Angiografía cerebral, un estudio clave para el tratamiento de aneurismas

La angiografía cerebral es uno de los métodos fundamentales para detectar precozmente un aneurisma ya que permite observar y analizar el flujo de sangre del cerebro.
Igual que en otras partes del cuerpo, el cerebro está compuesto de células vivas o neuronas que necesitan del suministro de sangre por parte de las arterias, para proporcionarle oxígeno y elementos nutritivos.
La ruptura de estas arterias y particularmente la de una dilatación anormal que puede formarse en la pared de una de ellas, denominada aneurisma, es la responsable de un gran número de derrames sanguíneos o hemorragias cerebrales.
Estos derrames pueden pasar desapercibidos causando pequeñas molestias, como dolor de cabeza, mareos o vómitos, pero también pueden ser graves, produciendo cuadros neurológicos importantes como las hemiplejias (parálisis), el coma (pérdida de conciencia) o la muerte.
En un 70% de los pacientes que lo padecen el cuadro es grave, por lo que la consulta debe ser inmediata, su diagnostico precoz, y el tratamiento especializado y oportuno, permitiendo esto evitar consecuencias mayores y preservar la vida.
La angiografía cerebral es uno de los métodos fundamentales para detectar precozmente un aneurisma ya que permite observar y analizar el flujo de sangre del cerebro.
En diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO, el neurocirujano endovascular, Raúl E. Villafañe (MP-16012/6) del Instituto Internacional de Neurociencias de nuestra ciudad, explicó en qué consiste el estudio que ayuda a prevenir los aneurismas y también qué es la cirugía endovascular, que utiliza los principios de la angiografía para tratar este grave diagnóstico.
"Para realizar estos procedimientos se requiere de un aparato de radiología de alta resolución (angiografo) que debe estar instalado en los centros de salud, ya que las horas trascurridas desde el inicio de la ruptura del aneurisma son cruciales para la recuperación", remarcó el doctor Villafañe.
Adelantó que en nuestra ciudad se espera contar a la brevedad con ésta aparatología en el Hospital J. B. Iturraspe para que toda la población de San Francisco y de la región pueda ser asistida en tiempo y forma.
El médico destacó que si una persona tiene un aneurisma cerebral, "debe saber que la cirugía no es la única terapia eficaz existente para solucionar el problema. Un nuevo y seguro procedimiento mínimamente invasivo, denominado embolización de aneurismas cerebrales, trata eficazmente ésta patología sin el impacto físico y doloroso de la cirugía y sin utilizar anestesia general".
Dr. Raúl Villafañe
- ¿Qué es un aneurisma cerebral?
Es una dilatación anormal en la pared de una arteria. La mayoría de las veces es de origen congénito aunque los traumatismos y las infecciones también pueden crear aneurismas. Cuando un aneurisma cerebral se rompe, la sangre fluye hacia un espacia que rodea al cerebro, denominado espacio subaracnoideo. Se provoca entonces una hemorragia subaracnoidea. Se estima que del 2 al 5% de la población es portadora de un aneurisma cerebral y en los Estados Unidos se producen 50,000 hemorragias subaracnoideas anuales debidas a aneurismas. La hemorragia subaracnoidea es una emergencia médica.
Del 10 al 15% de estos pacientes correrá riesgo de vida antes de llegar al hospital para tratarse y mas de la mitad podrá fallecer dentro de los primeros treinta días posteriores de producida la primera hemorragia. De los sobrevivientes, el 30% aproximadamente correrá el riesgo de sufrir una nueva hemorragia durante las primeras dos semanas posteriores. La sangre derramada irrita a las arterias pudiendo provocar el cierre de las mismas (entidad denominada vaso-espasmo), situación grave capaz de dejar sin irrigación un sector del cerebro, provocándose entonces un infarto cerebral.
Todo lo descripto es prácticamente inevitable sin un diagnostico precoz y un tratamiento especializado oportuno. Por lo tanto, el tratamiento del derrame cerebral por un aneurisma roto, consiste en la búsqueda del aneurisma afectado mediante la realización precoz de una Angiografía por cateterismo cerebral, proceder a sus tratamientos y prevenir a tratar el vaso-espasmo cerebral. Si un aneurisma es diagnosticado antes de que se produzca el derrame cerebral, los riesgos que pueden implicar su tratamiento en la forma programada son muy bajos.
- ¿Cómo se produce un aneurisma cerebral?, ¿Son hereditarios?, ¿Es necesario que los familiares se hagan exámenes?
Los aneurismas son resultado de una debilidad en un punto de la pared arterial, haciéndola entonces vulnerable a la presión que ejerce la sangre sobre este sector. De esta manera, la arteria comienza a dilatarse puntualmente como un "globo" por el que también circula constantemente sangre a presión. De allí el alto riesgo a que este sector de pared arterial afectado se rompa. La mayoría de los aneurismas no se deben a ninguna enfermedad en particular, sino que son congénitos o sea que la persona los posee desde el nacimiento.
Se recomienda realizar un estudio de angiorresonancia o angiografía por Tac Helicoidal a todos los familiares directos -hijos, hermanos, etc.-, de pacientes afectados por aneurismas. Durante muchos años, los pacientes portadores de aneurismas cerebrales solo podían tratarse a través de la cirugía convencional. Hacia fines de la década del 80 y comienzos del 90, atendiendo a la necesidad de poseer una respuesta menos traumática para estos pacientes, surge la Neurorradiología Intervencionista. Desde entonces, casi 2000 aneurismas han sido tratados con éxito en nuestra institución a través de esta revolucionaria técnica.
- ¿Qué es una angiografía cerebral o angiograma?
La angiografía cerebral es un estudio diagnóstico, que se realiza habitualmente a través de una punción en la ingle, lo que permite introducir un fino catéter (tubo hueco y muy flexible), con el que se navega o circula por las arterias de constaste a fin de pacificar y visualizar, con la ayuda de rayos X, las arterias y venas del cerebro, identificar de esta manera la causa del derrame y la localización del aneurisma que provoco el sangrado.
- ¿Cómo pueden tratarse los aneurismas cerebrales?
Con la información que proporciona la tomografía computada (TAC), resonancia magnética (RM) o la angiografía digital (AD) se puede tomar la decisión de cómo tratar el aneurisma, sea mediante una operación convencional o mediante técnicas endovasculares mínimamente invasivas.
- ¿Qué es una cirugía convencional?
La operación denominada convencional consiste en la apertura del cráneo, la identificación del aneurisma y la colocación de una delicada pieza metálica (clip) en su cuello para ocluirlo, y evitar de esta manera que siga ingresando sangre al mismo; es obviamente de mas riesgo y no puede hacerse luego del cuarto día del sangrado.
- ¿Qué es una cirugía endovascular?
La técnica endovascular utiliza los principios del a angiografía. Se realiza avanzando un micro catéter a través de las arterias hasta el interior del aneurisma, para posteriormente ocluirlo con diferentes materiales -resortes de plástico, balones-. Este método se denomina embolización.
También se pueden colocar unos dispositivos especiales denominados stents, que son elementos tubulares que se colocan en la pared interna de las arterias para ocluir de esta forma el cuello del aneurisma. Si el paciente es embolizado, la internación generalmente es de dos días, dependiendo de esto del estado previo del paciente, del tiempo transcurrido desde que se produjo la hemorragia y de la presencia o no de vasoespasmo.