Amor a la patria: tiene un mástil con la bandera argentina en el patio
Julián Alberto 'Baby' Ruiz hace flamear desde hace 15 años la bandera argentina en su patio. Un mástil como el símbolo más profundo de amor a la patria.
Desde hace 15 años, una vivienda ubicada en avenida Cervantes 2909, exhibe orgullosa un mástil en cuyo extremo superior flamea la bandera argentina.
La vivienda es propiedad de Julián Alberto 'Baby' Ruiz, un vecino de 78 años, jubilado, que muestra un profundo sentimiento patriótico traducido en un gran amor por la bandera.
"Desde muy pequeño, cuando iba a la escuela primaria, aprendí a considerar a nuestros símbolos patrios. Siento un profundo sentimiento patrio y en su momento entendí que en mi casa debía estar presente la bandera argentina", aclaró Ruiz en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO.
Una vez que decidió contar con un mástil en el patio de su casa, este vecino consiguió fabricó uno de tamaño pequeño que podía observarse desde afuera debido a que la casa no contaba con un tapial. Con el paso de los años, la vivienda incorporó un muro al frente y Ruiz vio necesario tener un mástil más largo: "Fue necesario ampliar la altura del mástil porque pensábamos que la casa debía tener una bandera colgando bien alto". Fue así que gracias a un amigo que tiene una chatarrería consiguió lo que buscaba, lo que terminó siendo un regalo debido a su amor por la insignia patria.
"Desde muy pequeño, cuando iba a la escuela primaria, aprendí a considerar a nuestros símbolos patrios. Siento un profundo sentimiento patrio..."
Un patriota
Ruiz se enorgullece cuando comenta cada anécdota. Una de ellas -recordó- fue cuando un amigo y su pequeño hijo fueron a comer a su casa y el niño le preguntó al padre por qué había un mástil en la casa, como en las escuelas. "Porque es un patriota", le respondió.
La bandera permanece siempre al tope del mástil porque "solo se arría cuando hay que cambiarla. La última vez fue el pasado 20 de junio: "La anterior está guardada para que en un determinado momento y de acuerdo a lo que establece el protocolo para estos casos, se establezca para hacerla desaparecer", explicó.
Ruiz aclaró además unas costumbres relacionadas con el uso de la bandera según lo cual la insignia nacional "no se lava ni tampoco se dobla y mucho menos se plancha. Solo al momento de arriarla se hace un pliegue especial y luego existe un protocolo especial para proceder a su destino final", comentó.
Consultado acerca de cómo nació el amor por la bandera, este vecino no dudó en señalar que lo aprendió en la escuela: "Cuando estudiaba en la primaria, desde que iba a jardín de infantes, se nos enseñaba el respeto por los símbolos patrios, el himno y la escarapela. En junio hay una sucesión de días en los que se recuerdan y para esas celebraciones utilizo distintas escarapelas que tengo también en diferentes variedades", indicó. Estas forman parte de una colección personal: "Donde voy encuentro alguna que me gusta y la añado a la colección. Esto me llevó un tiempo para conseguirlas y me permitió tenerlas con distintos motivos como de la Antártida Argentina, de las Malvinas, de Misiones, otras que unen a la Argentina con Chile, con Paraguay, con Uruguay o Brasil. Hay escarapelas con formas de la Argentina, de la guitarra, entre otras", contó.
Julián Alberto 'Baby' Ruiz muestra su colección de escarapelas a LA VOZ DE SAN JUSTO
Presente en los actos
Además de tener una bandera en el patio y una colección de escarapelas, Baby no falta a los oficiales patrios: "Cada vez que se hacen actos oficiales no dudo en ir y estar presente en la celebración".
Además, Ruiz se define como un apasionado de la historia: "Siempre me ha gustado la historia", afirmó, y recordó que el autor que más le impactó y contribuyó a su sentimiento de argentinidad fue José Hernández a través de su obra 'Martín Fierro'. "Esa es una Biblia para mí", sostuvo, agregando a su lista el Facundo, de Domingo Faustino Sarmiento, que según su visión "tiene muy buenas enseñanzas que todos deberíamos tener muy en cuenta como una historia muy importante que nos hubiera ayudado a formarnos mucho mejor como argentinos".
La bandera permanece siempre al tope del mástil porque "solo se arría cuando hay que cambiarla; la última vez fue el pasado 20 de junio"
Falta de valoración
Sobre la época actual y el amor de los jóvenes por la patria, Ruiz fue claro: "Lamento que se hayan ido perdiendo en cierta manera los sentimientos patrios en mucha gente. La juventud no valora los símbolos como la bandera o la escarapela".
Recordó además que "en una oportunidad estuve en San Lorenzo y todos cantamos Aurora frente a la bandera junto a mis compañeros de la Peña 1939, y fue algo muy emocionante hacerlo en ese contexto".
Por último, este vecino patriótico rescató la importancia que tiene la escuela junto con la familia en la incorporación del sentimiento de pertenencia de cada uno de nosotros para con los símbolos patrios: "En la escuela es donde nos formamos como personas; si bien hoy la familia está un poco más disgregada, en ese contexto los chicos no están recibiendo la misma formación de respeto a la patria o a sus símbolos", concluyó.