Barajar y dar de nuevo

El presidente de San Isidro, Alejandro Aimaretti aludió a la ardua misión de armar un nuevo plantel tras la sangría producida en el subcampeón de la Liga Argentina.
Todavía flota el recuerdo de esa gran campaña a la que el destino no le dejó alcanzar la gloria, pero la dirigencia de San Isidro ya dio vuelta la página y comenzó el armado del nuevo plantel para afrontar la temporada 2019/2020 de la Liga Argentina de básquetbol.
Un difícil desafío en razón de que precisamente no quedó ni la base de ese equipo, cuyos principales protagonistas tomaron otros rumbos tentados por ofertas más elevadas. Así que obligadamente se deberá barajar y dar de nuevo.
En ese contexto, el presidente de la entidad "santa", Alejandro Aimaretti, en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO reprobó el proceder de algunos clubes de haber contactado a sus jugadores mientras disputaban las finales, aludió a lo complicado del mercado de pases pero igualmente confió en volver a conformar un plantel competitivo motivado por la campaña anterior y la celebración del 100º aniversario de la institución el año próximo.
-¿Los sorprendió el éxodo de jugadores luego de la gran campaña?
-Nos tomó totalmente por sorpresa. Creo que haber llegado tan lejos, fue una suerte de "castigo" por tema del mercado al que llegamos tarde. Suponíamos por el día a día con el cuerpo técnico y demás, que se iban a repetir varios jugadores.
Bueno, terminamos de competir e inmediatamente empezamos a trabajar con representantes y con los mismos jugadores para hacerles saber nuestra satisfacción, reconocimiento y negociar una temporada más.
Ahí nos desayunamos con algunas cosas que no cayeron muy bien en la dirigencia, de negociaciones que se hicieron al final de la temporada por parte de dirigentes de otros clubes, una total falta de ética para con nosotros.
Pero bueno, son aprendizajes que vamos tomando, y nunca nos había tocado llegar tan lejos en la competencia y por ende estábamos focalizados en terminar el trabajo y descuidamos de haber abrochado a los jugadores con antelación.
-Mientras estaban jugando las finales los jugadores fueron
tentados...
-Sí, tenemos pruebas contundentes de eso. No creo que al jugador lo saque de foco de ganar una final porque le representa mucho desde lo deportivo y lo económico, pero me parece que no fue la forma de parte de los colegas de otros clubes.
Te repito, nos sorprendió y cuando salimos al mercado tratando de retener los jugadores que nos pidió el cuerpo técnico, vimos una diferencia total de presupuestos y ofertas que les habían hecho. Hicimos el mayor de los esfuerzos pero tenemos una política de hace años en el club de pagar muy bien pero no ser lo más pagadores porque nos manejamos con un presupuesto, no con la pasión y el corazón.
La verdad que era inalcanzable retener a los jugadores que se fueron. Que quede claro que se hizo el máximo esfuerzo por retenerlos. El cuerpo técnico nos pidió que hiciéramos el esfuerzo en tres jugadores puntuales pero cuando empezamos a negociar con los representantes y los mismos jugadores nos dimos cuenta de que tenían desde hacía tiempo una oferta muy superior.
Pensábamos que iban a poner en la balanza, lo cumplidores que somos, las atenciones que se le tienen, pero la parte económica pesó mucho más. Entiendo a los jugadores que por ahí tienen una vida deportiva y productiva muy corta, tienen una familia por detrás y tienen que optar por la parte económica.
No hay sentimiento que valga, por más que tuvieron acá una excelente temporada, la parte económica manda.
¿Se hace difícil salir al mercado buscando precio y calidad?
-El mercado es distinto al de otros años porque hay otros factores que compiten que son Brasil y Chile. El tema del dólar hace que en el mercado interno muchos no se animen a contratar extranjeros porque no saben en cuanto puede terminar esa moneda en diez meses.
Por otro lado los equipos brasileros y chilenos están con dólares frescos para contratar y por eso hay un éxodo importante de jugadores. Hay jugadores que te hacen esperar porque tienen oferta de esos países y contra eso no podes competir.
Así y todo el mercado de la Argentina está medio quieto. Además se da algo muy particular, hay jugadores jóvenes que tienen ofrecimientos menores en la Liga Nacional pero optan igual por esta para usarla como vidriera. Son apuestas de los jóvenes porque los mayores priorizan la parte económica y el proyecto deportivo.
-Dejaron una vara muy alta, eso los obliga a volver a poner un
equipo competitivo en cancha...
-Mirá, tenemos un doble incentivo. Haber realizado esa excelente campaña nos motiva a tratar de buscar un equipo competitivo, tenemos el respaldo del cuerpo técnico que hizo las cosas muy bien, y tratará de repetir lo hecho en la temporada pasada.
Además tenemos el condimento que el 1 de marzo de 2020 cumple cien años el club. Será un año muy particular y se verá reflejado a lo largo de toda la temporada porque habrá un montón de eventos que matizarán esta nueva temporada.
-Es un gran desafío armar nuevamente la plantilla...
-Estamos trabajando bien, ya tenemos tres fichas mayores confirmadas más un U23, y en breve cerraremos alguna otra incorporación.
Esta es una parte muy importante de la temporada, el armado del plantel que es clave. Al ser solo seis fichas mayores, hay que conseguir jugadores que cumplan más de una función.
-¿Deseas agregar algo?
-Solo agradecer a todos porque el acompañamiento que tuvimos fue enorme. Empresas de la ciudad y de la región nos apoyaron. La Municipalidad de San Francisco que siempre nos brinda su respaldo, no solo económico sino también gestionando.
Y lo de la gente fue espectacular, hubo mucha repercusión en localidades de nuestra provincia y Santa Fe. Y eso se vio reflejado en que se vendió un número importante de abonos para la temporada próxima que todavía no se publicitó, algo increíble.