Caso Roblero: con la declaración de 4 testigos y uno de los imputados comenzó el juicio

De los cinco jóvenes imputados por matar en patota a Cristian durante un partido de fútbol, solo uno de ellos declaró. La audiencia continuará mañana.
Con la declaración de cuatro testigos, comenzó este lunes el juicio por la brutal agresión que derivó en el deceso del jugador de fútbol amateur Cristian Andrés Robledo (30). La golpiza se produjo el sábado 13 de abril de 2019 en la cancha del Club de Barrio La Milka y el deportista falleció el jueves 18 de abril en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital "J. B. Iturraspe" de nuestra ciudad.
Por el hecho hay cinco imputados: Ariel Alejandro Cortez (25), alias "Aleta"; Maximiliano Roberto Manzanelli (36) y Facundo León (21). Junto a ellos comparecen Brandon Cristian Pérez (20) y Agustín Páez (19), quienes al momento de ocurrir el trágico hecho tenían 17 años. Todos están imputados como presuntos autores de "homicidio agravado en ocasión de un espectáculo deportivo".
Los tres mayores, Manzanelli, Cortez y León, comparecen por videoconferencia desde el Establecimiento Penal Nº 7 de nuestra ciudad, en tanto que Pérez y Páez lo hacen desde Tribunales II de la ciudad de Córdoba, ya que ambos están alojados en el Complejo Esperanza de la capital provincial.
En la primera jornada declararon un total de cuatro testigos y debido a que expiraba el tiempo del sistema Zoom, se pasó a un cuarto intermedio para hoy a las 9.
Los otros tres testigos que restaban declarar hoy pasaron para mañana, por lo que se espera una larga jornada. Este lunes la audiencia comenzó pasada las 9.30 y finalizó a las 14.10.
Tras la lectura de la acusación, el presidente del tribunal, Claudio Requena, interrogó a cada uno de los imputados sobre sus datos personales, luego el camarista les consultó si iban o no a prestar declaración, informándoles que en caso de no hacerlo el juicio continuaría hasta llegar a la sentencia y que el hecho de no declarar significaba que fueran culpables.
Comienzo del debate
De los cinco imputados, solo uno de ellos manifestó a través de su defensor, Horacio Eugenio Mitrojovich, su intención de prestar declaración. Brandon Pérez dijo al tribunal que "se armó la pelea de la que nunca participé, vi que golpeaban al chico que después falleció, pero repito, nunca participé de la golpiza que le dieron". El imputado reconoció haber participado, pero de otra pelea: "Yo participé de una pelea con uno de los arqueros, el hermano de ese arquero mientras éste peleaba fue a buscar a su madre, eran cinco o seis los que participaban de la pelea, no recuerdo el número de participantes de la pelea, pero eran muchos", señaló y finalmente el joven respondió algunas preguntas formuladas por la fiscal de cámara Consuelo Aliaga Díaz.
Los otros cuatro imputados se remitieron a las declaraciones efectuadas en la fiscalía de instrucción al momento de prestar declaración indagatoria y ninguno de ellos aceptó responder preguntas.
Los testimonios
El primer testigo fue Carlos Sosa, quien dijo conocer a Robledo porque jugaba en el mismo equipo. Sosa armó un croquis indicando en donde se encontraba el público aquella tarde e identificó a dos de los autores de la golpiza que recibió Robledo. El testigo señaló que la víctima no podía defenderse, estaba en el suelo como "acurrucado" mientras le propinaban puntapiés en la cabeza y en el cuerpo. Y reiteró quiénes eran los dos que golpeaban a Robledo mientras el resto participaba de otra pelea. El testigo dijo que en un momento ingresó la hermana de los Cortez y les ordenó que terminaran con la pelea, y agregó que a Robledo lo vieron muy mal debido a los golpes e identificó a dos de los mayores -Manzanelli y León- y a uno de los menores -Páez- como los que pegaban.
En otro tramo de su extenso testimonio, Sosa dijo que él ya no jugaba para el equipo de Robledo, sino que había ido a la cancha como espectador. Ante una pregunta de la fiscal de cámara, reconoció tener temor a la hora de declarar, negó haber sido amenazado para que no lo hiciera, pero reconoció tener temor, "tengo familia", aseguró.
Por último, dijo que le pareció ver a alguien de seguridad privada y antes de retirarse explicó que dos de los agresores habían jugado el partido anterior y que ambos vivían en barrio San Javier de la ciudad de Frontera.
Luego de este testimonio fue el turno de Juan José Belloti, quien dijo ver cuando se armó la pelea y él, que era jugador del equipo de La Milka, se apartó de la misma. Bellotti afirmó conocer de vista a los acusados, aquí señaló que Robledo era de estatura normal, en tanto que Manzanelli lo era de contextura física grande.
El testigo dijo que la caída de Cristian Robledo fue a partir de un golpe de puño que recibió y una vez en el suelo lo comenzaron a golpear, previo a ello -aseveró-, se había registrado un intercambio de golpes entre la víctima y Manzanelli.
El testigo agregó que el organizador de la liga amateur "Beto" Ludueña vio todo lo que sucedía, en el lugar estaba el árbitro y una chica que él cree que era enfermera, pero que en el predio no había ningún policía.
En tercer lugar, declaró Brian Luque, jugador del club de La Milka, quien dijo que todo comenzó a partir de un incidente propio del juego. En su testimonio coincidió con el testigo anterior, al nombrar a uno de los acusados como quien le pegaba puntapiés a Robledo -quien se encontraba caído en el suelo-. El testigo dijo que para participar de la Liga Amateur se debía abonar una inscripción y por cada fecha pagaban 1.000 pesos.
Aquí Cortez, uno de los acusados, le sugirió algunas preguntas a su defensor, Sergio Corón Montiel, destinadas al testigo, y en una de sus respuestas el joven dijo ver caer a Robledo pero que no vio con que golpeó.
Como último testigo declaró Nahuel Godoy, arquero del club de La Milka. Este aseguró que a él le pegaron una patada, se levantó y se retiró del lugar, pasando al lado de Robledo, que ya estaba caído en el suelo. El testigo dijo que intentó evitar que lo siguieran golpeando y para ello se paró sobre el cuerpo de la víctima, y afirmó que eran cinco o seis los que le pegaban.
Por último, el testigo dijo que el público abonaba entre 20 y 50 pesos para entrar a ver los partidos.
Sin público
Por cuestiones sanitarias, la audiencia se realiza sin la presencia del público, en la sala están únicamente los integrantes del tribunal, la fiscal de cámara, el abogado querellante junto a la madre de la víctima, los cuatro abogados defensores y los representantes de la prensa.
Por esa razón es que no se permitió el ingreso de familiares de los imputados. Varios de ellos permanecieron en el acceso al primer piso de la sede tribunalicia y otros prefirieron aguardar en la explanada del edificio a que salieran los abogados y de esto modo conocer detalles de la audiencia.
El juicio continuará hoy martes a partir de las 9 con la recepción de los testimonios de tres testigos que habían sido citados ayer. A éstos se le sumarán los que deban brindar testimonio esta mañana.