Atilra instó a directivos de Sancor a negociar con Fonterra para la compra de la cooperativa
El titular del gremio de lecheros, Héctor Ponce, exigió hoy a los directivos y autoridades de la láctea que negocien que la empresa neozelandesa Fonterra para la compra de la cooperativa con sede en Sunchales.
El titular de la Asociación de Trabajadores de la Industria Láctea de la República Argentina (Atilra), Héctor Ponce, exigió hoy a los directivos y autoridades de SanCor que negocien que la empresa neozelandesa Fonterra para la compra de la cooperativa con sede en Sunchales, al mismo tiempo que descartó que los costos laborales incidan en la productividad y en la formación de los precios de los productos lácteos.
"Fonterra es una empresa muy seria, con importante presencia internacional que hace tiempo está buscando producir fuera de Nueva Zelanda. Bienvenida Fonterra, que también es una cooperativa, y si logra ser la empresa que va a estar comprando a SanCor es porque viene para quedarse, para producir y para competir", indicó Ponce en declaraciones radiales.
"Si se genera una Sociedad Anónima en donde un tercero va a poner el dinero y las condiciones para que la empresa sea sustentable, hay que ver qué piden conservar quienes hoy manejan la cooperativa. Exigimos que se hable en forma objetiva y responsable: con SanCor se ha perdido muchísimo tiempo", agregó el dirigente gremial.
Ponce, recientemente reelecto, expresó que "hace más de dos años opinamos que debía buscar un aliado de características importantes, vinculado con la actividad láctea, para generar confianza y afianzar los mercados. Este tiempo perdido ha provocado deterioros importantes.Yo creo que se está a tiempo de recuperarla, pero debe privar la racionalidad de quienes administran y manejan a la cooperativa".
En cuanto a los costos laborales y su incidencia en la productividad y la formación de precios de los productos lácteos, Ponce remarcó que "de manera malintencionada se quieren bajar los costos apuntando a la estructura salarial" y utilizó el ejemplo de la empresa Saputo "que tiene importantes niveles de productividad (alrededor de 3.000 litros por trabajador por día), mientras otras usinas de baja tecnificación apenas llegan a los 1000".
A raíz de esto, Ponce aseguró que "son los mismos trabajadores: la diferencia tiene que ver con la tecnificación que logran unas y otras empresas. Es un error tremendo creer que la productividad se tiene que dar por los trabajadores, es la tecnología y el capital de trabajo lo que la generan.
Según los últimos análisis realizados por el gremio, puntualizó Ponce, con un litro de leche ultra pasteurizada que en góndola se paga $27, la industria utiliza $1.09 para pagar salarios y todas las cargas sociales, por lo que "si la empresa está tecnificada, los costos bajan considerablemente".
El titular del gremio lechero informó que la discusión de un nuevo convenio colectivo de trabajo entró "en una instancia final" y que solo falta la realización de una Asamblea General con los delegados congresales para informar el nuevo acuerdo.
"La negociación está cerrada, pero hay que bajarlo a los trabajadores. Estamos satisfechos por la negociación, porque había demasiados intereses contrapuestos a los derechos de los trabajadores, pero logramos conservar esas conquistas. Pusimos nuestra parte para que podamos dinamizar el trabajo dentro de las empresas, a nosotros nos deja conformes y también al sector industrial", aseveró.
Por último, descartó que este acuerdo esté sujeto a la situación de SanCor y la asistencia financiera que el Gobierno Nacional aún le adeuda a la cooperativa.
"Nosotros no formamos parte de esta determinación. El convenio que nosotros firmamos es independiente de la relación del Gobierno Nacional con la cooperativa SanCor", concluyó. (Télam)