difíciles de cumplir.
Paula comentó que no buscan nada especial: "Solo una casa de dos dormitorios, cocina y comedor, que tenga una cochera o garaje para guardar motos y bicicletas. O sea una casa común... nada baja de 25.000 pesos. Ese es el piso. Hablamos a casas que el alquiler llegaba a 43.000 pesos. Para nosotros, algo que pase los 30 es impagable".
"Actualmente vivo en barrio Catedral y pago 18.000. Es una casa que tiene cocina-comedor, dos dormitorios, baño, patio y garaje y tiene todos los servicios. Pero estoy con la ley anterior. La ley de alquiler nueva consiste en un alquiler de tres años. El primer año es un precio y después no se sabe. Según nos explicaron a ese aumento lo va a fijar el Banco Central", agregó.
Otro impedimento fueron los requisitos que les pidieron para firmar un contrato. "Los requisitos, en algunas inmobiliarias, son recibo de sueldo de al menos uno de los inquilinos. Además, 4 garantías con recibo de sueldo que alguno supere los 80.000 pesos. La verdad que ya es difícil conseguir una garantía, imagínate conseguir una que tenga esos ingresos. Terrible. En otros piden 4 garantías y una con propiedad", comentó.
Conseguir una garantía con escritura es otro escollo. "Mis padres están separados y ninguno de los dos tiene casa propia. Mis suegros no viven acá, viven en Carlos Paz y al ser una casa de un plan de viviendas, esa escritura no sirve. Es muy complicado todo. Conseguir garantías con esos recibos de sueldo, que tengan propiedad. Imaginate pedirle a un amigo o compañero de trabajo que te salga de garantía con su propiedad", comentó Paula.
La comisión
Una innovación de la nueva ley de alquileres es la reglamentación de la comisión que en este caso deben pagar los inquilinos a inmobiliarias o intermediarios. Esto representa casi dos meses de alquileres y en los casos en que se permite pagarlos en cuotas, algunos inquilinos se pasan varios meses pagando "un alquiler y medio".
Paula explicó que la comisión inmobiliaria "consiste en el 5% del total del contrato para poder entrar. O sea, para entrar tendríamos que pagar 25.000 pesos más 45.000 de comisión. A eso te lo dan en dos o tres veces. Es terrible. Todavía no conseguimos nada. Casa en alquiler hay, muchas. Pero están pidiendo alquileres carísimos para lo que podemos pagar".
Finalmente, la vecina también advirtió sobre el mal estado de las viviendas que se encuentran disponibles en el mercado inmobiliario de San Francisco: "La mayoría están muy deterioradas, con humedad. Los propietarios no quieren ponerles un peso para mejorarlas... o entrás como están o no entrás. Se hace muy difícil para quienes no podemos acceder a una casa propia afrontar un alquiler. Imaginate que 30.000 pesos es casi un sueldo y si tenés la suerte de contar con otro ingreso, tenés que dedicarlo íntegramente para vivir".
Alquilar con 5 hijas
Cynthia Calermo quiso aportar su experiencia y contó que el contrato de la vivienda en la que vive junto a su marido y 5 hijas prácticamente se duplicó. Su marido es comisionista y ella hace poco comenzó a trabajar y gana por horas, por ello ese aumento, además de tener que hacer frente a una comisión de 36.000 pesos les complicó mucho la vida.
"Nosotros alquilamos y estábamos pagando 11.000 pesos por mes. Cuando se nos venció el contrato nos aumentaron a 20.000 y además tuvimos que pagar una comisión de renovación de 36.000 siendo que hace años nosotros venimos tratando con la misma inmobiliaria", contó.
"Se nos complica mucho, nos ponen muy difícil las cosas, siendo que somos una familia numerosa de 7 integrantes. Mi marido hace comisiones entre San Francisco y Arroyito y yo recién hace un mes gracias a Dios empecé a trabajar en una empresa privada, en la que me pagan por horas. Cada vez se nos complica más pagar el alquiler", expresó.